¡Me hacías tanta falta!

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- Hola buenos días.

- Buenos días bonita, ¿Cómo estás?

- Amm bien, no sé porque lo preguntas si es que vivimos en el mismo departamento.

- Sí, pero hay veces en las que me pregunto si sigo viviendo con la misma __que vivía hace algunos meses. Comprendo que lo de Mario te pego, pero en qué momento mi __, aquella niña dulce, risueña, la gran chef, mi amante, mi mejor amiga, mi hermana; ¿En qué momento se rebajó tanto como para estar a poco desmallar a una niña? Muchas han sido las zorras que se nos han cruzado en el camino, les hemos hecho muchas, pero siempre que se rebajan nosotras las hacemos arder por no rebajarnos con ellas. ¿Qué está pasando en tu vida que yo este ignorando? ¿En qué momento me comencé a ausentar tanto que ya ni siquiera sabes qué hacer con tu vida? ¿Qué te paso?

- Me enamore. Ignorando todas las veces en las que creí haberlo hecho, porque por primera vez sentí tantos sentimientos y emociones que nunca antes había sentido. Sentía que podía con todo. Me eleve a una altura que cuando caí no fue lento como subí, fue de un golpe, y fue un golpe muy fuerte. Pensé que él también me amaba, en Cancún estuvimos a punto de hacer el amor, nos besamos muchas veces también y eso me hiso pensar que...

- Que él también te amaba.

- Así es.- Le dije mientras ya no podía aguantar un segundo más, salían tantas lágrimas de mis ojos que hasta pensé que me iba a quedar seca por dentro.

- Ay mi niña ven aquí.- Me dijo mientras me daba un abrazo que ya necesitaba desde hace ya un tiempo.- Quiero que sepas que voy a estar aquí a tu lado para siempre, y mira tú no te preocupes que ese changuito guapo pues no es el más guapo que se va a cruzar en tu camino y tampoco el mejor. Hay muchísimos otros, y mejores. Y si no llega ninguno que te agrade, te prometo que me voy a casar con tigo, hasta por la iglesia y todo.

- Jajaja estas bien tonta.

- ¿Qué? de dónde vas a sacar a a otra persona con unas chichotas como las mías, y pues culo me falta pero eso se puede arreglar.- Me dijo mientras intentaba hacerme reír.

Me hiso mucho bien hablar con mi amiga, creo que hiso que me alivianara muchísimo, me dolió mucho lo que me dijo de que ya había cambiado, porque me lo decía ella, una chica que me conocía de hace Uff, desde que íbamos en quinto de primaria.

- Te tengo que decir otra cosa que es muy importante que sepas y quiero que seas la primera que lo sepa.

- ¿Qué pasa?

- Me aceptaron en las escuelas de estados unidos, me voy en dos semanas. El señor Azcárraga me regalo un departamento en California y pues es un muy lindo departamento y amplio.

- ¿Y te vas a ir?

- Tengo la oportunidad de triunfar en el extranjero, es una oportunidad que muy pocos tienen. Y pues si me voy. Es lo mejor.

- Te apoyo, pero nada de que ay mi nueva best friend en los United eh!

- Tranquila solo tengo ojos para ti.

- Pues más te vale. Me voy a ir esa semana con tigo para ayudarte a acomodar tu departamento y ver en donde vas a estar.

- Me parece perfecto.

Nos pasamos toda esa tarde viendo películas y comiendo pizza y palomitas, pero hubo un momento en el que Chucho el portero del edificio llamo para que bajáramos a recoger la correspondensia y bajo ella.

- Hola Chuchito, buenos tardes, vengo por mi correspondencia, ¿Tengo mucha?

- Son cinco sobres.

- Perfecto. Me entere que cumpliste años ¡eh! Muchas felicidades.

- Muchas gracias señorita Regina.

o Valla, valla. Es un placer por fin conocer a la talentosísima Regina González.

o Bueno pues ¿Qué quieres? ¿Te firmo un autógrafo?

o No sería tan mala idea, a la mal vibrosa de mi vecina le encantan tus videos.

o Pues cuando quieras.

o Pues no sé pero me encantaría que grabáramos un video juntas, no sería tan mala idea después de todo, tienes un gran sentido del humor.

o Pues tú no lo tienes. ¿Piensas burlarte de mí acaso? No te hagas la mosca muerta porque con migo nadie se mete, y con mis amigos tampoco. __ ha sido bastante linda con tigo.

o Jajaja, ¿Linda? Gracias a ella ahora uso este horrible collarín que llevo puesto.

o Entonces no te vuelvas a meter con ella, porque ella te lastima el cuello, yo te envió al hospital.

- Muchas gracias Chucho.

- Denada señorita Regina.

El chico de la puerta de enfrente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora