Tenia Que Ser Una De Las Doce [Justin Bieber&Tn]

«MI HIJA ES FELIZ GRACIAS A TI, JUSTIN»

  Justin llevaba a su madre del brazo, pero estaba ansioso por encontrar a la chica que lo volvía loco con tan solo agitar sus coquetas pestañas.
—Vaya —dice su madre—. La casa es preciosa.
—¿Verdad que sí? Lo mejor es que todos son sensacionales.
—Oh, recuerdo a cierto niño rebelde que se la pasaba todo el día maldiciendo a los Douze.
Justin se encoge de hombros, apenado.
—¿Fui un desgraciado, verdad?
—Un poco.
Justin gira hacia la voz de Beaumont, que le sonríe. Está acomodándose el saco mientras baja las escaleras.
—Pero eso ya es pasado. Lo que es pasado, es pasado, hijo. Además, sales con una de mis preciosas gemas. Le salvaste la vida a mi pequeña.
Justin sonríe apenado.
—___________ es una chica fuerte. Igual iba a salir adelante por su propia cuenta.
Él agita la cabeza.
—Mi pequeña estaba muy lastimada. Después de esa tragedia, sólo tuve pedazos de mi hija. Ahora ha vuelto a bailar sin parar, a cantar, sonríe todo el día, ya no tiene pesadillas. Mi hija es feliz gracias a ti, Justin. Incluso le han retirado los antidepresivos.
Justin sonríe con pesar. Oh, pasaba buenos ratos con el rarísimo efecto secundario de los orgasmos. Beaumont se acerca a Pattie, tomándole la mano y depositándole un beso.
—Usted debe ser Pattie, la madre de Justin.
Ella sonríe, asintiendo.
—Es un verdadero placer conocerla. Ha criado a un gran hombre. Claro que tuvimos que esperar un poco para verle salir. Tuve que soportar que insultara a mis preciosas hijas sin parar.
Justin le sonríe a modo de disculpa. Olivia baja las escaleras, agitando las manos al cielo sin parar.
—Ya no la soporto. Acabaré cayéndole a bofetadas.
Beaumont parpadea, sorprendido.
—Ol, ¿qué ha sucedido?
—___________ acaba de enloquecer. Le dio una crisis. De verdad, si no salía de esa habitación iba a terminar moliéndola a golpes.
Justin, angustiado, sube las escaleras como una bala.