Capítulo 14
—Mi señor, aún estamos a tiempo.
—Ya te he dicho que el tiempo es irrelevante, Coúbal.
—Hermano, aún tenemos una oportunidad. Él todavía no es consciente de su poder, todavía podemos salvarnos.
—No, hermano, le partiré por la mitad como hicieron con tu padre o moriré en el intento.
—Entonces, mi señor, moriremos.
----------
—¿Cómo que no podemos pasar?, soy el Instructor Kesna de la Flota de Eliminación y Barbecho de este sector, bajo la supervisión directa del Maestro de Flota Krant, confirma las órdenes con tus superiores.
Hubo un momento de silencio, durante el que la indignación del Instructor fue en aumento, directamente proporcional al empecinamiento del crucero de batalla que les cortaba el paso hacia la órbita de la nodriza insignia. Pasados escasos puntos de tiempo, el cristal de la nave les volvió a comunicar que su paso estaba terminantemente prohibido, bajo protocolo imperial.
—Lo siento, Carel —se derrumbó en la burbuja—, he hecho todo lo que he podido.
La aplicada alumna estudiaba, a través de la pantalla de visión física, la envergadura del crucero.
—¿Y si intentamos superarle? —preguntó tímidamente.
—Imposible —contestó tajante el Instructor, a la vez que la miraba con asombro—, eso —dijo señalando la nave que les retenía—, es un crucero de batalla deslindado de una nodriza de combate de la clase alfa ¿entiendes?
—No —respondió tontamente—. No lo entiendo, ¿puedes o no puedes?
Kesna se inclinó hacia delante, y cogiendo a Carel por su mano inferior izquierda, la obligó amablemente a que se sentara en la burbuja que estaba frente a él.
—Cuando los cruceros se separan de las nodrizas, es que se prepara una invasión —se detuvo un momento, la cara de la Nüwa era todo un poema—. El Instructor Jefe de esa nave tiene orden de abrir fuego contra todo lo que contravenga las órdenes del Maestro de la Flota y... —se sobresaltó repentinamente, a la vez que se encaraba con el cristal de mando—. ¡Ya lo tengo!
Carel que sorprendió, pero no dijo nada, se estaba acostumbrando a los cambios repentinos de Kesna, y cada vez, le gustaban más.
—Nos pondremos en contacto directo con el Maestro Krant a través de la Niss.
—Pero —arguyó la pupila—, tú no tienes enlace, sólo lo poseen los Maestros de Flota.
—Sí —tercio el Sutra—, sin embargo, también está conectada a todos los cristales orgánicos del Imperio.
—Me parece improbable —objetó Carel—, que enlace precisamente con el nuestro, o que se fije en nosotros siquiera.
—No te preocupes —contestó excitado por la idea tan buena que había tenido—, ordenaré al cristal que mande repeticiones de vocablos, a través de ella, con el enlace del Maestro Krant como receptor, hasta que nos conteste. Vocablos —explicó al ver la cara de incredulidad que se le ponía a su compañera—, como los que hemos aprendido de Coúbal.
Carel lo miraba pensativa, a la vez que añadía...
—¿Por ejemplo: Natuman, Natok, y cosas así?
—Afirmativo, ¿qué te parece? —preguntó mirándola a sus bonitos ojos rojos.
—Puede funcionar —contestó sonriente a su atractivo compañero, a la vez que se le acercaba mucho, mucho.
--------
El cristal de mando se iluminó lo suficientemente tarde como para que, la sufrida Nüwa, se iniciará en el "Seika Tanden" sin la presencia de su querida Maestra, como a ella le hubiese gustado. Después de todo, por la cara de placer que tenía Kesna y dadas las circunstancias, estaba convencida que no le había salido mal del todo. Otro punto a su favor para tener en cuenta, pensó complacida, era la falta de aparatos de estimulación artificial que la ayudarán en la tarea, lo mismo que carecer de plasma regenerador para el final de la unión.
El Instructor se levantó primero y se encaró con el cristal, repitiéndole su nombre, graduación y puesto en la Flota. Explicó el motivo de su intento de contacto con el Maestro de Eliminación y subrayó que llevaba un mensaje de tipo individual para el mismo. La Niss se mantuvo silenciosa unos momentos, durante los cuales ambos contuvieron la respiración. Finalmente se concedió la comunicación unilateral. La sorpresa vino cuando se dieron cuenta que lo unilateral sólo afectaba al Maestro de la Flota.
—Que la paz del Consejo os acompañe —la imponente figura de Krant, a escala natural, con su armadura de combate, ocupaba todo el centro de la sala—, esta comunicación ha sido autorizada por el propio Emperador —ambos se miraron impresionados—. Estamos a las puertas de violar todos los tratados intergalácticos del Consejo y atacar la zona de exclusión para dar caza al terrorista. Debéis tranquilizaros —aunque no podía escucharles, si podía visionarlos—, todo habrá acabado en menos de diez rotaciones* (Equivalente a 40 horas terrestres. E.I.B. de la F.P.L. Medidas y pesos. N del A.) y podréis reincorporaros a vuestros servicios.
Carel y Kesna se miraban sintiéndose incapaces. Sin comunicación no podían decirle lo que sabían y tan solo a Carel se le ocurrió mover los labios preguntando por qué.
Krant la miraba con aprobación, a la vez que se enorgullecía de ambos. Comprendió enseguida que sabían algo que no podían decirle, sin embargo, también comprendía, y ellos no, que la decisión del ataque venía dada por el mismísimo Arak Krant en persona, y que no había nadie en el Universo con autoridad suficiente como para cambiar eso.
—Hijos míos —Krant hablaba más para sí mismo que para ellos—. No sabemos de quién o de qué se trata —los miraba con condescendencia—, pero cada vez es más fuerte. Su última acción nos ha costado más de cuatro millones de bajas —Carel se puso las manos sobre la boca para no gritar, mientras Kesna resoplaba con desánimo—. Violó, sistemáticamente, todos los sistemas de seguridad de los cristales de cuatro nodrizas de apoyo, y los enlazó con la averiada del sector tres. Las abocó al desastre irremediablemente. El problema es que no sabemos como lo hizo. Teóricamente es posible, en la práctica jamás se había conseguido. Debemos medir su fuerza de algún modo o temer lo que no conocemos.
Krant, se rehizo estirándose todo lo alto que era y elevó su brazo cíborg hasta golpearse el pecho, dando por finalizada la comunicación. Miró a Kesna y después a Carel, y al leer de nuevo los labios de esta, sus ojos se dilataron por la sorpresa y el miedo. Entonces la Niss cortó la comunicación.
Kesna se percató del hecho y mirando interrogante a su compañera la conminó a que lo repitiera sin decir una palabra. De nuevo los labios de Carel formaron la palabra... Natok.
ESTÁS LEYENDO
HISTORIA DE LAS GRANDES GUERRAS. "G - 2° Gran Guerra"
Fiksi IlmiahSegunda parte, de las seis que consta, la saga: "Historia de las Grandes Guerras". Esta obra se presentó completa a los premios "Minotauro" de ciencia ficción en su apartado de novela larga. Recomiendo leerla en su orden correspondiente para que no...