Siempre fuiste tú

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Fuera de la habitación se había quedado un acalorado Uchiha, no se explicaba por qué le causó tanta curiosidad ver a naruto semidesnudo, no pudo evitar mirar y detallar los cambios que ha tenido, pues jamás había pensado en lo formado que estaría su amigo después de tantos años, eso era ilógico.

Pero ahora que lo tuvo ahí, frente a sus ojos, no pudo evitar recorrerlo con la mirada, aquello era confuso, nunca le pasó nada similar con absolutamente nadie, y ahora se encontraba en la sala del hokage, medio acalorado por la escena ya vista, aunque no lo terminara de aceptar, ver al rubio en esa situación le había parecido atractivo, tal vez demasiado. Cerró sus ojos y masajeó su cien. – ¿Qué demonios está ocurriendo conmigo? Es sólo el idiota de naruto... – Se decía una y otra vez en su mente, aquello era tan fuerte que ni siquiera el arrogante e indiferente Uchiha Sasuke podía ignorar.

–Ya estoy listo, Vamos. – Salió el rubio con su traje habitual. Sasuke se levantó y ambos salieron de la casa. Caminaron por la aldea, todos como de costumbre les miraban, a parte que eran atractivos de infarto, eran los actuales héroes de konoha. Finalmente llegaron a la torre, entrando así a la oficina del hokage. El rubio se sentó en su lugar y escuchó atentamente a lo que Sasuke quería hablarle.

–Como ya sabemos, los exámenes chūnin ya están próximos, Boruto debe entrenar fuertemente si quiere estar presente en él, yo quiero entrenarlo, pero necesita sus entrenamientos como equipo. Sin embargo, recuerdo que antes de yo haber presentado los exámenes, entrené con Kakashi sin ustedes. Pero, por ello necesito saber qué piensas. – Fueron las palabras precisas del Uchiha, naruto le miró extrañado, era inusual ver a su amigo pidiendo opiniones, luego recordó que él era el hokage y aparte, padre de Boruto, sonrió por omitir ese detalle al principio. – ¡¿Qué es tan gracioso idiota?! – Esputó algo exasperado el Uchiha.

–Cálmate, bastardo... Últimamente andas más amargado que siempre-dattebayo... – Respondió el hokage haciendo un mohín de niño malcriado. – Lo sé, bolt tiene el potencial para estar presente en los exámenes. Al igual que Sarada, he estado observando su entrenamiento en repetidas ocasiones. Pero Boruto deberá ganarse ese privilegio. Está próximo a cumplir los 13, sin embargo... – Se detuvo cuando escuchó que tocaban la puerta. –Adelante.

–Naruto, hemos enviado las respuestas. Hasta ahora, todos están de acuerdo, excepto el Raikage Darui, está en descontento y afirmó por medio de un e-mail que si no era visitado, no estaría presente en los exámenes chūnin que serán llevados a cabo en konohagakure no sato. – Habló con preocupación Shikamaru.

–Bah... No es como si fuese indispensable-dattebayo – Expresó el rubio, sin interés.

– ¡Naruto! ¿Sabes todo lo que podría ocasionar si falta uno de nuestros países aliados? A parte de eso, los ancianos Koharu y Homura también saben sobre el recién e-mail enviado por kumogakure no sato. – Le riñó el pelicastaño, le exasperaba que naruto en ocasiones se comportara de esa forma tan despreocupada.

– ¿Y cuál fue su conclusión? – Cuestionó Naruto, viendo que sí era importante, pero que particularmente a él no le importaba.

–Que deberás trasladarte hasta allá hoy mismo.

– ¿NANI? – Preguntó exasperado el ninja número uno.

– Todos hemos coincidido en eso naruto, viajarás por agua. Submarino o barco, cualquiera que decidas, serán privados.

– ¿Tienes idea lo molesto que es viajar en barco por tanto tiempo-dattebayo? Por lo menos Gai-Sensei no irá... – Decía poniendo cara de desagrado recordando el viaje que realizó hacia el país del rayo, donde Gai estaba presente y vomitaba cada 5 minutos.

Kizuna |EDITANDO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora