Ucker se sienta al lado de Any que está de lado tristona.
Ucker: Esto.... ¿Te enojaste?
Any: No.
Ucker mira hacia todos lados nervioso porque no sabe qué decir.
Ucker: Y... ¿Por qué no vienes al bar? Digo, no sé, con todos nosotros.
Any: No me apetece, gracias.
Ucker: Any, si dejas que te cuente, la cosa no fue así com quedó de fea, lo que sucede es que...
Any se sienta.
Any: ¡Ay no Ucker! De verdad, me da pena por ti pero es que no quiero hablar más de eso ¿Ok?
Any se intenta poner en pie para irse pero Ucker la vuelve a sentar.
Ucker: Pero si no te cuento no lo vas a saber.
Any: Ya va, seguro que te envía Dul, pero mira, le puedes decir que no estoy enojada con ella ¿Ok? Y ya.
Ucker: No me envía Dul, yo te quiero contar lo que yo vi.
Any: ¿Tú también viste a Poncho encuerado con aquella vieja?
Ucker: Sí bueno... pero es que eso tampoco fue así.
Any: Obvio, nada fue así, y yo estoy loquita, y las haditas no existen y Peter Pan tampoco ¿no?
Ucker se queda extrañado.
Ucker: No mira...
Any: No mira tú, yo te voy a contar lo que pasó... y lo que pasó fue que yo me fui para Poncho y le besé porque quise, ¿va? Y Poncho me besó porque ustedes le hablaron, y ya no hay bronca.
Ucker: No, Poncho te besó porque quiso.
Any: Sí, claro.
Ucker: Bueno, nosotros le dijimos pero él quiso.
Any: Ya, porque le di pena. Pobrecita Any.
Ucker: No, te besó porque te ama.
Any se pone en pie enfadada.
Any: ¿Ya párale quieres? Ya sí estoy empezando a enojarme, una cosa es que yo sea súper happy de la vida y otra es que ustedes puedan reírse de mí y de mis sentimientos.
Ucker: ¡Pero no miento! ¡Poncho nos lo dijo!
Any se queda cara a cara mirando a Ucker con ganas de decir algo pero dos lágrimas se caen por sus mejillas y se va corriendo. Ucker queda mal, se siente peor.