- Espera, Brad - me agarró de la mano aun sin haberse levantado -. Dije en serio lo de que no quiero avergonzarte delante de la gente. Seguramente tú no lo veas así pero yo no soy la novia perfecta que puedas presentar como a tu pareja y ambos lo sabemos.
Me hizo gracia que se llamara a sí mismo "novia perfecta" pero me aguanté las ganas de reír porque él no lo dijo en broma.
- Aun así... - continuó hablando -...me esforzaré en ser mejor persona para que no tengas que esconderme.
Abrí mucho los ojos sorprendido por su afirmación. Hugo no había bajado la mirada y desbordaba seguridad en su decisión.
¿Mis esfuerzos habían valido la pena? ¿Había influído positivamente en su vida?
Eso parecía ser, ¿verdad? En tal caso, ¿no significaba aquello que él ya estaba en proceso de ser mejor persona?
¿Cómo podría avergonzarme de alguien que ponía tanto esfuerzo en ello?
Lo atraje hacia mí tirando de su mano y obligándole a ponerse en pie. Una vez a mi lado, rodeé suavemente su cintura analizando su rostro ruborizado.
- Me acabas de dar otro motivo más para hacer esto - dije con una leve sonrisa.
Con una mano sobre su cintura, me agaché para tomar sus piernas y lo alcé en brazos.
- ¡¿Q-qué...?!
Forcejeó mientras yo lo llevaba hasta la cocina. No me importaba que no quisiera porque no tenía argumentos suficientes para hacerme cambiar de opinión.
Entré con Hugo exponiéndonos ante nuestra familia. Todos estaban sentados hablando hasta que irrumpimos en la sala.
- Papás, Elmer, os quiero dar la noticia de que, a partir de hoy, Hugo y yo somos pareja - lo bajé al suelo -. Lo he decidido así y no quiero oír comentarios en contra.
Miré a Elmer quien ya abrió la boca para decir algo.
- Está bien - habló.
- He dicho que no quiero oír... ¿qué?
- Que me parece mejor que establezcas como relación lo que sea que tengáis a que me lo mostréis como manoseos asquerosos sin sentido. Esteban, deberías enseñarle al prostituto a controlarse.
- ¡Serás capullo...! - Hugo se remangó la camiseta dirigiéndose hacia él pero yo lo detuve apresándolo.
- Creo que Brad puede hacerlo solo perfectamente - intervino uno de mis padres -. ¿Por qué no confías en él?
Mi hermano nos lanzó una mirada extraña tanto a Hugo como a mí pero la desvió pronto.
- Lo hago. La cuestión es cuánto durará esa confianza.
- Brad - me llamó Charles.
Sonrió y asintió dando su aprobación. Luego, Esteban hizo lo mismo.
- Gracias. Sabía que podía contar con vosotros.
Elmer no se volvió hacia nosotros así que fui yo quien se acercó y le revolvió el pelo.
- Gracias a ti también, Milka.
No me fijé en su rostro porque me senté a su lado pero sabía que se había sonrojado. Le gustaba que le llamase así aunque nunca lo admitiese.
Mi hermano menor, mi único hermano...siempre será mi pequeño Milka.
***
Después de comer, cogí el ordenador y me centré en lo que realmente tenía que hacer: buscar trabajo. No me importaba que fuera a tiempo parcial o completo ya que necesitaba conseguir dinero a toda costa para liberar a Hugo de su condena.
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Solitaria realidad [BL]
Teen FictionSexo y droga. Estas dos palabras eran suficientes para describir la establecida vida de Hugo Chance. Al no tener padres que se preocupasen por él, la calle era quien le enseñó lo que hoy en día la mayoría de vosotros no consideréis correcto. Eso era...