By rió a su reflejo en el espejo. Aún recordaba pánico que se apodero de su hermano. Si algo tenia su padre era que nunca había podido decir las cosas de manera lenta. No después del episodio que había ocurrido con ella años atrás al darle la noticia de su separación.
Luego de que Luis y By explicaran quien era y como era su vida, Zack se sentía ansioso, nervioso...y un poco molesto. Aunque a la vez emocionado de que a pesar de todo podía reconocer a sus hijos y a su mujer. Aún no creía que una mujer como ella fuese suya, así que pidió que le comentarán como había surgido su relación, para By fue un tanto incomodo recordar esa época dado que ahi originaron parte de sus problemas, pero sabia que si querían debían hacerlo por el bien de Zack.
Así continuaron por mas de cinco horas, donde el les preguntaba algo concreto y ellos le relataban parte de sus gustos, ambiciones, sueños y anhelos. El tema de su madre fue incluso mas incomodo que el recordar su mala época hacia varios años atrás. Pero fue su padre quien con el mayor tacto que poseía le explico que ella "no es más que una sanguijuela sucia que solo buscaba dinero"
El sonido del timbre la hizo salir de sus pensamientos, sonrío como una colegiala. Ni una sola vez había experimentado algo como lo que sentía en ese momento, la incertidumbre de saber si estaba guapa o no, que si estaba muy arreglada o no. Camino despacio y al abrirla encontró a Alberto con un sobre en sus manos.
Fruncio el ceño, después de todo no esperaba verlo ese día. Se suponía que la audiencia era hasta dentro de tres días.
-Hola - murmuro Alberto con voz neutra. -Lamento interrumpirte. Solo vine a dejarte esto -le extendió el sobre- El juez ya mando la resolución del caso sin siquiera haber visto las pruebas. -By noto que sus manos estaban tensas en sus bolsillos.
-Justo ahora no puedo hablar, voy de salida. Que tal si lo hablamos mañana al desayuno? Yo invito.
Alberto tenia el rostro neutro. Deseaba poder saber que pasaba por su mente.
Negó con el rostro bajo. -No hay nada que hablar. Ese juez ya dio su veredicto sin haber aceptado la audiencia. Suspiro- Maldito O'Donoghue.
-Quien?
-O'Donoghue, el juez.
By rió sin poder evitarlo, tal parecía que su amigo poseía la mejor suerte del mundo.
-Que bueno que disfrutas el sufrimiento de los demás-expresó con amargura.
Ambos escucharon como la llamaban dentro de la casa.
Con cuidado cerro un poco mas la puerta, no quería que nadie se enterará de lo que se traian entre manos, si ya todo estaba lo suficientemente caliente entre ellos dos no quería añadir mas leña al fuego.
-Confia en mi- sonrio- hablemos tranquilos mañana en el 7-eleven. Te gustara escuchar lo que debo decirte- agito el sobre en lo alto- Lo leeré, y haré que ese "juez" se trague sus palabras-susurro divertida.
Bueno eso si seria divertido, su casi novio y ex compañero de la universidad resultó ser el juez que daría el veredicto del caso de su amigo. Gran sorpresa se llevaría Dany. Río y se adentró al hogar. Con una sonrisa busco su bolso y guardo el sobre justo cuando Jhon entraba con un hermoso traje con pajarita incluida.
Estaba guapo. Mas que guapo bello, la manera en que la camisa se amoldaba a sus anchos brazos, la manera como caían esos pantalones de vestir de su estrecha cadera, la forma en que sus ojos brillaban. Todo era perfecto en él. Así usase una bolsa de papel le quedaría igual de alucinante.
Sonrió y termino de arreglar las cosas de su bolso.
-Lista? -murmuró un poco serio. Asintió un poco aturdida y con elegancia se acerco hacia la salida.
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Decir que fue una noche extraña seria un eufemismo.
Primero Jhon todo el trayecto de la casa al hospital lo hizo en silencio y no de esos cómodos a los que se habían acostumbrado, no. Ese era del tipo de silencio ensordecedor, miles de cosas pasan por la cabeza de By mientras por la de Jhon solo pasaba lo tonto que fue durante mucho tiempo.Cuando llegaron al restaurante la amable señorita de la puerta los guío hacia una mesa privada. Luego de pedir cada uno sus platos y una botella de vino blanco, la incomodidad se apodero del momento. By no estaba tan segura de que le pasaba a Jhon, pero temía que fuese porque la haya visto con Alberto.
Luego de cenar y declinar por un postre By estaba frustrada, todo el tiempo que demoro arreglándose para verse hermosa para él y él ni la volteaba a ver o desviaba su mirada a su copa de vino. Cuando dieron casi las 9, siendo 3 horas desde que llegaron decidieron irse sin siquiera abrir sus bocas. Todo era tan incómodo que solo deseaba gritarle lo estúpido que era por ilusionarla con algo si se iba a comportar de esa manera.
En el auto fue de la misma manera; Silencio y nada mas. Al llegar a Jackson Street y doblar a la derecha suspiro agradecida, el viaje de regreso fue mas corto y agradable que el de ida.
No podía creer como cambiaron las cosas desde que le pidió la cita a como se encontraban; El con su vista fija en la carretera, ella tamborileando con sus dedos en su bolso. Algunas cosas no cambiaban, el nunca seria tan abierto y ella seguiría siendo la tonta adolescente que solía ser cuando se encontraba en compañía. Apenas aparcaron en el garage By salio del auto como si este la quemase. Y maldiciendo en Alemán subió a su recamara a cambiarse y ahogarse en ese extraño sentimiento que la comenzaba a acompañar. La decepción era inminente en su mirada. Todo el tiempo queriendo ser suficiente para él y parecía que el solo continuo con la cita porque ya se lo había pedido y la reservación estaba hecha.
Desmaquillo su rostro, se quito los pasadores que tenia en el cabello y tiro el vestido largo luego de quitárselo.
Cuando estaba por meterse bajo las frazadas unos golpes en su puerta la hicieron parar la acción e ir a abrir.
Quizás era Yariela tratando de ser cotillera como siempre pero se equivoco. Era él. Aún continuaba con el traje solo que ahora con media camisa suelta y las mangas arremangadas a los codos.
-Que...? -su pregunta no hecha quedó en el aire cuando el posó uno de sus largos dedos en sus labios.
-Se que arruine todo esta noche, pero antes de dormir no podría pasar mas tiempo sin decirte esto. Desde que nos conocimos en secundaria, me pareciste atractiva, tus ojos, tu cabello, tu mente y para que mentir, fue cuerpo también. Trataba de acercarme pero estabas con ese gilipollas de Alberto. Cuando terminaron pensé "Vamos Jhon, no puedes ser tan marica y perderla ahora que esta libre" Hacia de todo, te apoyaba en todo, pero tu solo tenias ojos para él. Cuando Yariela volvió me di cuenta que no te era tan indiferente después de todo, tus celos lo demostraban. Trate de darte celos, pero no funciono. Al pasar de los días te enteraste del engaño de Él por ti misma. Quería dejar a todos y correr a ti y consolarte. No pude. Fui un cobarde y te deje sola. Luego paso lo del hospital, la carta, tus "nuevos amigos", tu distanciamiento y solo quise seguir adelante, si tu podías porque yo no? -se acercó mas y toco sus mejillas ya mojadas, no se había dado cuenta de que lloraba hasta que el las limpio- Cuando tus sobrinos nacieron pensé que ibas a volver a ser tu misma, pero otra vez me equivoque, te alejaste incluso más. Se que me estoy desviando mucho -Quizas no- Pero lo que quiero decir es que todo ese tiempo trate de ser mejor para ti y no podía. No entendía que era lo que me impulsaba y hasta ahora creo que no lo entendía. Cuando te fuiste quede destrozado -no te mentire- Pero doy gracias al accidente de tu padre, no porque estuviese en un hospital, sino que te hizo volver a tu hogar. A mi. Pero como siempre la cago justo como hoy y el día de la guardería cuando te vi con el. No desconfió de tus sentimientos por el, sino desconfíaba de los mios por ti o eso hacia hasta hoy. La verdad Byondi Smith, es que no hay persona como tu. -beso sus labios castamente- Y por eso...Te amo
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Ñeeeeeeeeeee, volví :3 Love Me Jen :D
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True Love (S#2)
RomansaSecuela de Secrets Puedes leerla sin necesidad de leer la anterior. Aunque es recomendable. *** Decidida a cambiar su vida Byondi decide viajar hacia Alemania con su nuevo amigo Kendall. Pero las cosas no son siempre blancas. Tras haber pasado 5 a...