Capítulo 8

5.7K 233 1
                                    


El día siguiente paso más rápido que ningún otro, habían decido pasar la tarde cerca del lago con la compañía de Harry y Ginny, los cuales aún conservaban un poco de vergüenza por lo sucedido la noche anterior; entre bromas y juegos la tarde se esfumó, luego de cenar cada uno se dirigió a su habitación para dormir y prepararse para el día siguiente.

Hermione despertó por los rayos del sol que le pegaban en la cara, se vistió con su prolijo uniforme y luego de intentar acomodarse el cabello un par de veces se dio por vencida y decidió bajar a esperar a sus amigos, pero se sorprendió al ver a Ron ya listo y esperandola.

- Buenos días - dijo dándole un beso en la mejilla estando parada en el último escalón para estar a su altura, pero el la tomó por la cintura y la bajo dejándola a su estatura normal.

- Buenos días - respondió el pelirrojo besando la comisura de sus labios, cuando se separaron siguieron mirándose a los ojos tiernamente hasta que un carraspeo detrás de ellos los hizo volver al mundo.

- Vamos a desayunar, nos acompañan ?- dijo Harry desde atrás tomando la mano de Ginny.

- Claro, muero de hambre- Ron la cogió con un brazo por los hombros y la guió hacia el gran comedor el cual ya estaba abarrotado de estudiantes; el desayuno fue rápido ya que todos conservaban un poco de sueño, cuando todos terminaron el trío de oro de dirigió a su clase de historia de la magia.
Las horas de esa asignatura siempre eran las más densas y parecían ser infinitas, Hermione se dedico toda la clase a tomar apuntes y solamente se distrajo cuando Ron apoyo su mano en uno de sus muslos hasta quedarse dormido con la cara pegada a la mesa.

- Ron, despierta... vamos la clase ya terminó - a pesar de los llamados insistentes de su amigo y su novia Ron parecía no estar presente.

- Podría estar muerto y no habría diferencia - dijo Harry entre risas a las cuales la castaña no pudo resistirse y se le unió, sus risas fueron tan fuertes que lograron despertar al pelirrojo.

- Que diablos sucede ?... Donde están todos ? -

- Ron la clase terminó hace ya 10 minutos pero no podíamos despertarte - dijo Harry conteniendo la risa- nos quedan 15 de descanso aún y luego debemos ir a pociones -

- De acuerdo, vayamos a caminar un rato - y habiendo dicho eso se levantó y salieron del aula para dirigirse al patio; el día fue bastante pesado y cuando creyeron que ya había finalizado se reunieron en la sala común, estaban tranquilos haciendo los deberes que les había encargado el profesor Snape cuando Mcgonagal entró agitada por el retrato como si hubiera corrido todo el camino.

- Weasley, Granger necesito que hagan la vigilancia de los prefectos en el tercer piso - Ron y Hermione se levantaron sin dudarlo y siguieron a su profesora hasta fuera de su casa - lo siento chicos, será sólo por esta noche - ambos asintieron y se dirigieron al tercer piso. Todo estaba desierto y solamente iluminado por los pequeños faroles de las paredes, no tendrían mucho trabajo que hacer ya que ningún estudiante solía pasar por ese lugar de noche, cosa que Ron no desaprovechó y se lanzó a los labios de Hermione, esta correspondió e intensificó el beso, luego de un rato su espalda chocó contra una pared y Ron se pegó a ella más que nunca; siguieron así por un rato hasta que las manos del pelirrojo abandonaron su trasero y se dirigieron a sus senos los cuales apretó más que la otra noche, y se dedico a besar el cuello de su novia la cual soltaba fuertes bocanadas de aire entrecortadas.

- WEASLEY, GRANGER DONDE ESTAN ? YA DEBEN REGRESAR A SU CASA - la voz de Filch resono por todo el pasillo lo que provocó que la pareja se separará rápidamente.

- YA ESTAMOS EN CAMINO- le gritó Ron y se dirigieron a sus dormitorios, al llegar se despidieron con un suave beso.
Lo último que el pelirrojo vio esa noche fue a su novia alejarse de el por esas malditas escaleras que le impedían ir por ella.

~Romione~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora