sorry, but i love my .....

El Príncipe azul.

Me removí en busca de tranquilidad, pero el constante ruido de personas caminando, hablando, riendo y a veces cantando terminó por hacerme levantar de la dichosa cama.
Me sentia aún aturdido, como si el mundo diera vueltas.
- ¿pero que demonios he tomado? - me pregunté levantándome como pude de la cama y sujetando el peso contra una pared.
No me sentía muy bien pero de verdad necesitaba salir de aquel lugar. ¡Ni siquiera sabía que hacía en aquella casa!
Abrí con sumo cuidado la puerta y ojee al alrededor en busca de algo sospechoso, como no vi nada me propuse a salir.
Camine calculando cada paso que daba, temía resbalar y terminar en un estado peor del que ya me encontraba.
Me asomé por las escaleras viendo un grupo de personas comiendo y bebiendo. Parecía haber una fiesta por lo que tenía que tener más precaución.
Baje lentamente las escaleras dando un que otro resbalón, pero manteniéndome estable. Cuándo llegue a la parte de abajo me cerciore de que aquel tipo no anduviera por ninguna parte. Con los nervios por no ser pillado y sintiendo que estaba a un sólo pasó de mi libertad, cogí impulso y abrí la puerta como pude corriendo atrás del largo camino fuera de su jardín. Por desgracia, debido a mi mareo, termine cayendo en medio del camino.
- jamás podré salir - dije apunto de llorar aunque sabía que nadie podía escucharme .
Mire hacia la salida con anhelo. Tan cerca y tan lejos.
- ¿y por qué no ?
Me giré para saber quien hablaba a mi lado.
Un chico de cabello marrón con grandes ojos, me estaba mirando sorprendido por mi estado. Yo dudé en decirle lo que me sucedía, pero luego entendí que cualquier cosa terminaría mandandome a dentro.
- yo... Yo no me siento muy bien y necesito volver a casa - dije con dificultad tratando de no perder la vista y ceder al suelo - por ... por favor ayúdame
El chico me miro desconcertado. Camino unos minutos en círculos a mi alrededor.
- supongo que no tendré remedio. La verdad nunca entendí porque la gente bebe si no sabe soportar el alcohol.
- yo no he bebido.
El chico abrió la boca para decirme algo, pero en ese momento apareció un grupo de tres hombres quienes venían observando la escena que teníamos montada en medio del camino. Agachar la mirada intentado que pasasen rápido y que aquel chico de cabello marrón me ayudase a volver a casa.
- ¡Dongwoo-ssi! - escuché gritar a alguien antes de sentir como unas manos me superaban por los hombros haciendo que subiese la mirada - ¿Qué sucede? - Sunggyu trataba de hayar el motivo para mi estado, pero no yo sabía que me sucedía para estar así.
- ¿se conocen? - pregunto el chico de antes a Sunggyu quien asintió al instante
- vamos juntos a clases, ¿qué le sucede?
- él dijo que no bebió nada, pero yo le veo borracho así que...
No podia decir nada aunque quisiera, lo único que me quedaba hacer era esperar a que alguno me ayudará, pero las personas sólo hablaban y hablaban hasta que salió él.
Me eche como pude un poco hacia atrás. Aquel hombre era extraño, por su apariencia no mostraba ser cruel ni nada por el estilo, pero estaba 100% convencido de que me había hecho algo. No se... tal vez me drogo .
- vaya, no esperaba ser honrado por tu presencia - sonrió acercándose al chico de cabello marrón.
- así que la fiesta era tuya - respondió con una amplia sonrisa.
Mientras aquellos dos hombres de sonreía con una especie de aura maligna, yo veía como los esperanzas de ser ayudado de iban por el excusado.
Si era cierto, aquellos dos de conocían por lo que eran amigos y yo estaba jodido. Volvería a dentro, de eso estaba muy seguro.
- vine a recoger a mi amigo - dijo el más alto girando a mirarme - nunca pensé que está fuera tu nueva casa.
El pelo marrón me ayudó a levantar colocando mi brazo sobre su hombro.
- espero que no le hayas hecho nada
- le cuide como a un ángel
Mentiroso. Él me había drogado a saber con que y porque motivo. Lo único que recordaba era mi encuentro con aquella gata y la comida que me había preparado.
Seguramente en ella estaba la substancia que me hizo adormecer.
El más alto miro de reojo a sus compañeros y luego me obligó a ir hasta la salida.
No di ninguna resistencia, sólo agachar la mirada y le deje llevarme en silencio. Aquel chico parecía un ángel.
- puedo preguntar quien eres
Me esforze en mirarle directamente a la cara para responderle, pero me sentía tan cansado.
- da igual, sólo mantente alejado de él.
Asenti con la cabeza. Tampoco es como si fuera a volver a verle, no loco haría tal cosa.
Tras un rato de estar caminando llegamos junto a un coche donde ya nos esperaba un chofer con traje. Aquello parecía una película de romance donde el caballero salva a la damisela y se la lleva en un coche de lujo. No se si existirá alguna con esa temática, pues lo normal sería una limusina.
Con mi mente ocupada pensando en tonterías, no me di cuenta en que momento me había subido al coche junto aquel hombre.
Mire por última vez su rostro y luego caí en un profundo sueño.

Mucho tiempo lo se. Estuve muy ocupada entre exámenes y que tuve que buscar un nuevo trabajo por que se incrementaron mis gastos. Espero les guste y no les confunda mucho. Besos