Fui un estúpido otra vez, no se porque dije eso, no estaba en mi derecho. Ahora sólo he logrado que me odie, y para variar piensa que me volví un mujeriego.
Pasó un largo rato para volver a verla, estaba en la sala común junto con los demás.
Ahí está, tan radiante como siempre, o al menos así la veo yo. Ya que algunos me han dicho que la ven algo rota, algo fría.
Si, era verdad, a veces estaba tan rota que cortaba y tan fría que quemaba. Pero así es ella, en eso se volvió y a pesar de eso aún sonríe por los que la quieren.
Por un momento nuestras miradas chocaron, yo juro que el tiempo se detuvo, era como estar hipnotizado pero noté confusión, su mirada estaba llena de confusión con algo de odio.
La verdad, no creo en lo que me dijo, en que no fue nada, porque en lo demás si tiene razón. Yo se que aún siente algo y debo luchar para que no lo pierda, se que puedo.
Mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de mi comunicador. Lo miré, era un misión.
-¡Robin, Chico Bestia, Bluebetlee, Impulso, a la sala de misiones! - anuncié y el equipo comenzó a caminar- Ninfa, tu también.
Ella dudo pero siguió a los demás.
Una vez en la sala los informé.
-Serán equipo beta por hoy- dije y la misión apareció en pantalla- Tenemos informes de que una nave extraterrestre no identificada que se encuentra aquí- dije y señale un punto rojo en el globo terráqueo.
-Pero ahí hay una selva- dijo Chico Bestia.
-Lo se, desconozco la razón de la ubicación, pero nuestro objetivo es tener contacto pacífico e identificar la nave- dije.
-Espera, ¿nuestra?- preguntó Impulso.
-Ire con ustedes- dije y sonreí- así que adelante.
Fuimos por la bionave y nos dirigimos a nuestro objetivo.
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