Caminó lo más cautelosa posible por las escaleras que para su pesar se movían como en el día, bajo hasta el primer piso y se dirigió al despacho del director agradeciendo a Merlín el que no la hubieran descubierto. Entró en completo silencio al despacho, usó lumus para tener mejor visibilidad y comenzó a buscar el pensadero, luego de unos minutos sin éxito se apolla en us espejo o eso parecía ser, pero al contacto éste se abre empujando a la chica que cae al suelo, soltando el frasquito que rueda hasta chicar con las patas de una mesa. Se voltea a ver que la empujó y vio que era pensadero que tanto había buscado, busca el frasquito y nota que no lo tiene en su poder, comienza a buscarlo asustada y lo ve brillar, lo toma con sumo cuidado y al observar mejor las huellas sucias que habían en éste recuerda...
-la casa de los gritos...-murmuró-las memorias de Snape, lo que vio Harry...-volvió a murmurar sin quitarle la vista al frasquito sorprendida e intrigada.
Miró el pensadero y nuevamente el frasquito, caminó lentamente hacia el pensadero y con un poco de duda vierte el contenido total, temblorosa por lo que podría ver, se sumerge. Ve toda la vida de Snape, su niñez con Lily, parte de su vida en Hogwarts, sus errores, sus dolores y como hasta sus últimas instancias trató de enmendar todo y también cómo protegió a Harry hasta el final, todo lo que Dumbledore le dijo y ella sabía a medias, y por sobretodo el amor eterno por Lily, la madre de Harry, y el odio por James principalmente, seguido por Sirius, Peter y Remus. Finalmente sale de golpe del pensadero cayendo al suelo completamente agitada, miraba el suelo con los ojos abiertos, tratando de procesar y recordar todo lo que ocurrió finalmente en la batalla final. Pero de golpe un movimiento en el despacho la saca de sus pensamientos, haciéndola saltar y sacar su varita en posición de ataque, pero una luz la apunta y una voz serena sale de la oscuridad.
-Espero haya encontrado algo útil Señorita Granger, pero como la veo...creo que ha conseguido una buena pista...-Dumbledore con un leve movimiento de varita enciende todas las luces del despacho, dejándose ver con su bata azul llena de estrellas, sus gafas de media lunas y su gorro que hacía juego con su bata.
La mujer sorprendida, pensó cuánto tiempo llevaba el anciano ahí, pero pronto atinó a responderle.
-Disculpe profesor... no quería molestar...yo...-La mujer no sabía muy bien que decir, había entrado sin permiso y había utilizado un objeto de uso exclusivo del director, por lo que sus escusas no eran válidas, o al menos para ella.
-Oh, no se preocupe Señorita Granger, el uso de este magnífico artefacto no me molesta si es para fines específicos y claramente productivos...lamento mi intromisión, pero me atrevo a preguntar...¿encontró lo que necesitaba?-Dicho eso la mira por sobre sus gafas esperando una respuesta.
-ehhh, si profesor, eso creo, aunque no se cómo utilizar lo que encontré a nuestro favor...-Respondió un poco pensativa.
-Creo...Señorita Granger...que sabrá ocupar perfectamente esa información...Oh! Antes que lo olvide, como usted sabe, y mejor que nosotros, quedan solo unos días para que ellos ingresen, y está demás decir que el profesor Snape necesitará de toda su ayuda, pero lo que le quiero solicitar además es que... no deje de buscar, usted mejor que nadie sabe lo riesgoso que es interferir en el tiempo, sobretodo en el pasado, mantener el secreto es fundamental, pero vulnerar a Tom es esencial, la ventaja es importante, y que él crea tenerla es más aún, no se rinda, como le dije alguna vez...Si todo sale bien, más de un inocente se salvará...- El anciano le guiña un ojo, se da media vuelta y se retira del despacho, dejando a una castaña total y completamente extrañada.
-Profesor...¿Profesor...?...- Lo llamaba casi en susurro, pero él ya se había ido.
La mujer salió del despacho del director y sin saber a donde, comenzó a caminar por el gran y oscuro castillo. La luz de la luna no era lo suficientemente fuerte, las nubes la escondían constantemente, las estrellas estaban dormidas, y los pensamientos de Hermione revoloteaban como los sueños de chicos con esperanzas, no sabía como tomar lo visto en el pensadero, Snape hasta estos días estaba enamorado de Lily Potter, de Lily Evans, Dumbledore le pidió que lo asesinara, con ello protegió a Draco e hizo que Voldemort confiara 100% en él, ayudó a Harry con los Horrocrux y le entregó la espada de Griffindor y al final, a pesar de todo, muere de la peor forma, guardó silencio hasta el final, en pocas palabras gracias a él Harry obtuvo la mayor de las ventajas, la confianza de triunfo de Voldemort.
-"Más de un inocente se salvará..."-Murmuró
Caminando por los pasillos silenciosos y oscuros nota que llega cerca del aula de DCAO, ve la escalera de caracol y opta por subir. Se detiene a mitad de camino y se queda viendo wl ventanal, el cielo estaba cubierto por las nubes, la luna ya no se veía más que su luz difumimada, las estrellas no existían y el bosque daba la impresión de que crecía con la oscuridad, bajó la vista con pena, aceptando que no podría salvar a todos los inocentes, sobretodo si no encontraba lo que faltaba para volver a Voldemort mortal.
Luego de unos minutos así, la castaña retomó su camino escaleras arriba en dirección al aula, sabiendo que era ya muy tarde entró en silencio, recorrió la sala como recordando su época escolar, recordó a los distintos profesores que ocuparon el puesto y sonrió ante ello, se sentó donde solía estar en clases durante 6 años y miró con detenimiento el aula, notó que en el librero bajo uno de los ventanales había una sección de pociones, lo cual le pareció gracioso, pero viniendo de Snape lo tomó como completamente probable. Con cautela decidió tomar uno y volvió al mismo lugar donde se encontraba y comenzó a leerlo-"Como en los viejos tiempos"-Pensó.
Snape al dejar a Kathe en la entrada de su cuarto su brazo izquierdo le ardió terriblemente, haciéndolo irse antes que la chica se despidiera de él, bajó las escaleras y tomó un atajo para llegar más rápido a las afueras del colegio y desaparecer, llegando a la Mansión Malfoy, entró decidido y serio, como siempre, pero un raro sentimiento lo tenía levemente inquieto, al llegar a la sala donde Voldemort los solía reunir nota que sólo estaba la familia anfitriona, Bellatrix y ahora él.
-Severus, me alegra que llegaras tan rápido, te estabamos esperando...-Dice una voz siceante, que lentamente se dejó ver por detrás de Snape, haciendo que éste se corriera de inmediato.
-Mi Señor...-Comienza diciendo Snape-¿A que se debe...esta honorable... invitación...?-Concluye preguntando mientras veía de reojo los rostros de espando del trío Malfoy y los ojos de culpa de Bella.
-Creo Severus...que el ver a las personas citadas esta noche te puede dar una pequeña pista...pero...para no ir con más rodeos supongo que la frase juramento inquebrantable te dice algo...-Concluye Voldemort furioso
-Mi Señor...-Trata de hablar Bella, pero Voldemort la calla, mirando indignado a Snape, quien cada segundo que transcurría se inquietaba cada vez más.
-Espero una explicación Severus...después de todo has sido uno de mis más fieles y mejores servidores durante estos años...y como saben que soy misericordioso te doy esta magnífica oportunidad para que te salves...dándome una buena explicación de ¡¿por qué...me...ocultaste eso?!-Dicho eso Voldemort en un arranque de ira desde la punta de su varita sale un látigo que golpea a la familia Malfoy y los envía al otro lado de la habitación, a Bellatrix la lanzó hacia un costado de la habitación y a Snape lo toma del cuello elevandolo y acercandolo lentamente.-Dime Severus...espero tu explicación...-Dijo Voldemort taladrando con sus ojos rojos a un Snape que trataba de mantener la calma y la seriedad para que éste no entrara en su mente.
-Mi Señor...se que no fue correcto haber hecho eso sin su permiso pero...fue...para ayudar al muchacho, además... el cumplir esa misión sería un honor...debido a todo...el tiempo que llevo...fingiendo lealtad hacia él...- Dijo Snape casi sin respiración.
Voldemort lo miró detenidamente a los ojos, buscando algún indicio de que le estuviera mintiendo, pero al no encontrar nada con rabia lo suelta bruscamente dejándolo caer; Snape trató de recuperarse rápidamente, pero Voldemort con ganas de no ceder lanzó Crucios a diestra y siniestra, Lucius muerto de miedo terminó arrodillado implorando piedad, Draco fue sacado de la sala por Narcissa mientras Bellatrix se arrojó a los pies de Voldemort y Snape trató de mantenerse en pie lo más erguido posible, pero el dolor le era casi imposible de soportar.
-Espero...que valoren mi compasión...porque no toleraré otro error, y que esto les sirva de lección...-Terminado de decir aquello Voldemort desaparece de la sala dejando a los adultos solos
-¡Todo es tu culpa maldito traidor!-Gritó Bellatrix lanzándose contra Snape, quién débil logra apuntarla con su varita frenándola de golpe.
Lucius solo observo la escena aterrado por lo que acababa de suceder y finalmente luego de ver como su loca cuñada quería atacar a su "amigo" le gritó
-¡Basta! Bella... el buscar culpables no sirve de nada, y menos culpar a Severus de traidor...siendo él quien aceptó cumplir la tarea de Draco a pesar de los riesgos que corría si nuestro Señor se enteraba, asi que Bella no vuelvas a tratarlo así en MI casa...- Sentenció Lucius, dejando a Bella indignada y a un Snape sorprendido, tratando de parecer serio Malfoy padre se retira de la habitación, Bellatrix miró furiosa a Snape y éste se va ignorandola. Apareció a las afueras de Hogwarts apenas, con dificultad se dirigió a su despacho sin mucha precaución, estaba molesto y el tener cuidado era lo último que le preocupaba. Al llegar entró de golpe al aula de DCAO chocando estrepitosamente con las mesas haciendo saltar a una castaña que se había dormido leyendo un libro. Ella rápidamente fue a su ayuda, pero éste la aparta tratando de pararse solo, pero no pudo y terminó por sentarse golpeando frustrado la mesa haciendo saltar a la mujer frente a él.
-Déjeme...-Dijo casi en un susurro
-Profesor...¿qué le ha ocurrido?- Preguntó preocupada Hermione.
-Nada que le importe, pero... si quiere quedarse aquí... agradecería que me diera la botella azul...- Dijo apuntando a un estante lejano que aparentemente estaba cerrado, corrió a éste y lo abrió rápidamente buscando la botella, al encontrarla corre donde el hombre que tenía apoyada su cabeza en la mesa y le tiende la botellita, éste se percata y la toma débilmente y la bebe de un trago haciendo una mueca de asco al terminar el contenido.
-¿Qué hace aquí señorita?- Pregunta finalmente Snape con voz cansada.
-Yo...bueno...lo lamento, espero se encuentre mejor mañana profesor...-Dijo la castaña quien se levantó y se dirigió a la salida del aula
-Profesora...le...agradezco el que haya estado aquí...- La miró y le dio una casi imperceptible sonrisa que ella sin notarlo le devolvió, se retiró lentamente dejando a un Snape cansado sentado en el aula.

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Recuerdos de Terciopelo
Fanfiction¿Volver al pasado arreglará las cosas o las empeorará? Hermione ha vivido oculta durante 16 años buscando una solución para acabar con la tiranía de Lord Voldemort y sus seguidores, y al parecer volver al pasado ha sido la solución, ¿pero el ya ser...