Beethoven (au // h.s)

No. 17

"Porque te quise y te quiero, aunque estemos destinados a no ser" – Julio Cortázar.

El silencio inunda la habitación, es tan intenso y penetrable para mis oídos que se hace cada vez más incómodo a la vez que pasan los segundos. Y es un momento perfecto para que mi mente comience a divagar los primeros días que conversamos y apenas nos podíamos mirar. Ahora es casi lo mismo ya que por alguna razón no somos capaces de mirarnos a los ojos.

No tengo intención de echarlo de mi habitación menos tengo el corazón para guardar rencor hacia él por las palabras que han pronunciado sus labios anoche en el pub; mas solo quiero saber la razón de su comportamiento.

—Debí haberte confundido con alguien —su voz ronca hace que mi piel se erice y por la misma razón levanto la vista hacia él. Harry mira hacia la ventana a mis espaldas, al lado del respaldo de mi cama. Me pregunto si lo hace para evitar mi mirada o simplemente está recordando algo.

—Sí. —digo sin ser capaz de decir otra respuesta.

—Nunca te trataría así. —los músculos de la mandíbula se le tensan y con aquella acción aparta su mirada de la ventana y nuestras miradas se encuentran— No a ti, Grace.

Suspira exageradamente. Parece rendido, arrepentido y muy quebrado. Está quebrado por todos sus demonios y es rara la sensación que me invade pero por alguna razón le creo. Sé que anoche no hablaba de mí, en un lugar muy profundo de mi corazón yo sabía que Harry no se refería a mí. Me pregunto si Eloise tiene algo que ver con su comportamiento de anoche pero su siguiente declaración me deja helada y de inmediato olvido preguntarle acerca de ella.

—Cuando decía que me gustabas, lo decía en serio.

Un latido de mi corazón parece saltarse y luego siento como las mejillas se me enrojecen, las palmas me sudan y como todo el muro que había estado construyendo se desmorona.

Me limito a mirarlo por unos segundos más y luego agachar la cabeza a mis manos.

—Harry...

Levanto la mirada para encontrarme con la suya. Siento todo y al mismo tiempo nada. Siento como con solo su mirada me llena el alma, pero aún así no lo siento como realmente lo quiero sentir: piel con piel.

—No me refería a ti, Grace. —vuelve a repetir, su voz sacándome de mi pequeña ensoñación.

Eloise vuelve a mi mente al oír sus palabras y les doy un propio sentido a lo que escucho.

—Entonces...

Él asiente para que prosiga.

—¿Quién es Eloise? —inhalo con profundidad— Sé que nunca me has hablado de ella pero-

—¿Cómo sabes de ella?

Sus ojos, ahora de un verde oscuro, brillan con un destello de frialdad y su ceño se le frunce. Se le ve enfadado y molesto.

—N-No debería haber preguntado, pero así como tú me has preguntado por mí pasado yo también...

Harry se acerca a mí y me toma los brazos enterrando sus pulgares en mi piel, no me hace daño pero es un poco brusco por lo que sus pulgares hacen presión sobre mí. Cierro los ojos y giro la cabeza sintiendo su aliento tibio en mi mejilla.

—Deja de meterte donde no te llaman, Grace. —susurra entre dientes— Por el amor de Dios, siempre quieres saberlo todo y andas husmeando.

Las mejillas se me sonrojan y lo empujo por los hombros. Es la primera vez que realmente ha sido agresivo y torpe. No me gusta para nada este Harry tóxico y antipático que me hace sentir débil y humillada. Estos dos últimos días no hay momento que no me sienta de esta forma cuando estoy a su alrededor. Podría acostumbrarme pero no... No dejaré que me trate así nunca más.