(Bradley)
Llevaba ya unos quince minutos esperando a Chad afuera de la escuela.
Terminé mi segundo cigarrillo, tiré la colilla al piso, luego bajé la mirada hacia ella para ver cómo era aplastada por mi pie mientras los últimos rastros de humo se desvanecían en el aire. El sonido de la campana me hizo acabar con aquel acto.
Me recosté de mi auto y me crucé de brazos, luego comenzaron a salir cientos de chicos una vez se abrió el gran portón de enfrente. Después de unos segundos de alboroto entre estudiantes que literalmente mataban por salir de allí, vi a mi "víctima" salir, pero esta no estaba sola, iba hablando con otro chico. Ambos se detuvieron a un lado del portón, el pelirrojo se percató de que lo estaba observando y se quedó mirándome fijamente, a lo que le respondí con una sonrisa y el contestó de igual manera, pero un poco mas tímida. El de cabello castaño oscuro (el otro chico) también se dio cuenta de que Chad y yo nos mirábamos, pude notar que hizo un gesto de confusión y también me miró, les sonreí y procedí a acercarme a ellos.
- Hola chicos, ¿Cómo están?.- saludé con una sonrisa una vez me encontré frente a ellos.
- Bie-bien.- contestó el pelirrojo algo tímido.
Chad era un chico atractivo, ojos esmeraldas, cabello rojo, casi anaranjado, además se podía notar algo de vello facial rubio en su rostro.
Aunque ya lo había visto en fotos, debo reconocer que se ve mejor en persona, también se pueden apreciar algunas pecas en su rostro por los alrededores de su nariz, que tampoco se veían en las fotos.
Se veía algo nervioso, mientras el de cabello castaño oscuro solo me observaba fija y seriamente, entonces también lo miré.
Mis ojos fueron directo a su boca, como si de un instinto animal se tratase, unos perfectos labios rojizos, sus ojos, verde oscuro, que por cierto caían muy bien con su cabello y tono de piel, era hermoso aquel chico, quien sabe, tal vez podría ser el número veinte.
«¿Qué diablos estoy pensando?»
- Si, y ya nos vamos.- interrumpió el de cabello castaño oscuro algo defensivo, al parecer no le caí muy bien, de seguro son novios, o algo así.
«Debía saber si eran novios»
Algo se me ocurrió, entonces dije.
- Ah, bueno, quería saber si podrías acompañarme a comer, no sé, si no hay problemas con tu novio.
- Jaja, no es mi novio, es mi mejor amigo.- contestó el pelirrojo con una sonrisa, mientras el otro chico me miraba callado y con desprecio, al parecer no hacia el menor intento por disimularlo.
En ese momento Chad se acercó al oído del de cabello castaño oscuro y susurró algo que obviamente no pude escuchar, luego se alejaron unos centímetros de mi para comenzar a hablar sólo ellos dos, no puedo negarlo, me sentí algo incómodo.
- ¿Entonces?, ¿Qué dices?.- pregunté interrumpiendo aquella conversación luego de unos segundos.
Chad miró al castaño esperando una respuesta.
- Ok, está bien.- respondió el castaño luego de unos segundos para luego acercarse a mi oído izquierdo .- Pero si algo le pasa a mi amigo, te mato, y se recordar muy bien las caras.- susurró amenazante.
- Jajaja, que agresivo tu amigo, ¿nos vamos?.- pregunté sin más para luego hacer un ademán con mis manos para que Chad fuese a mi auto.
- Sii. Nos vemos más tarde amigo.- respondió para luego despedirse del castaño.
ESTÁS LEYENDO
Manzana Prohibida (Yaoi) #PGP2017
Fiksi Remaja*Novela ganadora en la categoría Yaoi de los Premios Gemas Perdidas 2017.* Bradley Donovan que tiene hobbie peculiar, el cual consiste en llevarse a la cama a chicos jóvenes -en especial si son vírgenes-, los apunta en una libreta que tiene asignán...