AMOR CIEGO

CAPÍTULO #8

-Él se llama... Damon Whisley.-me quede estupefacta al escuchar su nombre.-fue él en quien confiaba, fue él a quien le ayude cuando tenia problemas, fue él a quien defendí en varias ocasiones, y fue él quien me quito a la persona que más quería.

-No se que decir, no tenia idea de que la razón por la que se hablaban tan cortantes era por eso y lamento mucho lo que te sucedió no lo merecias.-dije sincera.

-Nadie lo merece Astrid, el problema es que las personas que más se enfocan en su pareja y más las respetan son las que más daño reciben. Lamentablemente la única manera de lograr que ese tipo de personas cambien es, causando el mismo daño hacia ellos para que de esa forma logren comprender el dolor que sentimos.- dijo dejandome sin palabras, es cierto pero, sigo sin entender que ganaría Damon al besar ala chica de su mejor amigo

-No se que decir. Tienes razón, mucha razón pero, ¿no seras capaz de causarles algún daño no?.-silencio

- Astrid, amar es destruir y ser amado es ser destruido.-dijo con seguridad.-solo te puedo decir eso.

Después de estar otro rato más charlando, decidimos que era hora de ir a casa. De camino a casa no hicimos más que cantar algunas canciones que salían en la radio. (Nota Mental) no permitirle a jayden cantar en voz alta canta espantoso, aunque fue algo gracioso.

Cuando llegue a casa mi mamá estaba muy preocupada por mi, ya que olvide avisarle que estaría un rato con jay tomando un café y platicando, además que no quería que se enterara del accidente.

-No volverá a pasar mamá. Lo olvidé, no quise preocuparte.-dije y en parte no mentía así que no hay problema.-¿me perdonas?.- dije asiendo un puchero.

-Astrid, si vuelves a hacerlo estarás castigada dos semanas ¿entendiste?.-dijo ya un poco calmada.-Como sea ¿que tal tu primer día?.-pregunto cambiando totalmente el tema.

¿Y ahora que le dirás?.-pregunto una voz dentro de mi.

La verdad es que no tengo idea.

Estaba a punto de contestar cuando jayden me interrumpió.

-De maravilla charlotte, hubiera visto a su hija creo que mañana mis amigos estarán más enfocados en ella que en mi, les agrado mucho.-dijo rápidamente, aveces me sorprende como le salen ideas tan pronto.-¿no es así Astrid?.-dijo sacandome de mis pensamientos.

-No seas exagerado jayden pero, si mañana te ignoran no te preocupes puedes hacerle compañía a Rocky.-dije burlandome de él.

-Por cierto ¿donde esta él?.-pregunto mi mamá. Oh no lo olvide, antes del accidente el salio corriendo.-Astrid

-Esta en casa de un amigo, lo lleve ahí por que no lo dejarían entrar con nosotros al local al que fuimos.-y hay esta otra vez salvandome de cualquier aprieto al que yo sola me meto.

-Bueno no olviden recogerlo más tarde.- dijo mi mamá.-jayden ¿te quedaras a cenar?.

-No quiero ser una molestia charlotte.-contesto jayden.

-Claro que no lo eres. ¿Me dirás que no te gusta la pizza y un par de películas?.-dijo fingiendo estar sorprendida.

-Obvio no. En ese caso sera un gusto quedarme a cenar.-dijo entre risas.

Esto se pondrá bueno. Solo espero que no aya elegido una película de terror, ya que si es así parará de gritar y no querrá terminar de verla.

Hicimos el pedido y treinta minutos después llegaron nuestras pizzas, resulta que eso de las películas ya lo tenia planeado ya que las tenia listas y si eran de terror. Pobre jayden, no podrá dormir esta noche y no sera por la película, si no, por los gritos de mi madre que asustaran más que la película.

**********

La película que eligió se llamaba: La noche del demonio 3. Y como dije, los gritos de mi madre se escuchaban por toda la casa pero no fue la única jayden se unió a ella, y así sus gritos y chillidos eran aun más insoportables. Por lo que dijeron, la película realmente asustaba, tanto que me contaron que durante ésta no pudieron dejar de abrazarse el uno al otro.

Como me hubiera gustado poder verlos, seria tan gracioso.

Luego de la película, limpiamos todo ya que se habían asustado tanto que ya no quisieron ver otra. Y ahora tenia un gran problema.

¿Cómo hacer que un jayden aterrado por una simple película, lograra poder llegar a casa a salvo?

-No seas cruel Astrid.-decía jay.-¿como piensas que podre irme, si aya a fuera me están esperando para llevarme a otra dimensión quien sabe cuantas criaturas del mal.-pregunto y yo solo podía reírme de esta situación.

-Jayden no existen esas criaturas del mal y no te llevaran a otra dimensión.-le repetía para que por fin se fuera a su casa y me dejara descansar.

-Eso lo dices tú pero, yo ¿cómo puedo estar seguro de ello?.-seguía diciendo.- vamos no pierdes nada.

-No jayden, no te quedaras en mi casa. Debiste pensarlo cuando aceptaste ver la película y más si era de terror.-dije cruzandome de brazos.

-Bien como quieras pero, si mañana no vengo temprano para llevarte al instituto será por que uno de ellos se apodero de mi. Lamentarás eso Astrid Pierce, me llevarás en tu conciencia toda la eternidad ¿me oíste?.-decía exageradamente.

-Prometo ir a tu funeral jay, adiós.-dije sin poder evitar soltar una risita, cerré la puerta y antes de darme la vuelta pude escuchar a jayden gritar como niña pequeña, luego escuche el motor de su auto hasta que al final ya no logre oír nada. En ese momento fue cuando ya no lo pude evitar y solté una enorme carcajada.

Luego con cuidado subí las escaleras y me dirigí a mi habitación. Necesitaba descansar hoy había sido un día de muchas emociones. Fue mi primer día de clases, fui atropellada, y me entere de que Damon fue el que traiciono a Jayden quien era su mejor amigo. Creo que merezco un descanso.