Subi hasta la habitacion de Nick, antes de tocar respire profundamente.
-Adelante- se escucho decir desde dentro.
Entre y me lo encontre mirando aburrido a la television.
Se giro para ver quien habia entrado y se sorprendio al verme.
-¡Oh! Emma, ¿ya es viernes?- exclamo sorprendido- lo siento llevo mucho aqui tan aburrido y el tiempo pasa tan lentamente que ni me había dado cuenta.
-No importa- solté un risa nerviosa y me senté a su lado dejando mi cuaderno con algunas historias apuntadas.
-¿Qué es eso?- me preguntó.
-Ah, nada son solo historias de personas, son para una nueva sección del periodico-le explique.
Él asintió.
-¿Me las lees?.
Sonrei amablemente y comence a leerselas.
-Son muy bonitas, no sabia que habia gente con una vida tan mierda- miro a la nada pensativo.
-Bueno si, todos tenemos un pasado oscuro ¿no?- intente romper el silencio.
-Supongo- sonrio.
Nos quedamos un momento en silencio.
-¿Cual es tu pasado oscuro Emma?-me pregunto de la nada.
-¿Como?-pregunte desconcertada.
-Si te cuento mi pasado oscuro, ¿me contaras el tuyo?.
-Yo....pues....esto...-dije aun desconcertada.
Asintio con una sonrisa y miro al frente.
-Yo no soy de aqui-comenzo a relatar por lo que rapidamente tome mi cuaderno de notas para apuntar- naci en un pueblo no muy pequeño pero tampoco muy grande, cerca de aqui.
Mi madre era una mujer normal hasta que se caso con mi padre, el cual la obligaba a prostituirse para sacar dinero, el muy desgraciado se pasaba el dia emborrachandose y pegando a mi madre hasta matarla, se puede decir que me crie en un ambiente bastante hostil.
Era el menor de dos hermanos, mi hermano mayor fue enviado a reformatorio en dos ocasiones, dejandome a mi solo con mi padre, mi madre ya habia sido asesinada por mi padre tiempo atras.
Cuando mi hermano mayor no estaba yo era el que recibia todas las palizas y paga el mal humor continuo de nuestro padre.
La segunda vez que metieron a mi hermano en el reformatorio, cuando salio, no volvio a mi casa, me abandono.
Mi padre aun mas enfurecido por ello me pego hasta dejarme incosciente.
Durante unos años mi vida fue asi hasta que me escape.
Me viene aqui y ¿a que no sabes a quien me encontre? A mi querido hermano cobarde, desde que me abandono, durante su ausencia en mi vida fui creando hacia él un odio incontrolable, pero creo que le perdone, le perdone por todas aquellas palizas que habia tomado en mi lugar.
No se como volvimos a ser amigos pero de un dia para otro me envolvio en su mundo y sin darme cuenta me vi consolando a jovenes que timaba para sus drogas.
-Espera - le interrumpi- ¿tu hermano es....?.
-Si, mi hermano es Neal.
