Ojala te enamores (Borrador)

XXVI

Han pasado tres días y hace dos en total que estoy dándole vueltas al asunto sé que he dicho que no quiero presionarla, que no está lista para ningún tipo de declaración pero desde el instante en que mi padre me hablo de la fiesta de negocios a la que quiere que vaya sé que quiero invitarla. Por eso, ahora mismo cuando estamos simplemente hablando sentados en el sofá de mi apartamento no tengo la menor idea de que me está diciendo. Me siento demasiado perdido en el hecho si decirle o no.

- Okey, ¿Qué es lo que sucede? –me dice de sopetón quitándome de mis pensamientos.

- ¿Cómo? –digo sin entender.

- ¿Qué pasa? –me dice para sentarse derecha encima de mi regazo.

Lleva uno de mis buzos puestos y su pelo recogido en un rodete alto con algunos pelos salidos de lugar es tan guapa.

- ¿Con que?

- No estas prestando atención a lo que estoy diciendo y siento que estas en algún mundo paralelo- comienza a explicarse sin quitar sus ojos de mi- No me gusta que me oculten cosas, Evan.

Pronuncia mi nombre como si fuera una advertencia.

- ¿Quieres ir al evento de mis padres hoy en la noche?- consulto.

Veo como parpadea sorprendida, aja, esto sí que no se lo esperaba.

- ¿Qué?- dice para fruncir el ceño- ¿Tu, quieres que yo te acompañe?- asiento lentamente- pero... ¿Por qué?

- Buena pregunta- le digo para acariciar su mejilla- porque eres la mejor compañía que puedo tener.

Ella alza una de sus cejas para ladear su cabeza, me sonríe con dulzura para recostarse encima de mi cuerpo y besarme.

- Jamás me han dicho algo más tierno- murmura para pegar de nuevo sus labios a los míos.

Subo mis manos por su espalda para apoyarlas en su nuca, mientras que nuestro beso se identifica lo suficiente para mi lengua tenga acceso libre a su boca. La recorro despacio mientras que ella apoya sus manos en mi pecho. Mmm... sabe a menta por culpa de la pasta de dientes. La tomo de su pequeña cara para alejarme unos centímetros.

- ¿Eso es un sí?- consulto mirándola a los ojos, ella asiente para volver a dejar un beso en mis labios.

- Tendré que ver que tengo para ponerme –me dice mientras que la veo pensar seriamente que ropa tiene- ¿Es formal la vestimenta?- asiento –Oh creo que tengo vestidos largos.

- Cualquier vestido te quedaría bien –digo para ganar su atención y verla sonreír con timidez.

- ¿Tú crees? –asiento para verla acercarse y dejar un beso en la punta de mi nariz- gracias por el halago. Debería irme entonces –dice para ponerse de pie y comenzar a buscar su cartera.

La sigo con mi mirada, va hasta la mesa para buscar su cartera veo como saca el perfume, se coloca un poco en el cuello y luego en sus muñecas. Me pongo de pie para ir hasta donde se encuentra y rodear su cintura pequeña con mis brazos.

- ¿Ya tienes que irte?- consulto pegando mis labios a su oreja.

- Debería, si quiero estar lista para la noche- murmura mientras que corre su pelo de lugar dejando su cuello expuesto.

Sonrio para pegar mis labios a su cuello y recorrerlo.

- ¿Quieres que te alcance?