Maratón 4|4
Capitulo 15Eran las ocho de la mañana y me encontraba lista para dar mi entrevista con una familia que necesitaba una niñera durante la semana. Una amiga mía le habló de mí a la señora Rose y ella había accedido a la entrevista.
-Buenos días, ____. -Me saludó amable la señora de unos treinta años.
-Buenos días. -Le sonreí.
-Pasa, siéntate. -Pasé y me senté en un sillón, ella se sentó frente a mí.- Bien, Laura me habló muy bien de ti, has cuidado a niños antes.
-Sí, bastantes como para tener buena experiencia.
-De acuerdo. Clarisse tiene ocho años, es una niña muy tranquila, pero no me agrada el hecho de que esté sola en casa de lunes a viernes durante todo el día. Tiene horarios muy marcados y... -Escuché su charla. Rose era una señora de alta sociedad, era restringida en sus cosas y muy correcta.- No golosinas y no comidas fuera de hora, a menos que sea una fruta.
-Sí.
-Como estamos a poco de empezar clases, necesita todos los días una hora de reforzamiento. -Su charla no era de lo más interesante, pero era mi nuevo empleo. La mujer pagaba bastante bien.- ¿Alguna duda, ____?
-Sí, mire yo quería saber si podría cuidar a Clarisse en donde vivo.
-¿Y dónde vive? -Me preguntó analizándome.
-Vivo con el empresario James Maslow. -La mujer abrió grande sus ojos.
-¿James Maslow? -Asentí.- ¿Trabajas para él?
-No. Solo vivo con él. -La mujer asintió.
-Entonces no veo problema para que ella sea cuidada ahí. -Asentí.- Bien, _____. Puedes comenzar desde ya. Debo irme, confío en ti.
-Sí, señora Rose. -La pequeña niña de ocho años bajó las escaleras y me sonrió.
-Clarisse, ella es ____. Tu nueva niñera.
-Buenos días, señorita ____. -Me saludó amable.
-Buenos días, Clarisse.
Las tres salimos de la gran casa y la mujer se despidió de su hija, subió a su auto y se fue. Yo miré a Clarisse por último y me dirigí a mi auto y abrí mi puerta, ella subió del lado del pasajero.
-Lindo auto. -Le sonreí y asentí.- ¿Dónde vives?
-En una casa muy hermosa.
-¿Más que la mía?
-Oh. No lo sé, tu casa es muy linda también. -Realmente la casa de James no se comparaba con nada.
-¿Cuántos años tienes?
-Veinte.
-¿Y tienes novio?
-Eh... Creo. -Le sonreí al recordar a James.
-¿Es guapo? -La niña me miró con ojos brillantes, de seguro a ella le gustaba algún chico.
-Muchísimo. -La niña se rió.- ¿Y tú, tienes novio?
-Oh, yo no puedo. Mi padre me lo prohíbe. -Clarisse era muy educada y respetuosa, no tuteaba y hablaba muy formal.- Pero hay un chico, se llama Logan y vive en la casa de al lado.
-¿Y qué tal?
-Él es el típico niño machista hijo de papá. -Dijo de mala gana lo que me causo gracia.- Cree que tiene a todas las chicas a sus pies, oh, y créeme que es cierto, pero eso le hace ser egocéntrico. -Me reí, la niña hablaba como si él y ella fueran adolescentes.
-¿Y cuántos años tiene?
-Nueve. Es simpático, cuando quiere. A veces él viene a mi casa o yo a la de él. -Llegamos a la gran casa de James y la niña se quedó callada.- ¿Aquí vives?
-Sí.
-Wow... ¡Esta casa es mil veces más hermosa que la mía, señorita ____! -Dijo emocionada. Reí.- De seguro es genial. ¿Y todos estos autos? -Dijo señalando los autos de James, Kenny, Richard, Scarlett y Camille.
-Son de la gente que trabaja aquí, y el auto del dueño.
-¿No eres tú la dueña?
-No, James Maslow lo es. Él es un...
-Empresario, hace negocios con papá. -Habló por mí.- Él sí que es guapo, pero es muy grande para mí, ¿No crees? -Estallé en risas y asentí. Era divertido escucharla hablar.
-Bien, vamos.
Bajamos del auto y nos dirigimos a la entrada, Camille acababa de salir de la cocina y hablaba con Scarlett. Richard escribía algo en su móvil y Kenny bajaba las escaleras. No vi a James así que supuse que estaría arriba.
-Hola, ella es Clarisse. -La niña sonrió.
-Buenos días. -Todos le sonrieron y saludaron.
-Él es Kenny. -Apunté al moreno alto.- Y aquel es Richard. -El moreno le saludó.- Son los guardaespaldas de James. Ella es Camille, mi mejor amiga y también es la cocinera,te gustaran mucho sus comidas. Y aquella de allá es Scarlett, ella cuida el jardín.
-¿Y tú que haces aquí?
-Oh, yo solo vivo aquí. Antes me dedicaba a limpiar, pero ahora solo seré tu niñera. -La niña asintió.
-Me caes bien, señorita ____.
-Tú también, Clarisse. -Le sonreí, miré hacia arriba cuando oí que alguien bajaba las escaleras, James venía con una sonrisa mientras me miraba, hasta que vio a Clarisse y su ceño se frunció.
-Hola. -Me saludó y luego miró a la niña.- ¿Y tú eres?
-Soy Clarisse Müller, mi padre hace negocios con usted en la industria de mercantiles. -James asintió.
-Harold Müller. -La niña asintió.
-Es mi nuevo trabajo, soy su niñera. -Le hablé a James cuando me miró.- La traeré aquí. Si no te molesta.
-Oh. -Frunció el ceño, parecía no gustarle la idea, pero luego le sonrió a la niña.- Claro, mira ve a aquella habitación y puedes hacer lo que quieras. -Le señaló la habitación en la que los hermanitos de James siempre jugaban cuando le visitaban.
-Claro, señor Maslow. -Vi la hora, en quince minutos le tocaba su medicina para el resfrío.
-¿Por qué la traes aquí sin mi permiso?
-Creí que querías mantenerme contigo.
-Sí, así es.
-Si no me la traía conmigo tendría que estar de lunes a viernes de nueve a diez de la noche fuera de casa. -James bufó.
-Está bien. ¿No pudiste conseguir otro trabajo? Tal vez vendedora o...
-No, además me gusta cuidar niños. Tengo experiencia.
-Hoy te inscribí en Stanford University.
-Espera, ¿Qué?
-Lo que oíste.
-Dije que no quería que pagaras mi universidad.
-Y te dije que lo haría porque quería hacerlo. Vamos, si no te agrada la de Stanford...
-No, no. Está bien, iré. Pero hay un problema.
-¿Cuál? -Levantó una ceja.
-Perderé mi trabajo como niñera.
-Oh. Eh...
-Déjame pensarlo, ¿Sí?
-De acuerdo. -Me besó la frente y sonreí.
-Pensé que sería peor tu reacción ante traer a Clarisse, cuando la viste en un comienzo no parecías feliz.
-Y créeme que no lo estoy, pero es la hija de uno de mis mayores negociantes. -Me reí.- ¿A qué hora se va?
-A las diez pasan a buscarla. -James asintió.
-Bien, te compré algo que quiero que uses esta noche.
-¿Volveremos a salir? -Le pregunté con una sonrisa coqueta.
-No exactamente. -Me guiñó un ojo y se fue a un sillón, yo fui en busca de las pastillas de Clarisse para dárselas.
¿Qué tienes preparado para esta noche, James Maslow, eh?Perdón por la tardanza :c
Lo que pasa es que mi celular ya no cargaba y tuve que mandarlo a arreglar, subiré capitulo diaro.
A no ser...