-¡Alejandro no entres muy profundo! –Caliope miro al niño mientras terminaba de extender la crema protectora a Alina
-¡Yo le vigilo! –Ángel grito desde el agua mientras se acercaba a su hermano
-¿No te bañas? –Damian se sentó en la toalla a su lado mirándola
-Ahora –Caliope guardo la crema y sentó a la niña en la toalla -¿Quieres jugar con el cubo y la pala?
Alina asintió con la cabeza y Caliope suspiro. En todo este tiempo no había logrado que dijera una sola palabra, tomo el cubo y se lo dio. Rápidamente la pequeña se puso en pie y se acerco a la arena mojada de la orilla, se sentó y comenzó a jugar con la tierra.
-¿Qué crees que le paso? –Damian miraba a la niña –Para dejar de hablar
-No lo se –Caliope frunció el ceño –Quizás fuera perder a sus padres, o que la separaran de sus hermanos, o estar en el orfanato No se que puedo hacer
-Dale tiempo –Damian sonrió mirándola a la cara –Estas a su lado y se nota que la quieres
-¿Cómo no quererla? –miro a la niña y después al agua, donde Ángel lanzaba a su hermano -¿Cómo no quererles?
-Tienes toda la razón –Damian miro a los niños, cerro los ojos e inspiro aire De momento se levanto de la toalla y le tendió una mano a ella -¿Vamos al agua?
-Esta bien –Caliope acepto la mano y se levanto, cuando estaba en la orilla cogio a Alina entre sus brazos y los tres entraron al agua –Tened cuidado
-No te preocupes –Damian le sonrió y le guiño un ojo, ella contuvo la respiración por un instante ¿A que venia esto? ¿Ese comportamiento? Alina se removió entre los brazos de ella haciéndola reaccionar, con cuidado y poco a poco metió a la niña en el agua sujetándola por la cinturita. Fijo la vista al frente para ver a Damian cargando a Alejandro sobre sus hombros y persiguiendo a Ángel que corria riendo.
Después de pasar la mañana en la playa regresaron a la casa, comieron en la terraza, disfrutando el aire puro y charlando animadamente Damian se ofreció a fregar los platos y ella se retiro a la sala con los chicos.
-¿Se han dormido? –Damian entro a la sala tras fregar
-Eso parece –Caliope estaba sentada en medio del sofá, a un lado Ángel dormía con la cabeza apoyada en un cojín y al otro Alina con la cabeza sobre la falda de ella.
Damian puso la tele un rato, aunque no podía dejar de verla a ella, se veía tan hermosa con los niños a su alrededor, sin darse cuenta se quedo dormido.
Caliope miro a su alrededor y sonrió negando con la cabeza, todos se habian dormido, incluso Ángel que estaba leyendo un libro en el sillón . Se incorporo tratando de no despertar a nadie y salio a la terraza a tomar el aire. En ese momento se le ocurrió ir a la playa, sola, relajarse bajo los rayos del sol y darse un baño. Después de todo los chicos estaban con Damian.
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Pasión Griega
RomanceUna llamada, un billete de avión y una cita con un abogado. Eso era lo único que Caliope esperaba encontrar al regresar a Grecia. Siete años llevaba ya fuera de casa, ¿Por qué? Por ella, por lo que era, por quien era. Con tan solo dieciséis años...