Tenia Que Ser Una De Las Doce [Justin Bieber&Tn]

«DESCUBRÍ QUE NO ES EL DEMONIO QUE YO PENSÉ»

  6:00 a.m.
¿Por qué seguía despierta? Estaba cansadísima, ansiosa por dormir. Le pesaba el cuerpo y se le cerraban los párpados. ¿Entonces por qué no lo hacía?

«Justin»

Cierra los ojos e intenta no pensar, pero todo intento le falla.

«Sí quería salir contigo»

Sonríe involuntariamente.

«Pero aún no era una cita»

Un extraño cosquilleo le nace en las entrañas.

«Uno de estos días, quién sabe, podemos tener una»

Involuntariamente comienza a canturrear una canción.

— Make it stop. It sounds so good. I just can't take no more.

Golpea los dedos sobre su pecho, siguiéndole el ritmo a la canción.

— But don't stop. Don't move; just keep it there.

Su mente gira en espiral, una y otra vez, a punto de ceder al sueño. Ya casi...Ya casi...

La puerta de su habitación se abre.

—Hora de despertar, dormilona.

La chica suelta una maldición.

—No quiero ir, Savannah.

—Sí, sí. Es lo que has dicho estos últimos días. Arriba.

Se cubre el cuerpo entero con la sábana.

—No quiero.

—Esto no será de este modo todos los malditos días del año, ¿verdad?

Se destapa un poquito.

— ¿Serviría para que no me obliguen a ir?

Su hermana se cruza de brazos.

—No. Levántate.

—Tengo demasiado sueño.

—No me interesa. Arriba.

La chica suelta un gruñido, pero accede.
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6:15 a.m. ¿Qué diablos podía hacer él despierto tan temprano y sin que su madre viniese a levantarlo, completamente listo para irse? Una dulce, angelical y maravillosa vocecilla acudió a su cabeza.

«Tu tipo de chica son las modelos»

Modelos. Mm. Para pasar el rato, quizá. ¿Qué era __________ entonces? ¿Un enigma? ¿La respuesta del karma?

—Es mi demonio personal —admite, sacudiéndose el pelo.

La puerta de su habitación se abre.

—Ya despiértate. Es...

Pattie parpadea, sorprendida.

— ¿Ya estás listo?

Él le sonríe.

—Sorpresa.

— ¿Qué haces despierto ya y arreglado? ¿Tienes prisa?

—No.

— ¿Entonces?

—No lo sé, mamá. Solo...no lo sé.

— ¿Tienes algo que hacer con la supuesta cita de anoche?

Sonríe involuntariamente.

—No.

— ¿Estás haciendo algo de lo que no deseas que me entere? Si es así, tendrás muchos problemas, muchachito. Dímelo, ya.

Agita los hombros.

—Anoche iba a salir con una Douze. Doble sorpresa.

— ¿Me estás gastando una broma?

—No. Ella me invitó a salir para agradecerme que la apartara de la trayectoria del coche.

Decide mejor contarle todo desde el principio. Desde luego omitiendo los besos y que la vio semidesnuda en su habitación. Es su madre. No se atrevería a juzgarlo.

— ¿Cómo diablos se te ocurrió aceptar ese trato? —gruñe molesta.

Bueno, tal vez un poco.

—Doscientos mil dólares sonaban muy bien, pero luego lo rechacé. Y pasó el resto que ya te he contado.

— ¿Y ya? ¿Crees que hiciste lo correcto?

—Acepté salir con ella sin que me pagaran. ¿Te parece poco?

— ¿Y por qué lo hiciste?

—No lo sé. Supongo que rodar por una pendiente me lavó el cerebro.

— ¿Seguro que es eso?

— ¿Qué otra cosa puede ser? O no me digas que crees que ella me interesa.

—Yo no lo dije, lo hiciste tú.

—No, mamá. Ella es una Douze.

—Y tú un Bieber. Uf, cuidado, niño. Hiciste un gran descubrimiento.

—Mamá...

—Nada, nada. Quiero que dejes a esa niña tranquila.

Él suspira.

—Siento mucha curiosidad. De acuerdo, tú ganas. Acepté salir con ella porque descubrí que no es el demonio que yo pensé. Sigue siendo mi demonio personal, pero...

— ¿Perdón? ¿Tú demonio?

Oh, no. Se le soltó la lengua.

—Sí, porque...se me aparece en... —le da un beso en la frente—. Ya me tengo que ir. Te quiero.

Pattie observa a Justin marchar. Desde que comenzó a cambiar, había dejado de decirle que la quería. Su niño, el real, estaba volviendo.

:')