¿Me olvidaste?

Capítulo 18. "Te perdono"

-¿Qué dices entonces? -me volvio a besar-
-Si -lo bese-

Él me estaba besando, sus manos estaban posadas en mi cintura y las mias en su linda cabellera, había firmado mi condena, había perdonado a Jake, después de lo que me hizo. Estoy en malas condiciones... Borracha y drogada, es obvio que no se lo que digo. Me siento mareada. Me duele el estomago y a la vez mi cabeza.

-Ven princesa te llevare a tu casa -dijo tiernamente-

Jake es un buen tipo, su familia tiene una educación impecable y él también, se que cuando leyeron eso dijeron ¿Más o menos... Estas loca Clara? Pero es verdad, se lo que me hizo. Se que fue lo peor que se le pueda hacer a una mujer pero todo eso tuvo razones y yo se cuales son.

Jake me prometio que haría todo lo posible para que yo viera que él cambiaba. Yo no podía decirle que cambiara ya que yo no lo hago, pero él mismo se puso esa meta. Espero que la cumpla.

Llevo más de cinco horas fuera de mi casa, se que mi mamá estará molesta y más cuando me vea, no se en que estaba pensando...

Jake me llevo a su convertible era de un lindo color rojo, igual que el Ferrari de Michael, me sento en el asiento del Copiloto, yo no podía ni ponerme en pie, estaba tan borracha que no sabía ni lo que hacia. No pude más y me quede dormida, mi cabeza dolía, sentía palpitar mi craneo.

Narra Michael:

-¿No ha sabido nada de ella todavía?
-No -dijo llorando- ¿a donde habrá ido?
-Estaba conmigo en el parque pero despues se fue. ¡Rayos! ¿Por qué la deje sola? -me golpe la cabeza-

Me siento tan impotente, he hablado a mas de veinte personas, le he marcado a ella unas cincuenta más, he tenido que ponerle más de cinco veces saldo a mi celular ¡¿En donde puede estar?!

Son las once de la noche, ha estas horas afuera. Cualquier depravado sexual esta suelto, con solo de pensarlo me lleno de furia.

¿Por qué la deje irse? ¡Si serás idiota Michael!

-Mira... Creo que es Jake -dijo señalando un combertible rojo-

Vi como el castaño salía de su combertible con mi ogrita hermosa en sus brazos, ella estaba... ¡¿Inconsciente?!  ¡Dios mío! ¿Qué le habrá hecho este estúpido? Cada paso que Jake daba era una eternidad. Corrí hacia él y la cargué, solo hice eso, tenía ganas de partirle la cara a Jake pero no era el momento.

-¡Bendito sea Dios! -las mamas y sus frases- llévala arriba por favor.

Eso hice, ella se veia ahora tan inofensiva, tan pacifica, su cara reflejaba paz. No era la cara que tenia durante el día, la de enojada, triste y amargada. Su cuerpo no pesaba, era tan liviana.

La acoste en su gran cama, me encanta su cama y su recamara, todo es morado, ella hizo un pequeño movimiento y caí con ella en la cama, no era una postura inadecuada pero tampoco era cómodo que "Dos adolecentes esten en una cama, la muchacha inconsciente y el muchacho que quiere comérsela a besos". La moví y la acosté, le quite los zapatos y luego fui por un trapo con agua, lo puse en su frente, olía horrible, puse un poco de alcohol en su nariz, ella abrió lentamente los ojos pero luego los cerro de nuevo, creo que quiere descansar, la arrope y baje.

-¿PORQUE ESTA EN ESAS CONDICIONES? ¿QUÉ LE HICISTE? -me acerque a Jake-
-Michael tranquilo -dijo la mama de mi ogrita-
-Yo no hice nada, la encontre así en la calle y pense que lo mejor seria traerla aquí.
-¡No te creo! ¡¡De seguro abusaste de ella o algo peor y la drogaste!!

Jake me miro enfurecido, yo levante mi brazo con mi mano en forma de puño, estaba apunto de golpearlo cuando la Sra. Esmeralda se puso en medio de los dos.

-¡En mi casa no! Váyanse a fuera si tanto quieren pelear -dijo enfadada-

Tenia razón. Su hija estaba en malas condiciones y nosotros peleando.