¿Me olvidaste?

Capítulo 40. "Perdóname"

-Pero... ¿Có...cómo paso todo? ¿No la contacte? ¿No le hablaba? ¿Por eso me odia?
-Michael... El primer mes fue fantástico para ella, le marcabas todas las noches y le contabas todo lo que te pasaba...  El segundo mes le hablaste solo tres veces y le mandabas mensajes, ya en el tercero ni siquiera le contestabas los tweets... Ella te marcaba pero nunca le contestabas... Te mandó cartas y mensajes por todos lugares, el cuarto fue algo duro para ella ya que se entero que habías cambiado tu celular, ella buscó por mar y tierra tu número, créeme no fue fácil -suspiro algo triste-
-¿Qué más paso? -dije algo desesperado y decepcionado de mi mismo-
-Ella se ponía feliz cuando ganabas algún premio, una sonrisa se asomaba por sus labios cuando decías "le agradezco a mi familia y a mis amigos...." pero se le desvanecía cuando completabas la oración con "...mis amigos de la discografía."
-¿Enserio?
-Si.
-Siento que la conozco... Siento algo por ella... Pero todavía no entiendo por qué la olvide.
-¿Sabes que fue lo primero que dijiste al saber que irías a L.A?
-¿Qué?
-"Nunca te olvidare Clara" -me siento pésimo. Ella sufrió por mi. Ella lloro por mi...-
-¿Yo fui el responsable de su cambio de actitud y ropa?
-No... -ella bajo su cabeza - Nu...nca supe que paso con ella...-dijo con dificultad- Un día me dijo muchas cosas feas, ese fue el día en que nuestra amistad acabo. Los días siguientes ella no se vestía igual, sus ojos ya no tenían ese brillo especial, esa felicidad y esa inocencia de siempre... Hasta ahora... Cuando llegaste tú.

Cada palabra que sale de la boca de Sally me duele cada vez más. No soportaría si alguien lastimara a Clara, no puedo creer que yo lo haya hecho. Mis ojos se humedecieron ¿Qué rayos? ¿Qué es esto? ¿Lágrimas? ¿Estoy llorando? Acerque mis manos a mi cara, y me apoye en ellas ¡Me siento un infeliz! ¡Me siento mal! Las lagrimas salen solas... Sin permiso.

...

Narra Clara:

El doctor me dio unas muletas ya que me enyesaron la pierna. Mi mamá pagó las cuentas. Sabía que Michael me decepcionaría... Él no esta aquí... Solo vino Kathy y mi madre obviamente. Camino por el pasillo del hospital, encaminándome a la salida mientras Kathy y mi mamá caminan detrás mío, riendo, y bromeando, como las típicas amigas.
Baje mi mirada mientras pensaba ¿Michael no me quiere? ¿Por qué no vino? ¿Se fue porque tiene algo más importante que hacer?

Escuche como alguien corría por el largo pasillo, no me moleste ni en levantar la cara para ver quien era... Mis ojos se cristalizaron ¿Por qué me dejo nuevamente?

Sentí como alguien me abrazaba y me alzaba, ambas muletas cayeron al suelo mientras mi cuerpo era levantado y abrazado por alguien, levante mi vista y ahí estaba Michael. Él me apego a su cuerpo, sus brazos me envolvieron en un cálido abrazo, que me dejo sin aliento... Cerré mis ojos al sentir su cuerpo contra el mío. Mis pequeñas manos se deslizaron a su espalda, devolviéndole el abrazo, abrí mis ojos y lo mire, él... ¿Está llorando?

-Perdóname... perdóname por favor -dijo aferrándose más a mí... No entiendo... ¿Qué tengo que perdonarle? Sonreí tontamente y le acaricié las mejillas-
-Michael... -susurré, él se acerco a mi oído-
-Ya lo se todo, perdóname. Perdóname por no reconocerte... Por olvidarte -me dijo en susurro también, sentí como algo húmedo caía en mi cuello, Michael estaba llorando. Eso me partió el corazón... Mis lagrimas salieron también-

Lo mire y sonreí débilmente, él se acerco a mi y me beso, empezó a mover mis labios al compás de los de él, nuestras lagrimas caían como jugo en nuestros labios, como un elixir que hacia más delicioso el beso y yo pensé que el abrazo me dejo sin aliento. Subí mis manos y las pose en su cuello, mientras su manos iban directo a mi cintura.

-Nunca más te dejare... No me importa nada más que tú -sonrió-
-Pero Michael... La música es tu vida -susurré algo triste-
-Mentira... -lo miré confundida- Tú eres mi vida -sonrió y me dio un beso corto en los labios el cual le correspondí-

¡FIN!