«PARECÍA QUE AMBOS SE HABÍAN PUESTO DE ACUERDO»

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  Tantea las manos sobre el paquete que guarda en su mochila mensajero. De pie frente a la enorme propiedad, la chica comenzó a pensar que la mejor idea que se le pueda ocurrir para escapar de este lío era marcharse. Había estado haciendo grandes esfuerzos por no echarse a llorar, pero ese nudo devastador en el pecho seguía ahí. Y dolía, como dolía. Dolía porque su hermana, la dulce Olivia, le había comprado una cita. Dolía porque Justin se había acercado a ella solo para conseguir doscientos mil dólares. Dolía porque debió haberse dado cuenta antes de que alguna cosa extraña estaba pasando bajo sus narices.

Los portones de bronce se abren. Justin va impecable vestido de negro. Cazadora de cuero, jeans oscuros, y sus habituales tenis. La chica comenzaba a arrepentirse de utilizar un vestido negro. Parecía que ambos se habían puesto de acuerdo. «Tal vez Olivia le dijo», pensó. La chica contiene un grito.

— ¿De negro también? —él le sonríe—. Parecemos conectados.

Ella intenta sonreír.

—Mis hermanas insisten en que use negro.

— ¿Por qué?

—Dicen que es una manera de decir "estoy jodida, pero estoy bien".

«Pero no lo estoy», pensó.

—De todas maneras solo me siento cómoda con el negro. Detestaría usar algo que intente reflejar otros sentimientos que no estoy experimentando.

Justin la mira fijamente.

— ¿Qué te sucedió?

A la chica se le forma otro nudo en la garganta.

—No quiero hablar de eso. Es...doloroso.

Él inclina un poco la cabeza.

—Bien.

Justin le sonríe, inclinándose un poco hacia ella para besarla, pero la chica se aparta.

— ¿A dónde te apetece ir?

— ¿A dónde te apetece ir a ti?

— ¿De vuelta a casa? —intenta sonreír—. Últimamente soy la peor de las compañías.

—Yo tampoco, así que da igual. ¿A dónde te gustaría ir?

—Ya te dije.

Él vuelve a mirarla fijamente.

— ¿Por qué tengo la sensación de que no quieres estar aquí?

La chica contiene el deseo desesperante de llorar.

—Es porque no quiero.

— ¿Es por mí?

«No, es por tu apuesta con mi hermana»

—No, es por mí. Suelo tener esta discusión con mis hermanas. Ellas quieren que yo salga, pero yo no quiero.

— ¿Y por qué no? Te pierdes de cosas buenas afuera.

Ella se encoje de hombres.

—Bien, bien. Si no quieres salir, ¿qué te parece si cenamos en mi casa?

—Ese no era el trato con...

Ella se calla. Oh, no. Casi le confiesa que lo sabe.

— ¿El trato con...?

La chica agita la cabeza.

—Conmigo, claro. Yo...te invité.

—Mamá hizo la cena. Chilló de la histeria por no avisarle antes que iba a salir. Es que se supone que no debo salir.

— ¿Y no chilló de la impresión cuando supo que ibas a cenar conmigo?

Él inclina un poco la cabeza.

—No le dije que era contigo.

La chica vuelve a sentir la puñada de desilusión. Claro. A él no le gustaría que alguien se enterara de esta tonta e inútil salida.

—Justin —musita. Ya no iba a poder más con esto—. No quiero.

Él frunce el ceño.

— ¿No tienes hambre? No tenemos que comer.

Agita la cabeza.

—No quiero continuar con esto, por favor.

— ¿A qué te refieres?

—No quiero estar aquí fingiendo que quiero estarlo. Quiero irme a casa, quiero poder saltarme la comida y estar a solas. No quiero estar aquí...contigo. No quiero cenar contigo.

Justin frunce el ceño.

— ¿Entonces para qué demonios viniste? —suelta una carcajada—. Claro, desde luego. Es para alardear. Alardear que te besé, que acepté salir contigo.

Ella agita la cabeza.

—Lo lamento muchísimo —introduce la mano dentro de la mochila y saca un paquete enorme, que extiende hacia él—. Ten. Son los doscientos mil dólares que te prometió mi hermana.

Justin toma el paquete, sorprendido. Los ojos de la chica se llenan de lágrimas.

—El problema fui yo, no te preocupes. Me di el tonto anhelo de pensar que realmente te gustaría salir conmigo —se seca las lágrimas—. Aún es temprano. Tienes tiempo de invitar a una chica de las que te gustan.

La chica se da media vuelta y vuelve al coche. Justin, furioso, regresa al interior de la casa como alma que lleva el diablo.  


Ohh.. que mal... :'( 

Creo que estuvo algo triste este capitulo, pero espero que les guste, pronto mejorara. 


Tenia Que Ser Una De Las Doce [Justin Bieber&Tn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora