El chico de la puerta de enfrente.

Quiero que conozcas a...

Salí de casa de mis papas a las nueve de la noche y al llegar me encontré a Mario en la entrada del edificio.

- Hola Mario, ¿Cómo estás?

- Hola flaquita, bien, ¿y tú de dónde vienes?

- Fui a ver a mis papas, como hoy no tenía nada que hacer y ya hace unas semanitas que no los veía decidí ir a visitarlos.

- Eso me parece bien. Mau me dijo que te vio en la mañana y que te veías muy bonita, pero jamás imagine que tanto,

- Ah jajá no pues gracias. Ya me voy Mario, porque honestamente tengo mucho frio y quiero llegar.

- ¿Y si te cambias y nos vamos a tomar un café?
Regina está con Juanpa en tu departamento y pues no queremos interrumpir ¿verdad?

- Obvio no, espérame tantito, ¿Nos vemos en la portería vale?

- Vale.

· Hola chicos buenas noches.

· Hola __.

· Hola bonita ¿Cómo te fue?

· Muy bien, mis papas te mandan saludos.

· Gracias. ¿quieres cenar?

· Amm no gracias me cambio rápido y me voy, Mario me invito a tomarme un café, y pues no quiero hacer mal trio.

· Okay.

- ¿Lista?

- Listísima.

- Te quiero presentar a dos personas muy importantes para mí y después nos vamos por el café, ¿Está bien?

- ¿Y ahora a quien me vas a presentar?

- A mis hermanos.

- Wow. -Llegamos en menos de diez minutos, era un tipo bar pero un poco más decente en donde se encontraba Daniel Bautista y Jan Carlo Bautista.

- No lo puedo creer. Esta es la hermosa señorita de la que mi hermanito no deja de hablar ¡eh! Sus buenas razones que tiene.

- Pues no sé yo, pero mientras tanto Bienvenida a la familia.

- Amm... pues no sé qué les haya dicho Mario pero solo somos amigos.

- Que lastima.

- ¿Qué lástima? ¡Por dios! Mientras él no se anime yo Jan Carlo Bautista opino que hago muy bonita pareja con esta muñequita.- dijo con la severa intencion de molestar a su hermano.

- Tsss... te la quieren bajar Mario.-concluyo Daniel para hacerlo mas tenso

- No te metas con ella, sucio.

- Jajaja, chicos por favor si continúan comportándose así me puedo quedar con su mayorcito ¡eh!

- Ya dense por vencidos, la gane yo.

- ¿Me permiten tantito? Me está entrando una llamada.

- No te preocupes, te esperamos.

o Si bueno.

o ¡__! ¿Cómo estás? Soy yo Emilio Azcárraga,

o Hola, ¿Qué tal señor Azcárraga?

o Te tengo una propuesta muy interesante, es acerca de un proyecto, en honor a los grandes musicos y recaudar dinero para ayudar a algunas zonas pobres de Chiapas, te puedo explicar bien todo el día de mañana aquí en mi oficina. Esta un rumor muy fuerte de que tú y Mario son vecinos y que mantienen una buena relación, así que estoy pensando en que el también valla, sería una buena forma de promocionarlo, tu como Mario están llenos de admiradores, y ambos tienen admiradores en común, a muchos les gustaría ver este concierto de cerca, y que mejor que con las personas que admiran. ¿Te interesa?

o Claro que me interesa.

o Bien, llamare a Mario y le explicare todo eso.

o No es necesario, de echo ahorita me encuentro con Mario si quiere yo le explico esto y mañana nos vamos a su oficina, solo que ¿A qué hora estaría bien?

o A las once ¿Te parece?

o Si está muy bien.

o En caso de que Mario se llegara a negar le dices que depende que tan bueno hagan su trabajo la paga puede ser de hasta millones.

o Wow, estoy casi segura de que no se negara.

- __ ¿Quién es?

- Aguarda.

o Bueno señor hasta mañana.

o Hasta mañana __.

- Dany, Jan ha sido un gran placer conocerlos, pero Mario y yo tenemos negocios que tratar.

- ¿Negocios?

- Si Mario, negocios.

- ¿Sobre qué?

- ¿Alguna vez has tratado con Emilio Azcárraga?

- Por supuesto que sí. Nunca eh hablado con él pero lo conozco.

- Bien, pues la llamada que acabo de recibir es de él, y son negocios que pueden traer hasta a millones de dólares.

- Wow, hermanito yo creo que si tienes muchos negocios que atender, así que creo que lo mejor será que te vallas. __, a ver si algún día quieres ir a comer a la casa de los bautista, estoy seguro de que le vas a caer bien a mi madre.

- Uuu, emocionante. Gracias chicos.

¿No se están preguntando qué fue lo que Mario les estuvo diciendo a sus hermanos como para que me dieran la bienvenida a la familia y me invitaran a la casa de los padres de Mario? Bueno, la verdad es que yo sí, y fue algo que me estuvo inquietando toda la noche. Ese hombre me estaba robando el sueño, lo único que desee toda la noche fue salir corriendo de ese departamento para decirle a Mario todo lo que me hacía sentir, pero la verdad es que era casi imposible, ¿Y si el no sentía lo mismo por mí? Si, lo sé. Esa es la pregunta más estúpida que una persona se puede preguntar. ¿Por qué no simplemente se lo digo y ya? ¿Qué puedo perder? ¿Mi dignidad? Yo creo que nada, eso solo la vergüenza, no es más que el miedo el que se mete en nuestra cabeza y tememos tanto a que nos rechacen.

- Bonita, me voy a tener que ir, Emilio Azcárraga nos tiene una propuesta a Mario y a mí.

- ¿Sobre lo de Chiapas?

- Si, ¿Cómo sabes?

- Pues porque a mí también me llamo, pero lo rechace, le dije que no porque ya tengo otras cosas que hacer, y la verdad es que no me quiero involucrar tanto con Televisa.

- Bueno, está bien. Me tengo que ir, Mario me va a llevar.

- Pero ni siquiera has desayunado. Si te da tiempo, ¿A qué hora tienes tu cita?

- A las once.

- Bonita, son las nueve. Ándale te sirvo unos Hot-Cakes.

Desayune y me lave los dientes, Regina me dijo que como iba a tratar con una persona tan importante debería de ser un poco más formal, así que me puse un vertido, unos tacones y ella misma me maquillo y me plancho el pelo.

- Ya son las diez y cuarto, ya deberían de irse.

Toc, toc, toc.

- Ah de ser Mario. Ya me voy Te amo.

- Yo también. Suerte.