Capítulo 3. ¿Nueva empleada?

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Jorge POV.

Terminé de fumarme el cigarrillo, lo lancé lejos mientras que Mike se acercaba a mí.

-Mirá por allá -señalo a dos indefensas chicas, estaba claro que Mike las atraparía.

-Ve tú. No quiero polvo hoy, necesito pensar-dijo caminando lejos.

Entre al gimnasio, algunos estaban corriendo y otros hacían pesas. Ignorándolos me dirigí a los sacos de boxeo, necesitaba descargarme el enojo que sentía por dentro.

"Eres malo para ellos"

Golpeé fuerte repetidas veces, llegué al punto de que mis nudillos estaban rojos y habían algunas cortadas. Ahora estaba más relajado, sólo necesitaba golpear algo para relajarme.

Salí de allí y me encontré con Maddie, una de mis "amigas" era hora del polvo, eran otras cosas que... No nunca me relajaban, solo lo hacia para distraer mi mente.

-Vamos-dije al verla coqueta, no me importaban sus coqueteos.

-Ay, Jorge. Necesitamos pasar a otro nivel...

-¿De qué hablas?-espeté, sabía perfectamente que quería y no se lo daría.

-Es que creo sentir...

-No, entiende solo es sexo. ¿Entiendes? No sentimientos-expliqué fríamente-, mejor otro día.

Camine dejándola con cara deprimente, no sentía nada por ella. Siempre se lo expliqué, además no creía empezar una relación. Y menos con una de ellas, sabía que se acostaría con alguien más. Típico Zorra.

[...]

Llegué a las diez de la noche, a esa hora los mocosos estaban dormidos. Así que decidí traer a Leyla conmigo, si Maddie no me lo quiso dar pues aquí esta su remplazo.

Subí las escaleras en silencio, mientras que Leyla subía detrás de mí. Cuando llegamos a la última habitación, comencé con mi tarea.

Tiré de su ropa, la empuje sobre la cama. Y ferozmente comencé a besarla, causando un pequeño corte en su labio, ella se quejo cosa que no me importo. Deslice su ropa interior, acto seguido comencé a dar varias embestidas rápidas. Ella gimió ¿dolor? ¿la estaba lastimando? No me importaba, ella se ofreció se atiene a las consecuencias.

-Shhh-dije colocando mi mano en su boca, mientras proseguía con lo mío. Llegué al clímax, me quité sobre ella, y también me quite el condón que como odiaba.

¿Por qué las chicas no toman sus pastillas? Odiaba colocarme el condón, era incómodo para mí. Comencé a vestirme de nuevo, ella me miraba confundida.

-Es hora de que te vayas-hablé, no estaba de humor como para dejarla dormir aquí.

-¿Qué?-preguntó-¿Acaso no te gusto? Por qué dejame decirte que me lastimaste.

-Mira Leyla, he conocido mejores. Ahora no me importa si te lastime o no, veniste por voluntad propia-respondí con indiferencia.

-Me llamó Sheyla...-dijo comenzando a vestirse.

-Manchaste mi sábanas -le dije para que se enfadase, además no mentía. Pero estas no eran mis sábanas.

-Imbécil-mascullo, y salió furiosa de la habitación. Después de eso se escuchó un portazo, sin importarle que los mocosos dormían.

Me dirigí a mi habitación a darme una ducha y a colocarme la pijama, después iría a buscar algo a la cocina.

[...]

Terminé de hacer mi cereal y me dispuse a comerlo, ahora que el silencio era mi compañía. Un flash paso en mi mente en como le hable a Lety, fui malo con ella y dejé que el enojo hablase por mí. También me lleve por delante la moto que estaba cerca solo para calmar el enojo, lo cual no me importó. El idiota que la dejó ahí tuvo la culpa, estaba mal estacionada.

-Sr. Blanco, perdone por meterme en sus asuntos pero... Casi despiertan a Lucy-la voz de mi nana llegó a mi.

-No tienes porque llamarme así -dije sin mirarla.

-Disculpe pero solo soy una "empleada"-respondió, sabía que estaba enojada.

-Sabes que lo siento... así que no te comportes como una niña-dije, continuando con mi comida.

-Esta bien, solo quería decirte que a la persona a la que chocaste la moto, me costará muy caro, o bueno a tu...

-Cecilia-terminé por ella-, además, yo no tuve la culpa el estúpido la estaciono mal.

-Era una chica, y al parecer le importaba mucho esa moto -me corrigió, me sorprende el hecho de que una chica tenga una moto-, apesar de que me dijo que estaba bien, la noté un poco triste.

-Que ridícula, que Cecilia pagué por otra-propusé, solo se trata de una motocicleta.

-Tengo otra noticia -anunció antes de que me pusiese de pie-, será una nueva empleada en la casa.

-¿Nueva empleada? Estas de broma ¿no?-pregunté incrédulo.

-Sí, ella parece una buena chica-habló sonriendo. Supongo que tendré que aguantar a alguien más en esta casa.

Aunque creo que no será problema, solo trabajará aquí y supongo que ni cruzaremos palabras, ya que yo casi no me mantengo aquí.

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Un Color Nuevo Para Tu Mundo | JORTINI |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora