Cuando me asomé al piso de arriba las vi jugando con muñecas. Sara parecía llevar la iniciativa y armaba más escándalo. La otra niña sonreía pero decía poco, parecía muy callada. Tenía los mismos ojos verdes de Claire, y una bonita melena castaña que le llegaba por la cintura.
—Es mi hija —confesó Claire a mi lado, paralizándome.
—¡¿Tu hija?! —exclamé en un susurro—. Un momento, ¡¿esta tía es una MILF?!
—Hum —asintió con pesar enseñándome la mano izquierda. Había un anillo en el dedo—. Y estoy casada.
Se me cayó el mundo al suelo: ¡¿había ligado con una MILF casada?!
—P-pe... ¡¿pero cuantos años tienes?! —musité alucinado. Ella torció el gesto, me adelanté a corregirme—. P-perdón, qué maleducado, eso no se pregunta.
—Tengo 23 —respondió. La miré de hito en hito.
—Habría jurado que eras más joven.
Se puso las manos en las caderas frunciendo el ceño.
—No soy una niña.
—Ya, ya, eso está claro —repliqué entristecido—. Y... ¿quien es el padre?
—Mmm. Él no vive en esta casa —dijo como queriendo aliviar mi preocupación—, de hecho ésta es la casa de invitados.
—¿Casa de...?
Sonrió cerrando los párpados.
—Estaba limpiándola mientras él trata algunos asuntos. En realidad vivimos unas calles más arriba.
—Ooh... ¿Sois ricos?
—Hum —asintió—. La mitad del pueblo es nuestro.
Me quedé con la boca abierta.
—Anda ya.
Esta vez sonrió con tristeza.
—Él es el alcalde.
En serio, ligué con la chica equivocada.
—Pero un momento —me dije mirando a la niña que jugaba con Sara—, parecen de la misma edad —volví a mirar a Claire—. Significa eso que la tuvo con... ¿15 años?
—¿Qué? —se extrañó.
—Nada —cabeceé seriamente—, que diría que has desperdiciado tu adolescencia. Aunque yo no me diferencio mucho —me encogí de hombros antes de que me replicara algo malo—. Sachi es lo único que tengo. Es mi hermana —confesé bajando el volumen, con la mirada puesta en ella—, pero... Bueno, he tenido que ser su padre.
—¿Pasó algo con los vuestros? —preguntó dubitativa, combando las cejas.
—Sí, que son unos cabrones y nos abandonaron —bufé—. Solo eso.
—Mmm —torció los labios—. Lo siento.
—Ya, ellos no —creo que notó que odiaba hablar de ese tema.
—¿Cuanto tiempo os quedareis de vacaciones en el pueblo?
—Solo unos días, espero —no debía hablarle de mi verdadero propósito. Siendo bruja, probablemente intentaría impedirme que me hiciera con la piedra. Y como estaba casada con el alcalde, fijo que él era poderoso y SEGURO que estaba encargado de vigilar el laberinto—. Luego seguiremos nuestro camino.
—Os podéis quedar aquí, si quieres —dijo ofreciéndome la habitación—. Sachi puede dormir en el desván y tú en la habitación de abajo.
—No puedo aceptar eso —dije asombrado—, sería una molestia...
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Astral Arcana: Moon
ParanormalAntes de que se infectara con la Maldición de la Luna y se convirtiera en licántropo, Natham Oldstone solo era un jovena que buscaba una piedra capaz de resucitar a los muertos... ---------------- Primera precuela de Astral Arcana (horror y romance...