Capítulo 2

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Narra Edward

-Al día siguiente me desperté por la luz que entraba desde el barcón de mi cuarto y con el dulce aroma de mi bella princesa... Solo recordar el día y como nos conocimos, bagss... Me da unas tremendas ganas de atraerla hacia mi, abrazarla y besarla hasta hacerla sentir protegida.

¡¡Flashback!!

-Hasta aquí babosos... Hoy nos vamos a "DRE PARIS BAR" si o si porque escúchenme bien compadres... ES MI UUUULLLL TIIII MAAA NOCHEEE DE SOL TEROOO YYY LOSSS QUIEROOO CONMIGOO JAJAJAJA.

- Ooooh ya basta viejo, estas muy borracho, ni te puedes estar de pie.

Estrakck... plachhh

–No por favor sueltameeeee... Plashhh... Que es lo que dices perrita... ahahh... HAja haja... Ya déjame, no me hagas más daño por favor hajaaa AYUDAAAA POR FAVOR.

-Edward a donde vas idiota, te van a matar.

-Sí, pues ya lo veremos.

-¿Qué esta pasando aquí?

-Nada de tu incumbencia niñato... Porr... Favorrr... ayúdame.

-Al dirigir mi vista a esa dulce y desgarrada voz que lloraba sin parada me quede en shock, en mi vida nunca había visto a una chica así, la podre ni se podía sostener con sus propias piernas ya que éstas estaban completamente heridas... Sin perder más tiempo sobé mi pistola.

-Óyeme bien maldito bastardo, si no la sueltas a la cuenta de tres te quedarás sin descendencia, le dije acercándome a él... 1... No la soltó... 2 ... La agarro más fuerte al yo acercarme... y ...3 Pannnn, Y se hizo el silencio.

-Ahora te queda claro lo que te estoy diciendo... El tipo solo buscaba por todo su cuerpo en busca del disparo.

-La chica en ese momento al sentirse libre corrió hacía mí... Yo, no la conocía pero en el momento que la tuve entre mis brazos, algo se me removió por dentro... No se si fue pena, o quizás ternura... Pero lo que si se, es que todo mi ser reaccionó a su tacto como nunca antes lo sentí.

¡¡Fin flashback!!

-La sentí moverse entre mis brazos... Ya estaba despertando.

¡Buenos días mi princesa!

–Huuuuunnnn–Jajaja– eso suena lindo, buenos días para ti también mi princeso.

-¿No será príncipe?

–Nopp. Tu eres mi bello princeso.

-Así?

–Jeje sipp.

-Ahora que le pasará, se estaba riendo y de una para otra su rostro se volvió un poco desaliñado, no me queda nada más que preguntarle... Y esa carita que pasa amor?

–Nada, solo que está es la primera vez que me siento en familia y tengo, tengo miedo.

-No temas por favor, ya éstas conmigo y nuestro bebé está creciendo sano y fuerte allí adentro, nada te pasará, te lo prometo princesa, a ambas.

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