conflictos de interes

CAPITULO 29

Esperamos a que la ultima persona abandonara el piso para encerrarnos en su oficina y no levantar sospechas. No se vería para nada bien que me vean encerrarme con el después del horario de trabajo.

- ¿los de limpieza a qué hora vienen? -desconecta el teléfono y se afloja la corbata.

-vienen de madrugada -me siento en la silla que esta frente de su escritorio, se me queda viendo con una sonrisa pícara en la cara, camina hasta mi lado y me levanta con silla y todo dejándome al lado de la suya.

- I don't bite (no muerdo)

-mi nalga izquierda no opina lo mismo -me alejo un poco de su silla y se contiene para no reír -bueno, ¿vamos a verlas o no? Tengo clase de zumba en una hora.

-no voy a preguntar qué es eso -me responde bromeando, se supone que estamos pelados, ¡QUE DEJE DE SER SIMPATICO!

agarra el sobre y saca entre 10 y 15 fotos, todas quedan expuestas ante los dos. Agarro una, es de la primera noche que estuve en cocodrilo. Tengo un vaso de champan si la memoria no me falla y estoy perreando con Jona.

-bueno esta es bastante tranquila, debe haber miles de esas fotos en las páginas de los boliches a los que solemos ir -la dejo en su lugar y tomo otra. En esta Sebastián me está sujetando por la cintura mientras mi espalda está pegada a su pecho.

-esa noche estaba demasiado... borracha. Desde que llegue los tragos no paraban de llegar a nuestra mesa. ¿ellas sabían de eso? ¿de lo que Omar quería hacer?

-creo que no, al menos no esa noche. La segunda vez si lo sabían, pero se aseguraron que Omar no pudiera hacer nada –eso me alivia, las chicas me caen bien y no quisiera creer que estaban de su lado. Dejo la foto y agarro otra.

Diferencia de las otras esta es en blanco y negro, Sebastián y yo estamos bailando, nuestras frentes están unidas. Es una linda foto, siento su mirada fija en mí, pero evito hacer lo mismo. Estas fotos no son nada. Junto todas y son más de lo mismo, un poco de cachondeo, los dos yéndonos en su auto. Nada que haría avergonzarme.

-Omar no tenía nada, tendrías que haber dejado que las publique.

- And let everybody know? (¿y dejar que todo el mundo se entere?) –mi vanidad y la actriz de telenovelas que llevo dentro me pide que le dé una cachetada y me vaya de esta oficina, pero mi orgullo me dice que no le deje ver lo mucho que me acaba de molestar la forma en que se acaba de escandalizar por que se conozca que estuvimos juntos un par de veces.

Intento contar hasta tres, pero no funciona, pienso en un momento feliz pero solo me viene a la mente esa primera noche que bailamos y me enojo más, entonces exploto -¡¡¿estoy lo suficientemente buena para que me garches, pero no soy lo suficientemente decente para decir que lo hiciste?!! – me levanto para irme.

- ¿Qué?You're turning my words around (estas dando vueltas mis palabras)

-por favor Sebastián, no pudiste disimular tu cara ante la idea. Quédate tranquilo que no va volver a surgir la remota posibilidad de que nos fotografíen juntos –evito la cachetada y me pongo de pie para salir de esta oficina. Sebastián es más rápido y me bloquea la puerta.

-de acá no te vas hasta que me escuches, ¿Qué clase de persona pensas que soy?

-una que es capaz de venderme solo para tener una lista de números de teléfono, córrete que me quiero ir.

-I already apologised (ya me disculpé por eso) me arrepentí por haber aceptado y traté de frenarlo. What do i have to do for you to forgive me? (¿qué tengo que hacer para que me perdones?)