- "Vayamos en tren", dijo. "No habrá aparcamiento" - me imitó Hugo de forma sarcástica -. ¡¿Y de qué cojones nos sirve ir en tren si no llegamos a nuestro destino?!
- Cállate, niño - el hombre que lo tenía entre sus piernas le pegó una colleja -. No me das placer con esas palabras así que limítate a hablar menos y a trabajar más. Tu lengua no está para eso.
Me habían atado la boca, las manos y las piernas con numerosos nudos por precaución, mientras que a Hugo lo habían dejado suelto y más preso que yo a la vez. Cuatro hombres lo cogían de pies y manos obligándolo a hacerles felaciones a cada uno de ellos por turnos.
- Para hacer esto gratis se lo hago a Lorenz que al menos me restaría dinero de la deuda - continuó quejándose -. Aunque eso conlleve unos peores tratos, pero la verdad es que en situaciones así me habría gustado elegir. ¿Tú no, Brad?
- ¡Que te calles y sigas chupando, hijo de puta! - le gritó golpeándolo con más fuerza.
Hugo se encontraba tirado en el suelo con una mano en la zona afectada pero sin mostrar alguna expresión de dolor. Me miraba a mí fijamente y sonreía.
Aquella sonrisa me dolía muchísimo.
- La próxima vez pasaré la tarde en un lugar donde saque mayor beneficio.
No, Hugo. No, por favor. Otra vez no.
Mis ojos sangraban de ver esas escenas y mi cuerpo se inundaba por dentro pero no podía hacer nada; estaba inmovilizado y mudo.
- Aunque me haya alegrado de volver contigo, veo que no ha cambiado nuestra relación en absoluto. Sigo sin importarte ya que no has movido ni un músculo desde que te sentaron ahí.
Eso no es cierto, Hugo. Realmente no puedo...
- No has sido la elección correcta.
No has sido la elección correcta.
No has sido la elección correcta.
No has sido la elección correcta.
No has sido la elección correcta.
- ¡¡NOOOOOOOOOOO...!!
***
- ¡¡AHHHH!! - grité sobresaltándome.
Entonces la puerta de mi cuarto se abrió y entró Elmer con Hugo corriendo (los únicos que dormían en la planta superior).
- ¿Qué ha ocurrido? - preguntaron a la vez.
Estaba en mi cama únicamente en pantalón, con la manta en el suelo y la habitación hecha un desastre.
- ¿Te ha vuelto a pasar, Brad? - volvió a intervenir Elmer -. ¿El sonambulismo?
- ¿Eres sonámbulo? - Hugo reaccionó como si hubiera oído por primera vez aquello de mí.
Aunque así era.
Me froté la cabeza observando lo que había hecho y esa era la única explicación lógica.
- Parece ser que sí...
- Voy a traerte un vaso de leche - se ofreció mi hermano.
- Gracias.
Me dejé caer de vuelta sobre el colchón y solté un largo suspiro. El joven de cabello azabache se sentó a mi lado permaneciendo en silencio.
- Tuve una pesadilla - comencé a hablar en voz baja -. He tenido muchas realmente y algunas se han hecho realidad.
Tenía miedo de que esta última también llegase a ser una especie de visión.
ESTÁS LEYENDO
Solitaria realidad [BL]
Teen FictionSexo y droga. Estas dos palabras eran suficientes para describir la establecida vida de Hugo Chance. Al no tener padres que se preocupasen por él, la calle era quien le enseñó lo que hoy en día la mayoría de vosotros no consideréis correcto. Eso era...