La dulce ironía de su nombre

la verdadera razón de su corte de cabello

Narra Andrés

Mamá se despedía haciéndole con la mano a lo lejos mientras el auto de Verónica desaparecía de vista.

Bajaron del auto mis hermana junto a mi mamá quien al momento de verme me abrazó muy fuerte.

- Andrés !- gritaron mis hermanitas abrazandome también. Las abrace muy fuerte sabía que lo que venía iba a ser un tanto duro. Vivir lejos de ellas cuando siempre las tenía a lado en cada momento y a cada instante...

- necesito hablar contigo hijo

- esta bien - llene de besos a mis hermanas y procedí a abrir la puerta.

-¿ que te pasó en el labio?- preguntó Andreina.

- nada -dije rápidamente

- yo si se que le paso... - dijo Andrea pero la fulmine con la mirada para que no siguiera.

- eso es lo que menos importa ahora - dijo mamá y abrí la puerta dejándolas pasar.

Ellas miraron todo el lugar con mucha atención. Caminaron un momento y luego se sentaron juntas en un sofá de la sala.

- es bonito - dijo Andreina

- pequeño pero bonito - dijo Andrea

- hijo no debiste desafiar a tu padre de esa manera.

- mamá el trato de separarme de Angélica

- no. Solamente la estaba probando.

- el no tenía que hacerlo. El Ángel no es de esa clase de personas y tu lo sabes muy bien.

-pero Andrés tu padre sólo trata de cuidarte.

- cuidarme y sacarme en cara todo su dinero.

- sólo lo dijo por decir...

- así fuera o no. El no podía tratarla así.

- como es que tu...

-¿ llegué a esos extremos?

- si. Te importó un bledo y corriste tras ella... dejaste todo. No te importó dejar el auto o el dinero. Y no es que yo no sepas que tienes un noble corazón hijo es sólo que...

- mamá yo no soy el engreído de antes. A ese lo podía retener con dinero, autos y vanidades. Yo no soy ese. Y no quiero serlo más. Porque cuando estoy con ella todo es diferente yo...

- oh ...- dijo Andrea

- por ... - Andreina amplio los ojos

- Dios... - dijo Andrea mirándola a Andreina.

-¿ que pasa? - las miré extraño frunciendo el seño.

- estas enamorado de ella !- dijieron ambas.

-yo... - no sabía que decir. Creo que era cierto. Y lo estaba si perdidamente porque no haría esto por ninguna otra chica. Porque nunca tuve la necesidad de mentirle a ninguna para poder acercarme a ella. Porque estoy sumamente colado por esa pequeña.

- bueno de eso no cabe duda - sonrió mi madre - y me alegra que si te enamoraras fuera de ella. Es una buena muchacha.

- lo es. - dije asistiendo con la cabeza.

- tendremos sobrinos - Andreina

- seremos tías - Andrea abrazo Andreiana y mi madre amplio os ojos.

- oh ohh ohh yo... creo que es muy pronto para eso. ¿Verdad Andrés? - su mirada más que de pregunta era de súplica.

- no le he tocado ni un pelo. - dije en mi defensa. Su rostro se convirtió en alivio - y ustedes moustros dejen de decir eso.