Capítulo 28.
Últimos capítulos.
Estábamos en la mesa comiendo un salpicón de ensalada que había preparado Camille. Miré de reojo a Bryan y vi que él solo miraba a su plato, la mirada fija, los hombros caídos y un puchero en sus labios. Miré esta vez a James quien comía lento y sin ganas mientras que el resto comía eufóricamente. Vi mi plato aún con más de la mitad de comida en él y tragué el nudo en la garganta que tenía. Sabía lo que era perder a un padre y era realmente horrible, me partía el alma pensar en cómo se sentiría el niño de dos años, luego de perder a su madre.
-¿Quieres salir? -Le preguntó James a Bryan.
-No.
-¿Mc Donald's?
-No.
-¿Piscina?
-No.
-Bryan... -El niño comenzó a llorar y sentí un nudo recorrer desde mi garganta hasta mi estómago. Todos nos mirábamos entre sí sin decir nada.- Hey... No estás solo...
-Mami no está. -Se secó las lágrimas con sus manitas.
-Ella... Está bien, Bryan. Y...
-¡No!
Gritó y siguió llorando. No aguanté y me puse de pie, me acerqué a él y lo abracé. James aún no encontraba su lado paterno, pero yo sabía más o menos lo que Bryan sentía y no podía verlo así. Él siguió llorando en mi hombro y yo acaricié su espalda.
-Mi mami no está...
No me importaba lo que le haya dicho James, yo tenía que decirlo de una buena forma, tal vez él no lo supo explicar o quizá se lo dijo directamente.
-Bryan tu mami está bien, ¿Sabes?
-Papi dijo que no volverá. -Sollocé. Miré a James y negué con la cabeza.
-Escucha, quiero que me mires, ¿Sí? -Bryan se alejó de mi hombro para mirarme.- Tu mami no estará de la forma en que estamos James, tú o yo. -Bryan sorbió los mocos.- Pero, ella estará aquí siempre. -Señalé su corazón.- ¿Sí? Y te estará mirando todos los días.
-¿Y por qué no puedo verla? -Dijo entre sollozos.
-Es difícil de explicar, Bryan. -No quería decirle que estaba...
-Está muerta. -James interrumpió mis pensamientos. Lo miré asesinamente.- Esa es la verdad, Bryan.
-¿Muerta?
-Sí.
-¡¿Cómo se lo dices así como así?! -Le dije enojada, me había exaltado.
-Es mejor que lo sepa desde ahora, ____.
-Pero... –Interrumpió Bryan.- ¿Entonces está en el cielo? -Vi sus ojitos brillar.
-Sí, allá arriba con Dios. -Le respondió James.
-¡Entonces está bien! -Sonrió el niño.- ¡Mi mami está bien! -Miré a James confundida, él miraba con una ceja levantada a Bryan.- Mami me dijo que iría con él pronto.
-¿Te lo dijo? -Hablamos James y yo al mismo tiempo.
-Sí. Y dijo que papi cuidaría de mí. ¿Lo harás, papi?
-Sí, Bryan. -Se acercó a él y lo tomó en brazos para luego abrazarlo.- Te lo prometo. -Sonreí, vi que los demás en la mesa también sonreían.- Te amo, Bryan.
(...)Estaba aburrida, no había mucho que hacer. Camille había salido como cada día domingo y Scarlett se había tomado el día libre para ir a casa de sus padres. Kenny y Richard estaban merodeando por la casa haciendo quién sabe qué cosa, y James estaba en su oficina haciendo llamadas telefónicas.
-Aguarda un momento. -Oí la voz de James.- ____. -Me llamó.
-¿Qué? -Entré a la oficina.
-¿Me haces un favor? -Asentí.- Eh, Kendall te llamo luego. -Colgó y dejó unos papeles encima del escritorio.- Ve con Kenny y Bryan a casa de Victoria y trae todo lo de Bryan.
-Bueno.
-Y que traiga todo lo que él crea necesario.
-Es un niño de dos años James.
-Es un niño que es mi hijo y no quiero que le falte nada de lo que él acostumbra a tener. -Asentí y me di media vuelta para irme.- Eh, ____.
-¿Sí?
-¿Te vas a ir sin darme un beso? -Me reí y fui hasta él para besarle los labios.
-Nos vemos.
Salimos de la casa y nos subimos al auto de Kenny. Cuando llegamos al barrio donde vivía Bryan, el niño comenzó a hablarnos del lugar.
-Aquí mi mami compraba pan, y la señora me daba dulces. -Decía.- Y acá vive un amigo.
-¿Cómo se llama?
-Stephen. Y ese es un jardín al que iré pronto. -Miré al jardín infantil, obviamente no iría ahí después de lo que había pasado.
-Llegamos, ____. -Asentí y abrí la puerta. James me había dado la llave, que por cierto no sé cómo la había obtenido, así que abrí y entramos.
-Bien, Bryan. ¿Dónde está tu habitación?
-Por aquí. -Caminó por el pasillo.
-En esta maleta guardaremos todo lo que quieras llevarte a casa de papi, ¿De acuerdo? -El niño asintió.
-Mi balón y mi camiseta. -Apuntó a su cama.- Y mi transformer, y a capitán américa. -Iba metiendo todo en la maleta.- Mis zapatillas favoritas y la gorra que firmó Michael Jordan. -Sonreí cuando miró la gorra con orgullo.- Mami me la regaló, ella era una gran fan.
-¿Y esos autos?
-Papi tiene muchos allá. -Asentí. Bryan corrió por el pasillo hasta otra habitación, le seguí y vi que era la de Victoria.- Mami dijo que cuando se fuera con Dios me llevara conmigo esto.
-Es muy bonito. -Tomé el cuadro en donde salía ella y él sonriendo.- Será un hermoso recuerdo, Bryan.
-Extrañaré a mami, ¿Verdad? -Me dijo triste.
-Sí, mi papi también se fue con Dios.
-¿En serio? -Abrió grande sus ojos.- ¿Y lo extrañas?
-Mucho.
-¿___? -Me llamó por mi nombre esta vez.- ¿Cuidarás de mí y de papi, cierto?
-Sí. -Le sonreí.
-Gracias.
Llegamos a casa luego de una hora, James estaba serio mirando a la pantalla de su laptop. Me acerqué a él y lo abracé por detrás.
-¿Estás bien?
-Sí. -Dijo con voz apagada.- ______... Alguien quiso matar a Victoria. Lo del avión no fue un accidente.