Capitulo 32

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Sebastián

- ¿Dónde estamos?

-en mi bar

- ¿en tu bar? Since when do you have a bar? Why didn't tou tell me? (¿desde cuándo tenes un bar? ¿Por qué no me dijiste nada?)

- ¿vos me contas cada cosa que pasa en tu vida? Recién hoy me decís la verdadera razón por la que te separaste.

Se hace un silencio entre los dos. Observo cada detalle en la decoración, la barra larga que se extiende a lo largo de todo el lugar, la mesa de pool en el fondo junto con un metegol y un tiro al blanco. Cuando estudiaba afuera solía venir todos los veranos y pasarlo con él en la costa. En los últimos años se nos ocurrió la loca idea de poner un bar, uno muy parecido al que estoy viendo ahora.

- ¿ya reconociste el diseño?

-algo, la cerveza es...

-artesanal, abrí una fábrica en Tandil, soy mi propio proveedor tal como lo planeamos. Cuando vos digas, abandonamos nuestras vidas y nos dedicamos a la fabricación y comercialización de cerveza artesanal.

- Today, that's a very tempting idea (hoy es una idea muy tentadora)

-Sebastián, no quiere ser chusma, pero voy a serlo, porque no esperes que después de la bomba que me tiraste me quede calladito

-primero pedime una cerveza -levanta la mano y llama a una de las camareras le pide dos cervezas negras y un plato con maní.

-listo, habla. Tenemos una hora de tranquilidad. Después la gente comienza a llegar y se vuelve bastante ruidoso.

-fue como pasa en las películas, un día llegué más temprano que lo de costumbre de trabajar y encontré a mi esposa con otro hombre en la cama. Solo que este hombre era mi viejo

-tiene que haber algo más, ¿y si Hanna lo drogo?

-no fue tan película, además vi muy bien la cara de ambos, ninguno parecía estar bajo influencia de ninguna droga.

- ¿y que explicaciones te dieron?

-el ninguna, intento una vez, pero no quise escucharlo, ella dice que lo hizo bajo amenaza. Que Matheo tenía planeado quedarse con toda la herencia de mi tío, como en ese momento él ya estaba muy enfermo y Matheo era su apoderado legal, se encontraba en condiciones de hacer y deshacer a su enojo las decisiones de mi tío.

- ¿y le creíste?

-no es una cuestión de creer o no creer. Lo vi, nadie me lo conto. Sea cual sea la razón me parece imperdonable. Sobre todo a Matheo. Nuestra relación ya venía desgastada, pero eso último fue...

-entiendo, ¿y Hanna?

- ¿Qué pasa con ella?

-Te acabas de acostar con ella. ¿la extrañas? ¿queres seguir con ella?

-No, no quiero volver con ella. No puedo volver con ella. Pero todavía siento algo, durante micho tiempo fue la única familia que tuve.

-siento que estamos teniendo una charla Mili Pili y no estoy tan ebrio para hacer eso, voy por algo más fuerte que una cerveza.

Mientras Tincho se levanta a buscar eso más fuerte aprovecho y reviso mi celular. No hay ningún mensaje ni llamadas perdidas, al parecer en la oficina se arreglan perfecto sin mí. Ámbar se arregla perfecto sin mi...

-No, no, no -Tincho me saca el teléfono de las manos y deja una botella de Jagermeister en la mesa – nada de teléfonos por esta noche. Estoy seguro que esa eficiente asistente de lindas piernas que tenes va poder resolver cualquier problema.

conflictos de interesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora