¿Jugamos?

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Los acosos de Rogue se habían disipado a cero, Natsu no lo sabia ni nadie. Era como un mal pasatiempo, porqué no sabía nada de Rogue desde hace meses. Natsu y yo estuvimos saliendo muy seguido estos últimos días, de hecho, ahora mismo nos encontramos juntos en una banca de la cafetería de la preparatoria; junto a Gray, Erza y Sting. Nos llevábamos muy bien gracias a estos últimos meses en que nos conocimos.

-... Tal vez, no creo que este año haya baile de invierno.-. Comentó Erza un poco desilusionada.

-La verdad a mí no me gustan esos patéticos bailes.-. Chasqueó Sting, quien ante la temerosa mirada de la capitana de porristas; se acomodo su chaleco escolar, solo para calmar su enojo en vano.

-Espero y en este baile, valla Natsu.-. Dijo Gray viendo levemente a Natsu, como esperando a que yo lo interrogara y así todos podramos escuchar una probable historia embarazosa.

-Chicos, lo siento pero debemos retirarnos.-. Informó Natsu, los dos nos levantamos de nuestros asientos y al momento que lo hicimos, la chicharra sonó para anunciar el final de las clases.

Natsu y yo nos separamos del montón para después dirigirnos a la salida.

-Lucy, creo que Zeref saldrá tarde el día de hoy.-. Mencionó Natsu a medio pasillo.

-Sí, algo me había comentado Igneel.-. Dije recordando el hecho.

-¿Estas libre esta tarde?.-. Preguntó Natsu y yo pare de golpe, ¡Había olvidado mi participación en un debate estudiantil!

-Sí, hoy no te acompañare a la casa; llegaré más tarde. Tengo una ronda de debate, estaré en casa a la hora de la cena.-. Me apresure a besarlo y a salir corriendo hacia la biblioteca; donde pasaría todo.

Mis pasos se había hecho más largos, mire mi reloj de mano y visualice las 4:15. Tenía que estar ahí a las 4:20 si no quería ser moderador.

Doble la esquina del pasillo y seguí avanzando hasta una puerta blanca de madera; me adentré ahí y note que muchos espectadores ya estaban esperando la disputa.

Como integrante en "Contra", me senté en la división derecha y esperé a que el debate diera su inicio.

[...]

El tiempo había pasado con un largo periodo, mire nuevamente mi reloj de mano y esta vez visualice 8:47, la ronda había sido demasiada larga y no quedamos en ningún acuerdo. Una total perdida de tiempo.

Salí de la escuela, no sin antes colocarme mi suéter e ir por mi mochila a mi taquilla.

El ambiente era obscuro, el horario había cambiado y con el la posición del sol. La temperatura era muy baja debido al invierno y mi frío crecía cada vez más debido a que llevaba puesta una corta falda escolar.

Empecé a caminar, con destino a el edificio donde recientemente vivía. Temblando a cada paso. Temiendo a que un deja vu se presentará en mí.

Las calles estaban bien iluminadas por los llamativos adornos navideños, pero los puestos comerciales estaban cerrados por horarios navideños. Era como una cárcel con barrotes de acero, pero sin ningún vigilante.

Mis suspiros se perdían con la brisa y mis pasos entre el concreto húmedo. 5 cuadras me separaban del edificio.

... ... ... Un señor estaba donde normalmente se sentaba el portero a leer el periódico. El extraño hombre se recargaba a la pared y vestía un largo abrigo color negro que llegaba por debajo de sus rodillas.

-Buenas noches.-. Pase por su lado, pero no recibí respuesta alguna hasta que...

-Buenas noches, Lucy...-. Su grave y ya no tan peculiar voz me respondió.

Un Papá Con...16? [NaLu]. Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora