Capítulo 8: "Gato tonto"

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Créditos de la imagen: LadyBug_1999

Narra: Adrien/Chat Noir.

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Me separé de Ladybug y comencé a buscar a Marinette. Cuando no la veía, mi pecho se apretaba y sentía miedo, miedo de que alguien me la robara sin que siquiera fuera mía.

Blaitt: La gatita tiene un hábito de desaparecer muy raro.

Chat Noir: ¿No le habrás hecho algo tú? Es decir, ¿qué haces en la preparatoria?

Ciertamente, Blaitt no me daba nada, NADA de confianza.

Blaitt: Cálmate. Quería visitarlos y me topé con este lío. No le hecho nada.

Chat Noir: Más te vale.

Seguimos avanzando por el pasillo, hasta que pasamos por fuera de la biblioteca y vi su hermosa figura dentro.

Marinette: ¡Oh, ¿Chat Noir?! ¿Qué haces aquí?

Su tono sonaba algo forzado, al igual que su sorpresa no me convenció del todo. Aunque sin duda, me reconfortaba saber que yo había provocado una sonrisa en su rostro.

Blaitt: Oye, yo también estoy aquí.

Chat Noir: Nada, sólo un akuma. Pero como yo estoy aquí, todos ya están a salvo.

Moví mis brazos queriendo presumir mi cuerpo.

Blaitt: ¿Me ignoran...?

Marinette: Ah, ya veo. -sonríe- Supongo que me perdí la acción. Me sacaron el salón por gritar "¡sal de mi cabeza!" en medio de la clase.

Me apoyé en la pared con el brazo, acercándome a ella.

Chat Noir: Y, ¿quién era el que ocupaba tus pensamientos, princesa?

Abrió los ojos con sorpresa y sus mejillas se tornaron de un leve color rojo. Era tan linda. Tomó un libro y se tapó la cara.

Marinette: Tú.

Esa simple palabra hizo que sintiera una fuerte punzada en el corazón. Lo dijo de esa forma tan tímida que casi me desestabilizó.

Marinette: M-Me refiero a que no podía dejar de pensar en lo agobiador que sería llegar a casa y lidiar contigo. Después de todo..., eres muy molesto.

Me regañé internamente por haberme ilusionado. Claro, ¿qué más iba a ser?

Chat Noir: Admite de una vez que caíste ante mí.

Lo decía como broma, pero en realidad me gustaría demasiado que eso pasase. Le quité el libro del rostro, la miré a los ojos.

Marinette: Qué dices, tonto. Eres sólo mi guardián, ¿recuerdas?

Chat Noir: Eso dolió -sonreí- No seas tan cruel~

Hice otro movimiento de acercamiento, pero esta vez ella no reaccionó. Vi sus labios de aspecto suave, me seguí aproximando.

Blaitt: Bien, suficiente. Si haces algo más, vomitaré, en serio vomitaré.

Las ganas de gritarle un montón de groserías por interrumpir NUESTRO momento aparecieron. Agaché la cabeza, esto se había vuelto vergonzoso.

La vi correrse de mi lado y sonreír algo nerviosa.

Marinette: C-Creo que debería volver a clases. ¡N-Nos vemos!

Vaya excusa. Aunque que era lindo saber que pudiste haberte ido antes y no lo hiciste.

Aún con mi pulso vuelto loco, miré a Blaitt y le di una patada con toda mi fuerza.

Blaitt: ¿¡Qué fue eso!?

Chat Noir: No tengo idea, mi pie llegó por inercia a tu cara. Qué raro.

Deshice mi transformación y viendo la hora, supe que correspondían mis clases de esgrima. Quería distraerme un rato.

Por la noche, fui a dar un pequeño paseo como Chat Noir por París. Hasta que llegó el momento de volver con Marinette.

Entré por la ventana de su habitación intentando no toparme con Blaitt. Ella estaba dulcemente dormida, así que para no despertarla, me quedé a dormir en el sillón de su cuarto.

Marinette: Chat Noir...

Chat Noir: ¿La desperté, princesa?

Me volví a levantar, pero ella seguía dormida. Me estaba llamando en sus sueños...

Marinette: No te vayas... Gato tonto.

No pude evitar sonreír.

Finalmente terminé ganándome en su cama. Pronto sentí como sus brazos rodearon mi cuerpo y me apretaban con fuerza.

Chat Noir: No pretendo estar en ningún otro lugar que no sea a tu lado. -susurro-

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Los dos Chat Noir'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora