•Lα cαrtα• ||Alan Navarro •CD9•||

26→ "Nunca sería algo para Alan"

Narra _____:

Durante toda la clase de ciencias, Alan estuvo volteando, pero no quería hacerme ningún tipo de ilusiones, a fin de cuentas... Él quería a América.

La maestra de ciencias nos acomodó en parejas y afortunadamente no me tocó con Alan, sino con Jos.

-¿Te sigue gustando Alan?- Me preguntó en un susurro y me sobresalté.

-Jos, ¿Me prestas tu libro?- Le pregunté intentando evadir la pregunta.

-No me cambies de tema, _____- Dijo serio.

-Jos- Suspiré- ¿Qué más da si me gusta o no me gusta? Él está loco por su anónima- Rodé los ojos.

-¡Tú lo eres!- Gritó y todos nos miraron extraño.

-Señor Canela, señorita Gómez ¿Pasa algo?- Nos preguntó la maestra dejando de escribir en el pizarrón.

-No, maestra- Negué con la cabeza y seguimos con lo nuestro- Jos, cállate- Le susurré.

-Lo siento, pero sabes que es cierto- Comenzó a escribir- Tú eres su anónima, no América, así que deja de fingir que no pasa nada.

Suspiré y seguí escribiendo para ahora si ignorar a Jos. ¿Qué más daba que yo fuera la anónima de Alan? Esto no era una telenovela. Aquí no iba a haber alguien que llegara y le dijera a Alan que yo era su anónima, no América, y él automáticamente se enamoraría de mí. Él ahora estaba enamorado de alguien más y yo no pensaba llegar y quitarle su felicidad solo porque no soy la chica a la que quiere. Nunca sería algo para Alan; apenas y me tomaba en cuenta.

~*~*~*~

En literatura, fuimos a la biblioteca a leer el libro que habíamos llevado y hacer un pequeño resumen.

Alan también estaba allí.

No había nadie de sus amigos ni de mis amigos en esa clase, así que pues... cada quien iba por su cuenta.

Miré a Alan y él traía la mirada baja. Pensé en acercarme a él, pero después llegó América y lo abrazó y el pensamiento se esfumó de pronto.

Me senté en una mesa y abrí mi libro. Era el de "Ciudades de Papel". Comencé a leer y entonces, cuando empezaba a adentrarme a la historia, alguien llegó y se sentó a un lado de mí, sacándome completamente de la historia. Lo miré molesta, pero al ver de quien se trataba, mejor decidí guardar silencio y seguir leyendo.

-¿Qué hay que hacer?- Preguntó Alan, así que lo miré de reojo y vi que me estaba viendo.

-Perdón ¿Me lo decías a mí?- Parpadeé y me le quedé viendo.

-Bueno sí, somos los únicos sentados aquí- Rió y casi me golpeo por estúpida. Era obvio.

-Ah si, lo siento- Negué con la cabeza- Tenemos que leer una parte del libro y hacer un resumen sobre lo que leíste- Le sonreí nerviosa.

-Gracias- Me sonrió.

Yo asentí y seguí leyendo. En realidad no podía concentrarme con Alan tan cerca de mí. Su perfume, la forma en la que movía los labios, la forma en que fruncía el ceño, la forma en la que jugaba con sus manos... Todo me distraía.

Supongo que se dio cuenta de que lo miraba, porque alzó la vista con cierta timidez y volví la vista al libro, totalmente roja.

-¿Qué libro lees?- Me preguntó acercándose más.

-Ehh...- Comencé a ponerme bastante nerviosa- Ciudades de Papel- le mostré el libro.

-¿Está interesante?- Volvió a preguntar.

-Lo que llevo me ha gustado- Sonreí nerviosamente.

-Que bien- Me sonrió y yo le devolví la sonrisa nerviosamente.

Hubo un momento de silencio, así que decidí mirarlo para ver si ya se había alejado, pero no... Estaba a diez centímetros de mí. Rápidamente regresé la vista al libro y así pasamos toda la clase, hasta que tuvimos que irnos.

-Oye- Escuché que la voz de Alan me llamaba, así que lo miré- Eh visto como te llevas con Jos- Me sonrió- ¿Te gusta?- Volvió a sonreír, pero ahora pícaramente mientras caminábamos hacia la salida.

-¿Qué? No- Reí pero también me decepcioné, porque eso ahora me demostraba que no sentía nada por mí- Solo nos llevamos muy bien.

-Hay aja- Rió y yo rodé los ojos con una sonrisa.

-Es enserio- Asentí- Es un buen chico y es atractivo, pero nunca lo vería de otra forma.

-Bueno, te creeré- Volvió a reír y yo solo sonreí.

-Tú si quieres a América ¿Verdad?- Lo miré.

-Sí- Asintió- Es mi anónima y siempre quise encontrarla- Sonrió- Creo que tengo suerte.

-Sí- Suspiré- Supongo que es bonito que tu amor si te corresponda- Sonreí a medias.

-Sé lo que se siente que alguien a quien quieras te ignore- Me miró.

-Pero duele más que estés enamorado de esa persona- Suspiré.

Alan me miró por unos segundos e iba a decir algo, pero varios chicos se acercaron a él e interrumpieron nuestra conversación.

-Alan ¿Es cierto que te le vas a declarar hoy a América?- Preguntó uno de ellos y yo tragué saliva y lo miré.

-¿Apenas? Yo creí que ya lo eran porque se tratan como novios- Habló otro chico y a mi me dieron muchas ganas de llorar, aunque me aguanté.

-Bueno sí, pero necesito que guarden el secreto. No quiero que ella se entere- Y con eso, terminé de romperme. Me desvié del camino y caminé más rápido hasta el salón.

Varias lágrimas corrieron por mi rostro, pero las limpié y seguí caminando para así evitar que alguien me viera. Era algo exagerado estar llorando, pero enserio me Asentí muy mal.

Definitivamente nunca sería algo para Alan.

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