73º Juegos del Hambre (Todos los libros) TERMINADA

Ciento tres

Dentro de tres semanas Gale y yo viajaremos hasta el Capitolio para unirnos a la guerra, en todos los aspectos. Tendremos que pasar por una prueba de la Junta de Asignaciones para que nos indiquen un escuadrón. 

Katniss y Johanna se presentan en los próximos entrenamientos, aunque son asignadas a un grupo de chicos y chicas de entre catorce y quince años. Creo que vernos a Gale y a mi en otro grupo mucho mas avanzado les sienta como un bofetón en la cara, pero a Johanna no le sobran las palabras a la hora de ayudar a Katniss a motivarse. Los insultos a gritos de Johanna resuenan por todo el lugar. 

Es la primera vez que llueve desde que estamos aquí y nos sacan a correr fuera. Supongo que la guerra no se detiene porque llueva. Utilizamos la pista de nuevo y disparamos a los blancos en movimiento a través de la lluvia. A mi el agua no me molesta, es refrescante... 

Gale y yo nos enteramos de que Katniss y Johanna se han ido a vivir juntos a un compartimento. Los dos fruncimos el ceño cuando nos lo cometan durante el almuerzo. Eso no los lo esperábamos, pero creo que es porque las dos están decididas a ir al Capitolio y... en un principio no estaban incluidas en el equipo de soldados que vamos. 

Uno de los días volvemos a tener que desactivar bombas debajo de un coche, está vez vamos en equipo y nos toca hacerlo mientras practicamos en la Manzana. A nuestro jefe de equipo se le ocurre la genial idea de mandarme a mi a desactivar la bomba. Acepto la orden diciendo un "sí, señor" y me deslizo bajo el coche mientras mis compañeros de equipo me cubren. Bajo el coche me doy cuenta de que no solo hay una, sino dos bombas. ¡Genial! 

Desactivo las bombas y nuestro equipo acaba ganando al otro. Gale y yo hemos "sobrevivido". 

- ¡Buen trabajo, soldado Seasse!- me dice nuestra entrenadora antes de dejarnos ir a cenar. 

Eso me hace estar satisfecha. 

- Ya era hora de que esa mujer dejara de tomarla conmigo- susurro a Gale mientras recorremos los pasillos hasta el comedor. 

Es una cosa extraña que Peeta se una en uno de los almuerzos. Finnick y Annie abandonan la mesa los primeros en cuanto terminan de comer y Annie se pone un poco... histérica. 

Peeta hace un gesto con la cuchara para abarcar a Gale y a Katniss de forma sospechosa. 

- Entonces, ¿ahora sois pareja oficialmente o todavía colea el tema de los amantes trágicos?

- Todavía colea -responde Johanna sin gracia. Y no sé por qué me molesta la pregunta de Peeta. 

Unos espasmos hacen que las manos de Peeta se cierren en puños y se abran de manera extraña. Noto que a Gale se le tensan los músculos temiendo un altercado, pero se limita a comentar:

- No me lo habría creído si no lo hubiera visto en persona.

- ¿El qué? -pregunta Peeta.

- Lo tuyo.

- Tendrás que ser un poquito más específico -responde Peeta-. ¿Qué mío? 

- Que te han reemplazado por una versión mutante malvada de ti mismo -responde Johanna.

Lanzo a Johanna una mirada mortal. 

- Te estás pasando- gruño enfadada apoyando mi mano sobre la mesa en forma de puño. 

Después de eso abandono el comedor enfadada y le dejo la bandeja en la pila junto a las demás antes de salir hacia el entrenamiento de nuevo. 

Cressida nos graba junto a los cámaras durante los entrenamientos. Finnick está ahora en la misma clase que Gale y yo por lo que pasamos mucho tiempo juntos. No me molesta tener a las cámaras alrededor, así que ni siquiera atiendo a ellas mientras estamos en el campo de tiro. 

Gale, Finnick y yo pasamos las pruebas en la Manzana antes que el equipo de Katniss, porque estamos en un grupo más avanzado. No es de extrañar que el punto débil que me destacan en la manzana sean las bombas en sitios estrechos mientras está lloviendo. Es decir, crear una situación parecida a la de estar encerrada en un tanque de agua. Todo va perfectamente y cuando salgo de la última prueba me estampan en la mano el numero de mi pelotón: 451. Gale me espera junto con Finnick. Los tres estamos en el mismo pelotón y tenemos que ir a la sala de mando. Frunzo el ceño durante todo el camino hasta que llegamos allí y Boggs nos recibe en la puerta. "Una unidad especial de tiradores" según él. 

Sin más dilación nos anuncian que nos trasladaremos al campamento que han montado alrededor del Capitolio, mañana a primera hora. Será mejor que nos despidamos de nuestras familias, nos aconsejan. Obviamente, si me quedase una familia... 

Vale, esta parte de cómo pasamos de estar en el trece al Capitolio me la estoy inventando un poco, porque si habéis leído los libros y visto la película os daréis cuenta de que han cambiado todo el proceso.. así me estoy medio inventando el mío que es como una especie de mezcla...