Podría haber cargado con un millón de dólares en el bolsillo y probablemente no habría gastado ni cinco dólares. Después de todo, salir a comprar cosas era lo que últimamente más asía, así que descubría que todo aquello que le gustaba ya lo tenía. Tal vez le vendría bien comprar un collar para perros, de ese modo podría llevar a Kenny de la correa. Sonríe ante la idea, pero sabe que no es posible. Kenny era más alto que él.
— ¿Por qué no compras perfumes? —le sugiere Kenny.
—No. Mis gustos por perfumes son limitados.
— ¿Entonces?
—Tal vez vaya a una joyería, no lo sé.
—Bueno, yo solo espero que no nos atienda una chica.
Justin frunce el ceño.
— ¿Por qué no?
—Acéptalo, de caballero no tienes mucho.
— ¿Perdóname?
—Salió en las noticias el incidente que tuviste con las Douze en la cafetería.
Justin suelta una maldición.
—Yo solo la sujeté del brazo. Fue el otro maldito demonio el que comenzó a gritar. Ni siquiera la apreté fuerte.
— ¿Sabes que tu madre está preocupada? Piensa que enviarte a la misma escuela que las Douze es mala idea.
—Supongo entonces que desistirá.
—Mm, no. De hecho, lo contrario. Esperará a ver como reaccionas para tomar una decisión.
—Significa que si hago un escándalo me sacará de allí, ¿es eso?
—Creo que si lo haces tomará medidas más drásticas. Yo que tú intentaba buscar una manera de llevarlas bien con esas chicas.
—No, no hay forma. ¿Llevarme bien con esas perras? —agita la cabeza—. Es un rotundo no.
— ¿Comprendes ahora a qué me refiero al decir que de caballero no tienes mucho?
Justin suelta un gruñido y decide mejor dejar que sus ojos vaguen por el lugar, o la discusión podría ponerse fea. A lo lejos ve una pequeña carreta de flores, de todos los colores y tamaños, que era cuidado por una mujer de media edad. Las flores eran preciosas, y a las chicas, todas las chicas, les gustaban. La cuestión era escoger la flor indicada para la chica indicada.
Él sonríe cuando el plan perfecto se forma en su cabeza.
Se acerca hasta la carreta. El aroma de las flores hace que por un segundo se olvide que acababa de discutir con su guardaespaldas, que solía ser un gran amigo. La mujer de media edad le sonríe cariñosa. Tiene en la mano un ramo de rosas azules espectacular, llenas de vida y belleza.
— ¿En qué te ayudo, cariño? —le pregunta la mujer.
Justin señala al ramo de flores que tiene en la mano.
—Deme una de esas —dice—. Una sola, es todo lo que necesita.
Justin le entrega el dinero a la mujer antes de tomar la rosa. Preciosa y delicada, la flor parece aún más hermosa en sus manos que en las de la mujer. Pero él sabía que no era por él. La rosa por sí sola era hermosa. Sólo necesitaba unas manos igual de hermosas que ella, una sonrisa igual de encantadora que ella. Su plan vuelve a estallarle en la cabeza.
Le regalaría la rosa a la primera sonrisa bonita. A ver si no era un caballero
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Tenia Que Ser Una De Las Doce [Justin Bieber&Tn]
Romance¡Hola Beliebers! Buscan Una Buena Novela de Justin Bieber & Tn, Este es el indicado. ¿Quieren Saber que Ocurre? ¿Como termina tù Historia? Que Esperas, Ahora Puedes Leerla. ¡Espero Que Les Guste! ♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡