camino a casa

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La mamá de Andrés encendió su flamante Audi. Vaya! En serio está gente era de dinero. Su casa o mejor dicho castillo. Sus autos. Habitaciones. Todo era tan grande e increible. Me puse muy nerviosa cuando Andrés se quitó la camisa, Joder!!! Eso no debería hacerlo. Siempre que se saca la camisa yo ... Yo pierdo los estribos. Ver su torso desnudo es alucinate. Es todo un Adonis.

El hace las cosas sin pensar y yo no pienso cuando se saca la camisa.

-¿donde vives cielo?

Me daba un poco de timidez decir donde vivía ya que mi casa no era como la suya. Pero sí algo me enseñó mi madre es a levantar la frente y sentirse orgulloso por lo que se tiene y sobre todo porque esto se consiguió a punta se sacrificios.

- vivo en _______

-mmm ya. Sí se como llegar.

Mire por la ventana un poco incómoda ya que no sabía que decir. O no se como romper el hielo.

-¿Eres de la universidad cierto?

-sí

-Andrés me contó poco sobre ti. Y lo de la sanción. Me puedes contar más.

-yo...mmm... Claro ... Pues soy de la ciudad. Tengo dos hermanas casadas y un hermano. Vivo con mi mamá. Me gusta leer. La playa. Ir al cine... Supongo que eso... Y pues lo de la sanción fue en parte mi culpa no me gustan los chicos presumidos y...

-soltó una carcajada de repente  -pero sí Andrés es presumido , vanidoso y egocentrico . Es mi hijo pero al césar lo del césar.

- asenti con la cabeza- pues al principio no nos llevamos bien...el fue muy tonto.

-no me sorprende ...así que ...¿lees?

-sí

-deberías ver la habitación de Andrea y Andreina te encantaría. Casi casi que se compran la librería entera.

-¿En serio ?

-resoplo - te lo aseguro.- me miro fijandose un momento en mi blusa ahora roja. Luego siguió con la mirada puesta en el camino- siento lo de tú blusa...

-no se preocupe

- claro que sí. Te compare una .

-que? -los ojos se me abrieron como platillos . No iba a dejar que pagara por mi blusa.- no no por favor....

- tú dejamelo a mi ya veras.

- no tiene que hacerlo.

- claro que sí

-no pero...

-no digas más. Sabes a ellos no les importa mucho porque nunca les ha faltado nada. Como te pudiste dar cuenta tienen una vida cómoda. Pero yo se que no es tan fácil para ti o para otros. El dinero no se arranca como hojas a los árboles. De seguro tuviste que trabajar para comparte la ropa o tus padres y no es justo.

Yo sólo me quedé en silencio sin saber que decir. Era cierto lo que decía , en realidad sí tuve que trabajar para comprarme ropa. Yo vivía con mi mamá pero me gustaba tener mi propio dinero.

-¿color favorito?

-mmm...

- ¿blanco?

-sonrei - sí. Lo es. El blanco me gusta.

-listo . Blanco entonces. Por cierto.... Gracias por ayudar a Andrés ... A el se le hace difícil la carrera. El no quería eso. Pero su tía y su padre instieron en que el necesitaba aprender y pues ya sabes que todo tiene su consecuencia. Y como dicen vulgarmente a todo pavo le llega su navidad. Después de lo que hizo...

¿Consecuencias? ¿De que? ¿Porque? ¿A que se refiere ? Pero no pude preguntar porque justo se estacionaba en la acera de mi casa.

Bajé de auto mientras todas las vecinas desplegaban las cortinas y persianas para ver quién era el dueño del lujoso auto. Caras en negación pude llegar a ver. Y otras de asombro. Algunos creo que pensaron que andaba en malos pasos . Pero por mi lado su opinión no me importaba en lo más mínimo.

-listo. Por cierto creo que le gustas

-¿que? Yo... Gracias...yo no creo eso, pero gracias por traerme.

-de nada cielo y pues queda pendiente lo de la cena. Cuídate mucho.

- yo...claro

- adiós- dijo y puso en marcha el auto desapareciendo del mapa en unos segundos.

Pero que día! ¿Que le gusto ? Ja! Como sí fuera posible. Lamentaba el hecho de que su familia no supiera acerca de aún orientación sexual. Apuesto que aún mamá lo apoyaría en todo. Su familia era muy linda y por lo que me pude dar cuenta su mamá era una muy buena mujer a la que le interesa los demás.

-Angélica...- un chico abrió la puerta de mi casa.

-Daniel...

-¿quién era esa mujer?- sus ojos estaban hinchados y achinados. Tenía una barba que hace días no se rasuraba. El pelo enmarañado. Se lanzó hacia mi abrazandome y a pesar de que había decidido no verlo. No podía ser tan dura con el. Correspondi a su abrazo.

- es Danna... - susurre mientras su sollozaba abrazandome. El me necesitaba y yo estaría para el.

La dulce ironía de su nombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora