Capítulo 1. Primer día en el último año de secundaria

750 22 3
                                    

Suena el despertador y lo paro, son las 6:30 a.m intento levantarme pero estoy cansada anoche me quedé hasta tarde terminando de acomodar mis cosas para empezar este día, es mi último año en el secundario, estoy feliz y triste a la vez no quiero abandonar a mi única amiga me hace feliz y siempre estuvo conmigo en mis momentos mas difíciles aunque no seamos de juntarnos mucho vamos a seguir hablando por más que no sea lo mismo.
Me levanto de la cama busco en mi armario el uniforme del colegio me lo pongo y bajo por las escaleras a desayunar sola, por que mis padres van a su trabajo a las seis, ambos en la misma empresa, al terminar de desayunar voy al baño y me cepillo los dientes, salgo hacia mi habitación y me arreglo mi cabello mientras intento hacer una coleta alta. Busco mi mochila y espero al autobús mientras miro tele.
Esperando casi 5 minutos suena la bocina del autobús cierro mi casa con llave y la guardo en mi mochila luego subo y me siento con mi mejor amiga.

-Anna, tengo que contarte muchas cosas, ayer no me llamaste.- me mira con sus ojos color miel un poco furiosa.

-Lo siento Clara estuve hasta tarde acomodando mis cosas para hoy, cuentame ¿qué sucede?- respondo intentando que se calme.

-Hable con mi mamá sobre el viaje de fin de curso y me dejo ir, nunca pense que me dejaría viajar. Insistí tanto y aceptó que vaya, pero no quiero ir sola necesito que vayas Anna.- termina y me sonríe.

Ella está muy alegre, pero sabe bien que mis papás son muy protectores y no me dejan ir menos sola con el curso, ojalá recapacitaran y me dejaran ir. Siempre quise viajar con mis compañeros pero ellos dicen que es muy peligroso y bla bla bla.

-Que bueno Clari me alegro totalmente que te dejen viajar pero sabes como son mis papás nunca accederán a que viaje sola.- contesto mientras bajamos del autobús.

-Lo se Anna pero voy hacer lo posible para que mis padres hablen con los tuyos e insitan para que viajemos juntas.- afirma

-No creo que puedan hacerlos cambiar de opinión Clari, después seguiremos hablando de esto.- menciono mientras entramos al curso.

Mi día no está tan mal a pesar de que la profesora de lengua nos acaba de dar dos hojas completas de tarea, en el recreo me junte con Clara y nos pusimos al tanto de todo por el tiempo que no nos habíamos juntado. Toca el timbre de salida y todos se desesperan por salir del colegio. Y ahí estoy yo subiendo de nuevo al autobús que tarda cuarto de hora en llevarme a casa.
Llego y siento un olor a pastas, entro y voy directo a la cocina cuando veo a mi mamá cocinando ravioles, y en el comedor la mesa ya está preparada.

-Hola Anna, ¿qué tal tu primer día?

-Buenas mamá. Bien un poco agotador.- menciono

-Me imagino hija, pero es tu única responsabilidad ya sabes.- sonríe.- y Anna necesito que vayas a la vuelta a comprar una gaseosa tu padre ordenó que quería almorzar con gaseosa solo por hoy.

La mire e hice una seña de que si iré. Subo a mi habitación (podría describirla como cómoda y moderna.) Saco del armario un short deportivo y una musculosa, busco mis crocs blancas y bajo por las escaleras, le pido plata a mi mamá y salgo en dirección al kiosco que esta a la vuelta de mi casa, cuando estoy por llegar un auto blanco frena e interrumpe mi carril, tengo miedo, saco el celular y trato de marcar el número de papá.

-Oye nena, sabes dónde vive ¿Beskin?

Es un joven no tan grande debe de rondar los 22 años, su cabello es perfectamente castaño, sus ojos verdes con tonos celestes me miran fijamente a los míos. No logro distinguir su cuerpo al estar tapado por el vidrio.
Espera. Me dijo ¿niña? Ya se que parezco de 15 debido que mi cuerpo no se ha desarrollado del todo todavía y si soy delgada pero ¿niña? No.

¿ORGULLO O AMOR?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora