El inicio de un amor Real©

Dentro de mi

Lo había jodido.

Lo había jodido lo peor que podía.

Nada de esto debía estar pasando, nada de lo que había planeado para esta noche había salido como quería, todo lo que pudo salir mal había pasado.

Solo había una cosa gravada en mi mente: Loriel jamás me perdonaría esto.

Jamás lograría su perdón. Y si por algún milagro lo obtenía yo nunca me lo perdonaría.

—Si sigues caminando como criatura enjaulada te volverás loco. —ignore por completo las palabras de Elrohir. —¿Qué fue lo que le hiciste? —me detuve en mi lugar y lo miré.

—Si te refieres a Eliana...

—Hablo de Loriel. —me corto enseguida. —¿Qué le hiciste?.

—¿Tú crees que le haría daño a la mujer que amo?. —negué con la cabeza y di unos pasos hacia él.

—Ya no se de lo que eres capaz Thranduil. —nunca había visto ese tipo de mirada en Elrohir, pero aun así no me interesaba si me creía o no, no me importaba el que pensara, solo deseaba ver a Loriel, ver que estuviera bien. —Te juro que si algo le llega a pasar...

—Su vida únicamente me debe interesar a mí, no tienes nada que ver en esto. Ni siquiera deberías seguir aquí.

—Lo único que me retiene aquí es Loriel, solo me iré al saber que ella está bien y saber por qué sangraba de esa manera.

Baje la mirada al suelo, tampoco me podía explicar nada de eso, jamás la lastimaría, nunca tocaría siquiera un solo cabello de Loriel. Aun así, era consciente que el daño de mis palabras fue más fuerte que el físico.

.—"Tenias razón, te odio".

Esas palabras se iban a quedar gravadas por siempre en mi mente, sus palabras y su mirada de odio que ni siquiera yo había iniciado.

¿¡Cómo todo esto podía haber sucedido!?, debí haber sido más cauteloso, no debía haberla dejado sola, estaba seguro que mi padre era el causante de todo este maldito problema. Él era el causante de que Loriel me odiara.

—Fue mi padre. —dije a la nada, Elrohir volteo a verme al haber dicho eso. Realmente no me interesaba si me escuchara o no, lo que necesitaba era algún tipo de apoyo, alguien que no me viera ver como el villano.

—¿De qué hablas?

—Mi padre esta obsesionado con el poder, no deseaba volverme rey, me lo dejo en claro antes de anunciar mi unión con Loriel, estoy seguro que el tuvo que ver con todo esto, le introdujo ideas, la manipulo para que pensara lo peor de mí y...

—Y tú lo ayudaste en todo. —lo mire. —Acabas de hacerle el trabajo más fácil, felicidades.

—¡Nunca pensé que Loriel podía creer lo que dijera!. —di algunos pasos hacia él, tratando inútilmente de justificarme. —Creí que lo nuestro era lo suficientemente fuerte para que no se dejara influenciar por otros.

—Piensa en esto, como demonios te sentirías al saber que estas en el lugar de una reina que nunca fue amada por su rey, que inicio como lo suyo un simple contrato entre reinos para que luego su rey la dejara a un lado sin voz o boto de su propio hogar, le fuera infiel y la dejara morir. —desvié la mirada a cualquier otra parte. —También sabe lo de Elianna y su repentina muerte antes de casarse, dime tu, quien no tendría dudas o miedo a todo este jodido circo.

—Le dije que la amaba, sabe que es mi vida. —ya no tenía otras palabras u otra escusa, tenía razón, sabía que tenía razón.

—Si yo tuviera la mujer que tienes al lado se lo recordaría día a día, mañana tarde y noche, el miedo que tienes es justificable y la seguridad que le des debe ser constante. No me sorprendería que trate de irse ahora mismo a su reino. —el miedo absoluto se acumuló en mi pecho, solo pensarlo o ver que se aleje de mi terminaría de matarme por dentro.