Juegos peligrosos.

Capítulo 2.

Finalizo la llamada de mi mejor amiga Alice, acordamos que pasaría por ella para ir a la universidad. Esta tarde decido tener mejor aspecto jeans, camisa color celeste y zapatillas negras. Ya no llevo los intentos de rizos de esta mañana, mi cabello lacio vuelve a su estado natural por debajo de mis senos, es hora de salir.

-Hola Ali. Me recibe con una gran sonrisa mi mejor amiga.

-Hola Ali. Le devuelvo el gesto.

-Oh, ¿Acaso me estás haciendo de loro?

-Ja, no. Coloco en marcha mi auto.

Estando en la universidad los estudiantes van y vienen con rapidez, se siente que hoy es viernes, todos desesperados porque terminen las clases y poder salir. Siento las miradas tras nosotras, no somos populares ni nada de esas estupideces pero a mi lado tengo una mujer hermosa, Alice es alta, su cabello negro azabache, hasta su cintura y con personalidad imparable.

-Mira como los tenéis a todos Alice. Digo en burla.

-¿Hablas en serio?-Rodea los ojos.- Tú me ganáis amiga.

Hago el mismo gesto.- Te veo al rato.

Alice estudia derecho y yo administración, pero estamos juntas cada que podemos. Sigo por el pasillo hacia mi salón de clase, observo a Jesús en medio de la puerta obstaculizando la entrada. 

-Buenos días primor. Dice con una sonrisa. 

-Déjame pasar. 

-Últimamente no traes buen humor. 

-Últimamente acabas con el.- déjame pasar, ahora.

-Me provoca darte unas cuantas nalgadas. -¿Sabías? Su tono seductor.

Al ver mis mejillas arder de coraje, se hace a un lado y levanta las manos. ¡Imbécil! El y todo el que piense que puede tocar mi trasero sin que yo lo quiera. La clase paso rapidísimo, agradeciendo a la vida porque solo entregamos el trabajo y hablamos en murmullos. Fui la primera en salir para evitar a mi desagradable compañero que podría decir, siempre anda buscando la manera de toparse conmigo. 

Estando en la cafetería me encuentro con Alice unos minutos.

-Nos vemos luego nena. Nos damos un abrazo y doy la vuelta.

-Te amo. Le escucho decir.

-Yo a ti. Respondo sin voltear y rodando los ojos. Pudo haberlo dicho estando al frente de mí, pero ella lo hace porque sabe que me avergüenza sus demostraciones a los gritos.

De nuevo en casa me acuesto sintiendo la vista irritada, cierro los ojos y en minutos entro en el mundo del sueño profundo. Al despertar observo mi celular son las 7:00 pm tengo tiempo, voy a darme una ducha, esta noche será mi noche. 

*La vida de Alison se tornará diferente, su vida aparentemente tranquila con objetivos de ahora en adelante se volverá un torbellino. No lo esta buscando pero va directo a eso.*