conflictos de interes

capitulo 6

Abro la puerta de mi departamento y no hay nadie, es la primera vez en dos semanas que llego y no me encuentro con el aroma a comida casera o a mi madre sentada frente al televisor viendo su novela turca.

Busco si dejo alguna nota pero no hay nada. Me descalzo y voy hacia la heladera, espero que al menos haya algo de comer. Nada.

Al parecer su cabeza de novia hizo que se olvide de mí. Algo voy inventarme con medio queso cheddar, un huevo y dos fetas de jamón. Al menos tengo cerveza, si hay papas puedo fritarlas y listo

Pero antes de empezar me pongo algo mas cómodo, me cambio por una musculosa y unos short de jean, pongo algo de música y preparo mi cena. Una vez que tengo todo listo me acomodo en mi hermoso balcón del séptimo piso con vista a los bosques de Palermo. Le tomo una foto a mi cena y lo subo a instagram con el título "máster chef un poroto"

-es hora de hacer frente a los mensajes que evite todo el día, pero antes un sorbo de cerveza.

El primer mensaje es de Mateo, ¿y el cómo tiene mi número?

Mateo: espero que aceptes las disculpas de mi hijo y vuelvas a trabajar con nosotros, puede ser un poco estúpido pero te aseguro que vas a aprender mucho a su lada. No le comentare lo de hoy a tu madre

Mamá: Mateo me invito a cenar y pasar la noche con él en su casa. Pedite algo para comer, te quiero.

Al menos ahora sé donde esta

Vanesa: cuñada te espero el domingo en el baby shower, no faltes

Y ahora era el turno de ver que se decía de mí en la empresa, me metí en el grupo de las chicas y comencé a leer mensaje por mensaje desde que les había dicho que ahora trabajaba para Sebastián

Melisa estaba celosa por que trabajaba para él, me describió gráficamente lo que le haría si se quedara encerrada en el ascensor, a eso le siguieron burlas de como un hombre como él jamás se fijaría en alguien como ella, ella se enojo y les dejo de hablar, no había ninguna mención a mi renuncia. Tal vez nadie la escucho.

La notificación de un correo llego mientras terminaba mi cena, era de Sebastián. Parece que no duerme.

De: Sebastián Tortonese

Para: Ámbar Martínez.

Revise los horarios suministrados a recursos, mañana no tiene clases, la quiero a las 8:00 sentada en su escritorio.

Pd: no me llames asshole.

Prefiero no responderle, termino de cenar y me doy una ducha. Solo queda un días más y el fin de semana llega. Solo un día más. Tal vez pueda organizar una salida con mis amigas y quedar con Matías, porque tengo que admitir que Tortonese no es el único que anda mal cogido.

Mi despertador suena, son las 7:00 y quiero matar a alguien, es demasiado temprano y hace frio. Pero si ayer estaba súper soleado, maldito calentamiento global. Me levanto y comienzo mi rutina, lavo mi cara, cepillo mis dientes y ato mi pelo. Me visto con mi aburrido uniforme de todos los días y salgo de mi habitación. El departamento sigue vacio, reviso la hora y voy bien de tiempo, incluso puedo pasar por una panadería y comprar unas facturas para la oficina, tal vez así mis amigas se olvide del desplante que les hice ayer. Agarro mi tapado y salgo, tampoco tengo clases hoy, así que voy mucho menos cargada de lo normal

Andrés se sorprende al verme llegar -¿te caíste de la cama?

-nuevo horario,

-y no te gusta para nada -niego y me subo al ascensor. Antes de ir hacia mi escritorio paso por el comedor, Andy y Diana ya se encuentran ahí.