La Gran Profecia

Dos sonrisas inesperadas

-Se dice de la profecía que ¨A tus mayores rivales te tendrás que enfrentar y salir victorioso así será, con algo que tú tienes y ellos no tendrán solo de esa manera conseguirás la victoria para así que reine la paz¨- cito Totosai.

-Pero Totosai que quiere decir eso ¿Qué tenemos nosotros que no tengan ellos?- dijo Izayoi.

-Eso no os lo podemos decir, no lo sabemos eso deberéis descubrirlo ustedes, lo que si deberías de hablar es que haréis en la gran batalla no queda mucho y debéis prepararos.-dijo Totosai metiéndose el dedo en la oreja para sacarlo y mirarlo detenidamente.

-Si es verdad amo debéis prepararos todos habéis entrenado duro pero tenéis que entrenar mas, esta no va ser una batalla cualquiera son vuestros mayores enemigos.-dijo la pulga Myoga.

-Maldito Naraku ¡Tubo que volver!- Dijo Inuyasha molesto.

-Kagome debes cuidar tu corazón al igual que Rin e Izayoi, pero sobre todo tú Kagome debes cuidarlo muy bien no dejen que os lo oscurezcan, ya que si pasara eso sería vuestra perdicion.-dijo el anciano Myoga ignorando lo que acababa de decir Inuyasha.

-¿Por qué dices eso que peligro corren sus corazones? Responde Myoga.-dijo Sesshomaru que ya llevaba tiempo sin hablar aunque en aquel no era tan raro no hablar, cogió a la pulga entre sus garras con una amenaza de aplastarla si no hablaba con una mirada fría.

-Amo Sesshomaru yo le digo pero no me aplaste dijo la pulga temblando de miedo.

El aludido de inmediato aflojo su agarre dejando a la pulga libre la que salto y se puso en un dedo de Sesshomaru y hablo para todos.

-Que es lo que tienen en común estas tres mujeres.- dijo Myoga.

-Pues que han sido las tres humanas.- contesto Inuyasha.

-Exacto amo ¿Recuerdan lo que dijo Kikyo que pasaría si se convertían?

-Claro que si se convertirán en yokais pero una parte de su alma seguirá siendo humana.-dijo Inu no Taisho entendiendo todos lo que decía aquella pulga.

-Exacto veo que lo podéis comprender un humano su alma y corazón son lo principal se dictan por eso y ellos van a jugar con esa desventaja para aprovecharse además de que son humanas con las almas más puras y que Kagome ahora es la sacerdotisa con más poder que ha existido y por eso van a querer atacarla, debéis recordar lo que os a ensañado los entrenamientos fría y sin demostrar ningún sentimiento.

-Os quería preguntar viejos ¿Sabéis algo de los poderes de mis hijos y porque ninguno de los aquí presentes podemos sentirlos?

Los dos ancianos se miraron y quisieron huir pero Izayoi y Sango los atraparon además de llevarse un golpe fuerte en la cabeza con su Hiraikotsu provocándole un chichón a cada uno en sus cabezas.

-Hablad ya si no os matare.-dijo Sesshomaru dedicándole una de sus sonrisas más espeluznantes.

Los dos temblaban de miedo todos le miraban con la misma cara con ganas de fulminarlos incluso de matarlos.

-Son yokais deben de descubrirlos e....-no pudo terminar ya que Inuyasha se levanto y le pego un golpe a Totosai en la cabeza haciéndole un gran chichón.

-Pero también poseen poderes espirituales como yo ¿No es así?-dijo Kagome concentrada en aquellos dos viejos.

-Es raro pero si Kagome.-contesto Myoga todos pensaban que había terminado con su explicación pero no era así.-Es raro y nos sorprendimos cuando tu al convertirte en yokai siguieran tus poderes y no hubieras muerto, recuerda que eres sacerdotisa y que purificas, pero tú no perdiste tus poderes y tampoco moriste purificada es algo raro pero ha pasado eso quiere decir que eres un alma pura y tus hijos heredaron eso de ti un alma pura y que pueden controlar poderes espirituales al igual que demoniacos al igual que tu.

-Y además se han incrementado.-dijo también Totosai.

Todos estaban sorprendidos con la confesión de aquellos realmente no se la esperaban.

-Pero además todos poséis un poder en común pero... ese lo tendréis que descubrir por ustedes mismos nosotros no podemos hacer nada sino nunca aparecerán.

-¿Qué quieres decir Totosai? ¿Qué les queda un poder por descubrir?-pregunto el monje interesado.

-Monje Miroku no me explique bien, todos conseguirán un nuevo poder.

-¿Cómo?- Sango sorprendida miraba a los ancianos.

-Todos tendréis un poder que os conectara y que podréis utilizar cuando queráis, pero solo se activara cuando estéis preparados y lo demostréis.

-Pero ¿Qué queréis decir?-dijo ahora Inu no Taisho ya cabreado de tanto acertijo no era muy paciente al igual que Inuyasha.

-Señor no se lo podemos decir ni nosotros mismos sabemos que poder es solo sabemos lo que hemos dicho y que debéis de fortalecer vuestras armas y ataque, Monje dame su espada y báculo sagrado.

-¿Qué espada? Totosai.-dijo el monje desconcertado sin entender realmente a que se refería aquel viejo herrero.

-Esta.-dijo este señalando a su báculo sagrado.

-Pero si es mi báculo sagrado no es una espada.-a cada momento el monje estaba mas desconcertado no entendía que decía.

-¿Seguro?- lo cogió este y en dos movimientos se convirtió en una espada.

-Pero que has hecho ¿Cómo?-sorprendido por lo que acababa de suceder como todas aquellas personas que se encontraban en la habitación no concebían lo que sus ojos estaban viendo.

-Solamente que nunca supiste su poder real y nunca lo necesitaste de verdad con el agujero negro que poseías en tu mano derecha por eso no se activo nunca su función como espada.

Miroku la cogió y batió y una luz azul salió de esta.

-Es poder sagrado todo lo que toque con aura maligna lo purificara, en la lucha al tener tanta aura demoniaca maligna a tu alrededor este poder se incrementara cuando termines esta lo detectara como los colmillos y su poder será desactivado y volverá a ser el báculo sagrado que siempre has llevado.

-Debéis de entrenaros como bien decía en la profecía ¨A tus mayores rivales te tendrás que enfrentar y salir victorioso así será, con algo que tú tienes y ellos no tendrán solo de esa manera conseguirás la victoria para así que reine la paz¨ debéis estar preparados en cualquier momento puede empezar la batalla.-dijo el Anciano Totosai.

-Bueno nos debemos de ir, tenemos cosas que hacer vendremos haber como avanzáis.-Y con esto Myoga y Totosai desaparecieron de su vista.

-Pero ¿Que quisieron decir esos viejos? estamos más liados que al principio.- dijo Inuyasha cabreado.

-Inuyasha concentrarse y entrenar, ustedes sois los elegidos.

-Kikyo...-dijo Inuyasha sorprendido porque aquella sacerdotisa que fue el amor de su vida estaba allí de nuevo.

-Os traigo a dos aliados para que luchen con ustedes os serán de gran ayuda.-dijo Kikyo mirando a todo el que allí estaba reunido y sonrió de felicidad, cuando salió una luz cegadora que les mantenían los ojos cerrados cuando de repente desapareció esa luz, cuando abrieron los ojos no lo podían creer las dos mujeres que los miraban con una sonrisa.

-Pero, pero...-empezó a decir una Kagome mas que desconcertada.

-Estamos aquí para ayudaros, ustedes nos ayudasteis a morir en paz os debemos una.-dijo Kagura con una sonrisa mirando allí a todos los presentes sorprendidos.

-Pero Kanna Kagura estabais muertas.-dijo una Kagome sorprendida además tenían el aura limpia de maldad aura demoniaca pero limpia.

-Nos permitieron venir a ayudarles en la pelea después volveremos a desaparecer pero por ahora os ayudaremos.-dijo Kagura con una sonrisa y lo más sorprendente Kanna también sonreía.