capitulo 16

766 57 41
                                    



Paula se queja mientras él la ayuda a caminar, después de vomitar suele quedar como nueva y lista para seguir la fiestas. Pero esta vez parece que le va costar un poco recuperarse.

Sebastián me mira y está esperando una respuesta ¿me quedo o me voy? hay miles de razones por las que no debería de quedarme y solo una por la que lo haría.... Celos.

Tengo celos de que mi amiga este siendo sostenida por él, tengo celos de la remota posibilidad de que si no subo pase algo entre ellos dos. Y tengo rabia por no poder hacer un súper planteo dramático en medio de la calle por no tener ningún derecho a estar celosa.

La realidad es que yo puedo irme caminando a casa y dejar a mi amiga. Pero esa no es una opción, como tampoco lo es subir y pasar la noche otra vez con él, porque estaría cruzando un límite que no nos conviene a ninguno de los dos.

La única solución que se me ocurre es la de subir, esperar a que Paula se recupere tal vez darle algo de comer y perdir un taxi. ¡Planazo!

-For god sake, there isn't any taxi around and you're not goint to walk alone! (¡por dios, no pasa ningún taxi y ni sueñes con que te deje ir caminando sola!)

-voy a subir, solo nos quedaremos hasta que ella esté un poco mejor y pueda pedir un taxi. Pero anda bajándole al inglés.

-ok –fue su respuesta y luego se rio como el borracho que era al darse cuenta que volvió hablar en ingles. Con un poco de esfuerzo subió a Paula en su espalda quedando a cococho de él. Empezó a caminar cantando ¡ok, ok, ok! Y Paula repetía lo mismo, aunque con una voz más apagada signo que se iba quedando dormida.

Es tu amiga, esta borracha, no la mates.... Es tu amiga, esta borracha, no la mates.... ¡malditos celos! ¡El no es nada tuyo!

Camino detrás de ellos, evitando que se caigan. Llegamos a la puerta de su edificio y él se para de golpe.

-¿Qué pasa? Abrí la puerta.

-mis llaves están en algún bolsillo de mi pantalón, you're gonna have to look for them (vas a tener que buscarlas) o Paula caput –y otro ataque de risa le entro de golpe. Por mí que Paula se inmole, aunque la idea de meterle un poco de mano no me desagrada. Una chica tiene que hacer lo que una chica tiene que hacer.

-date vuelta –hace la imitación de una gallina cacareando. Demasiado tiempo en el extranjero paso este tipo, ¿no puede simplemente decirme cagona? Pero de cagona no tengo nada, desde que las chicas hablaron del culo que tiene que tengo ganas de tocárselo un poco.

Primero tanteo la nalga izquierda y no hay nada, el se remueve un poco y se ríe mas fuerte, tanteo la otra y tampoco hay nada. El se gira quedando frente a mí y mueve sus caderas en una especie de meneo sexy –you have only the ones on the front left (solo quedan los de adelante)

-tengo un fuerte presentimiento que están en mi bolsillo izquierdo –se menea otra vez y se pega un poco más a mi cuerpo –prometo no moverme

Tanteo por arriba el bolsillo izquierdo pero no siento nada -¡ups! Entonces el derecho

Esta vez ya no podía solamente tantear iba a tener que meter mano, literalmente hablando. Evitando hacer contacto visual metí la mano en los bolsillos más largos y estrechos que vi en mi vida. El ya no reía.

-Ámbar...-le costó hablar, parecía nervioso, espero que no le estén dando ganas de vomitar, estoy tan pegada a el que me va manchar toda

conflictos de interesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora