Se sintió como un simple tacto, una leve presión en los labios de él, que provocó millones de sentimientos en el cuerpo de ambos adolescentes.
— Lo siento tanto. —susurró ella con los ojos cerrados.
Luke abrió los suyos y la miró, una lágrima resbalaba por la mejilla de Alex, él se la limpió con el pulgar y ella abrió los ojos de golpe, echandose hacia atrás pero la mano de Luke se lo impidió, sujetando su cuello con delicadeza la atrajo hacia él y volvieron a juntar sus labios, esta vez por más tiempo.
Luke se habia impresionado él solo con su atrevimiento.
Los dos jóvenes tenian su pulso acelerado, ambos comenzaron a mover sus labios con las mejillas levemente sonrojadas, no sabian exactamente qué hacer.
Alexis le besaba con delicadeza, tenia miedo de que pudiera de alguna forma romperle, colocó sus manos en las mejillas de él y las acarició con cuidado.
Luke ya no sabia si estaba dormido o despierto, pero no le importaba nada. ¿Qué importaba el mundo, cuando él estaba con su mundo ahora?
— Tú no tienes culpa de nada. —susurró Luke cuando separaron sus labios dos centímetros, rozando los labios de ella cuando hablaba, y el rubio volvió a juntarlos antes de que Alex reprochara.
«Te quiero tanto, Alex» pensaba una y otra vez, queriendo gritarlo a los cuatro vientos, sin miedo, sin miedo de ser rechazado.
Luke notó como ella separaba sus labios de los de él y lo miró a los ojos. Luke se estremeció.
— Te quiero. —dijo ella susurrando, Luke apenas lo escuchó, pero lo hizo.
— ¿Qué? —fue lo único que salió de su garganta, sus manos empezaron a sudar. Intento tranquilizarse, seguro que lo habia oído mal.
— Que te quiero. —dijo sin vacilar, por fin Alexis habia aclarado sus sentimientos, se habia enamorado del chico tímido.
— No. —murmuró, su labio inferior temblaba.
Le estaba tomando el pelo, ¿cierto? Esto no podia estar pasando, él estaba soñando con esto de nuevo, él iba a despertarse en cualquier momento, esto no era real por mucho que él lo sintiera así.
Simplemente, estas cosas no le pasaban a personas como él.
