Beatrice Prior's sister.

Comienzo a lo grande. 2/2

T r i s

-Bien-habló Cuatro, parándose en frente de lo que parece ser una sala de espera-. La primera en entrar vas a ser tú, Molly, y de mientras el resto de vosotros vais a estar aquí, esperando. ¿Alguna pregunta, o ya sabéis cómo tenéis que comportaros durante mi ausencia?

Will elevó la mano, y Cuatro le concedió su turno para hablar.

-¿Cuánto durarán las simulaciones?

-Buena pregunta, propia del eructito que eres. La duración es indefinida, puede durar desde cinco minutos a una hora, pero créeme, lo más probable es que dure una hora o incluso más, así que si queréis ir a desayunar a la cafetería... Será mejor que vayáis ahora. Pero cómo salga por esa puerta a llamaros y no estéis aquí... Os arrepentiréis de haber nacido. Vamos, Molly, entra.

Cuatro se llevó a Molly al interior de la sala del paisaje del miedo, y nosotros volvimos a dar la vuelta para ir a desayunar.

-¿Qué es Eructito?-Cuestionó Lily.

-Un insulto, Lily, así que más te vale no llamarme eso si no quieres que te robe la comida en la cafetería.-Respondió Will, en tono divertido.

-Atrévete, eructito.

Christina, Al y yo no pudimos evitar reír ante la respuesta de Lily.

-Oh, ya verás. Te vas a arrepentir de haberme llamado eso, o si no, ya lo verás.

Después de entrar en la cafetería, Lily se llenó la bandeja a más no poder con toda la variedad de postres que había, por si Will la robaba algo, mientras los demás sólo íbamos con un vaso de leche y un muffin. Algo me dice que vamos a tener que coger todos de su bandeja, si queremos subir a la sala de espera a tiempo.

-Uy, me parece que tomaré esto prestado.-Empezó Will, cogiendo una cajita de zumo de manzana de la bandeja de Lily.

A ella no la molestó en absoluto, y no me extraña, tenía miles de zumos más.

Cinco minutos después todos nos habíamos terminado nuestro desayuno, mientras que Lily todavía tenía la bandeja a rebosar de productos.

-Te pasaste nueve pueblos-la reproché, mientras reía-¿Qué tal si subimos con la bandeja arriba, y comemos todo en la sala de espera?

A todos les pareció gustar mi idea, así que entre todos subimos la muy pesada bandeja a la sala, pero cómo casi todos los asientos estaban ocupados por los iniciados nacidos en Osadía, los cuales supongo que habrán llegado hace poco, decidimos dejar la bandeja en suelo, y nos sentamos a su alrededor a comer. Uriah, Lynn y Marlene se acercaron a saludarnos. Bueno, más bien Marlene vino a saludarnos, ya que Lynn sólo gruñó y Uriah miraba un trozo de pastel con los ojos muy abiertos y se le caía la baba.

-¿Podemos ayudaros a terminar todo este montón de oro?-Preguntó Uriah dramáticamente.

-Claro.

Hicimos el circulo más grande y comíamos los dulces mientras hablábamos de temas triviales, y si en esto consiste la segunda etapa estaré encantada de asistir aquí todos los días.

~°~

Ya sólo quedamos Uriah, Marlene, Christina, la bandeja todavía bastante llena de comida y yo en la sala, estomagados y cansados por la larga espera.
Lily salió hace un par de minutos de su paisaje, acompañada por dos osados que la guiaban. Me asuste mucho, salía toda sudada, roja, temblorosa y llorando, y sabiendo lo fuerte que es ella moral y físicamente, deduzco que yo me pondré peor, mucho peor.

-¿Sabéis? Si nadie va a terminarse esta preciosa tarta de chocolate, será un placer hacerlo yo mismo.-Dijo Uriah rompiendo el silencio, antes de coger una porción y empezarla a devorar con el comportamiento propio de un hombre de las cavernas. Vaya, parecía que no había comido en toda su vida, pero lo increíble es que acababa de comer hace menos de cinco minutos.