Narra Sebastian
- Ja ja ja ¡ven preciosa! -llamé a Lucy, la perra había tomado mucho y estaba en el tope. Y claro, yo no iba a perder la oportunidad.
- ¿Me llamaste mi amooor? -la pelirroja con las justas se movía.
- Si bebé -la senté en mis piernas y le empecé a tocar su barriga, lentamente hasta llegar a su busto- Amor, ¿Y si vamos al segundo piso?
- ¿El segundo piso? ¿Y por qué?
- Hay habitaciones...
- Sebas, sabes lo que... -empezó a reir- ¿escuchaste? Sebas Sabes.
Estúpida. Pero con ella ya no iba a cometer errores. Sofia tuvo suerte pero Lucy no.
Sonó la puerta. Creo que Volker llegó.
- ¡¿Por qué fuiste allá?! ¡¿Ah?! -escuché gritos de parte de Volker- ¡¿Fuiste a ayudar a la zorrita?! ¡¿Te querías escapar o que?!
Mierda. Volker de mierda. Lucy se enterará.
Miré la puerta mientras los gritos sonaban cada vez mas fuerte.
- ¡Hermano! -gritó Volker, tenía a Claudia de las mechas- esta zorrita se quería escapar.
- ¡No es cierto! -dijo ella llorando, la debilidad me encanta- ¡Fui a buscar un cigarro!
Fruncí el ceño, era obvio que me mentía. Odio que me mientan.
Miré a Luis (Volker) serio.
- Encargate -sentencié.
- ¡Ya escuchaste! -llevó a Claudia de las mechas al segundo piso.
Lucy tenía los ojos abiertos como platos, no decía nada. Eso era mala señal ya que ella es muy parlanchina.
- Sebas... Sebastian... -volteó a verme- ¿Qué esta pasando? -dijo nerviosa.
- Nada -agarre un mechón de su cabello y lo puse atrás de su oreja- no te pasará nada si me obedeces.
La estúpida me miró asustada, apuesto que haria de todo, para salir de aquí.
- No entiendo.
- ¡¿Qué no entiendes?! -le grité hostilmente- Subamos.
- ¡¿Qué?! ¿Estas bromeando verdad? -sus palabras se rompen una a una.
- No princesa -Alcé mis piernas para instantáneamente pararla- sube.
- Sabes lo que pienso del sexo, no lo haré.
- ¿Y quién te está preguntando?
- ¡No lo haré! -me gritó y se quiso escapar de mí pero obviamente la atrape.
- Si lo harás putita -le tiré una cachetada y rompí su labio inferior. Igual me sirven.
Empezó a llorar y tocar sus labios, que idiota y débil.
La agarré del brazo y la subí.
Encontré a Ramiro cuidando el pasillo de las habitaciones.
- ¿En cual está Volker?
- En la tres.
- Perfecto, dame la cuatro -quiero escuchar a Claudia gemir, amo cuando lo hace.
- Disculpa esta ocupada.
- ¿Disculpa? -dije sarcasticamente- ¡¿Sabes quien soy?! -lo empuje.
- ¡Oh disculpe señor Sebastian!
- Como sea, dame la llave -él me la dió sin mas reparo.
Entré a la habitación, encontré a Caroline. Una zorra que me follé hace 3 meses. Ella me da buenas ganancias.
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Y Me Desnudé
Teen FictionNo soy una escritora y el escribir esto no me convierte en una. Todo tiene un comienzo, quizás el mio fue demasiado pronto. Tenía diecisiete cuando lo conocí, era apuesto, de ojos verdes y cabello marrón. Solo tenía dos años más que yo. Y yo... ¿y...