Sorpresa

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Narra Ninfa

No tardamos en llegar a la base, hace un rato que la doctora recuperó la conciencia y al principio se alteró un poco pero entendió que la habíamos salvado de Ivo, quien desapareció misteriosamente. Ah de ser su costumbre.

Bajamos de la bionave. La doctora será trasladada al Salón de la Justicia, aquí solo recibirá atención medica por parte de Canario Negro.

Fui a la biblioteca para despejarme un poco y leer algo. Resulta que este lugar también tiene una biblioteca y es enorme, realmente pasaré mucho tiempo aquí.

Empecé a recorrer los muebles llenos de libros, hasta que me tope con un espejo.

Por alguna razón mi reflejo llamo mi atención, me mire por un momento, ya no soy la misma niña pequeña que llegó asustada a la Tierra, soy diferente.

Me quité lentamente mi mascara. <Te pareces a tu madre>, todo el mundo me decía eso, yo siempre dije que no ya que yo consideraba que mi madre tenía una fortaleza que yo nunca podré alcanzar; ella era fuerte, amable, bonita, paciente y mucho más cosas que no veo en mi.

Sentí como las lágrimas cubrían mis mejillas, el recordarla me pone triste, el saber que ya no esta y que jamás la volveré a ver me crea un gran nudo en la garganta.

-¿Por qué?- me dije a mi misma viendo mi reflejo.- Ellos eran buenos pero ahora...ya no están.

-¿Ninfa?- escuche la voz de Robin cerca, rápidamente limpie mis lágrimas y me puse la mascara.

Narra Robin

Después de que la doctora se quedara con Canario Negro cada quien tomó por su lado.

-¿Artemisa, has visto a Ninfa?- pregunté.

-Creo que fue a la biblioteca- respondió.

-Gracias.

Me dirigí hacia la biblioteca, al llegar todo estaba tranquilo y callado.

-¿Ninfa?- pregunté.

-¿Qué sucede?- dijo saliendo de uno de los pasillos.

Noté que sus ojos estaban algo rojos y un poco llorosos.

-¿Estás bien?- pregunté acercándome a ella.

-Sí, solo quería leer un poco- respondió observando los libreros.

Algo esta ocultando, algo que ninguno de nosotros sabe.

-¿Te importa si te acompaño?- pregunté.

-No, adelante- respondió.

Ver leer a Ninfa es todo un espectáculo. Cada quien tomo un libro, nos sentamos en un sillón y nos pusimos a leer, la observe por unos momentos. Se veía concentrada, cuando note que empezaba a hacer caras, ponía cara de enojo, cara de indignación, rodaba los ojos, se reía e incluso comenzó a hablar como si los personajes la pudieran escuchar.

Sus reacciones me parecieron muy divertidas.

-¿Qué?- pregunto ella al notar que la miraba.

-No, nada- respondí volviendo mi vista hacia mi libro.

-¿Cómo es que puedes leer con el antifaz?- pregunto después de un rato.

-No es difícil, realmente no altera nada- respondí.

Me miro por un momento como si estuviera viendo un bicho raro. Pero luego sonrió y volvió a lo suyo.

No sé porque lo hice, fue segundos después hasta que reaccioné, pero por alguna loca razón me quité mi antifaz.

Ella al darse cuenta me miro un momento, parecía muy sorprendida aunque trato de ocultarlo.

-Tengo que irme- dijo levantándose y dejando el libro en una mesa.

-Espera, ¡Ninfa!- grité pero me ignoro.

¿Qué hice?

Narra Ninfa

Mire a Robin por el rabillo del ojo y note que se estaba quitando el antifaz, así que voltee para verlo mejor y...¡no puede ser!

¡¡Es Grayson!! Esto debe ser una maldita broma.

Traté de no hacer tan obvia mi sorpresa aunque creo que no funcionó ya que él puso cara de ¿Qué pasa?

-Tengo que irme.- dije parándome, y empecé a caminar lo más rápido que pude.

Escuche la voz de Robin pero la ignore, estando en el pasillo empecé a correr y no tardé para llegar a una habitación sola.

Me siento muy...¿confundida? ¿Sorprendida?

No puedo creer que todo este tiempo estuve ignorando a Robin.
Creo que ahora la escuela será más complicada de lo normal.

Young Justice: FloraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora