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N i c o l e

La espalda de Harry se estira y sus músculos se tensan y se relajan cuando él elonga. Luego del sexo ha quedado tenso y adolorido, por lo que se queja y yo procedo a masajear sus hombros.

-Creo que necesito una ducha -me dice y luego gime debajo de mis manos -. Tienes unas manos maravillosas.

-Ya lo sé -jugueteo y se ríe.

Le doy un beso en el cuello y de pronto, una imagen de Penélope desnuda se me viene a la mente.

¿Debería contárselo? Se supone que confío en él, pero sinceramente me da miedo su reacción. ¿Se enojará? ¿Me gritará?

Dios...

Pero si no se lo digo, significaría alejarlo más y crear más espacios entre nosotros y nuestra relación. Y estoy decidida a no dejarlo ir otra vez.

Esta vez tiene que ser para siempre.

-¿En qué piensas, cariño?

-En ti -le digo -. Tengo que decirte algo.

¿Eso sería bueno para empezar? Ojalá no se moleste, ojalá lo deje estar...

-Está bien, te escucho.

Pero y ¿si me grita o toma sus cosas y se va?

No puedo decirle.

No puedo dejar que me deje otra vez.

No puedo permitirme a mi misma alejarlo otra vez por mis miedos, por mis errores.

La última vez fui egoísta y terminé sola, pidiéndole ayuda a mi ex. Esta vez tengo que seguir el consejo de Alex y confiar en quién me ama, en quien confía en mi por encima de todo. Tengo que darme una oportunidad para ser sincera y feliz. Por Harry. Por mí misma.

Pero no podía decirle...

-¿Qué tienes que contarme, amor? Sabes que puedes confiar en mi, ¿no es así? -me habló y su voz interrumpió todos mis pensamientos.

Ya estaba en esto; ¿que podría hacer? ¿qué podría decir?
Mentirle solo nos alejaría más.
Omitirlo resultaría en lo mismo.

No queda de otra.

-Esto..., ¿recuerdas la fiesta que había ido justo después de que te fueras, cierto?

-No me habías dicho nada de ninguna fiesta, cariño.

Sus ojos verdes se guiaron hasta mi, traspasandome, leyéndome la mente.

-¿Qué hiciste?

-Yo...

-Nicole... -presionó. Y mi boca cantó como pajarito.

-Hice un trío.

-¿Qué? -dijo y se incorporó. Ahora estaba de pie frente a mi, con los brazos colgando, pero su expresión no mostraba enfado... ni sorpresa. ¿No le sorprendía?

Mejor dicho, parecía estar aliviado. ¿Aliviado de que estuviera abriendo mi corazón y confiando en él?

-¿Con quién...?

-Penélope y su novio, Randy.

Su mano voló a su cabello y se lo echó para atrás, peinándose. Apoyó una mano en un mueble que estaba a su lado y tapo boca con su mano libre.

-Fue una total estupidez. Estaba un poco borracha y habíamos bailado... -comencé a hablar, pero él me interrumpió con algo que definitivamente no vi venir.

MIENTRAS SEAMOS JÓVENES 2: Girl Almighty |Harry Styles|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora