Cercana Obsesión

Capitulo 17

Trata de poner cara de poquer pero no le va, se sorprendido demasiado. Yo estoy en modo de tomate humanoide.

-Preciosa ven.-Tira de mi brazo y me guía hasta el sofá.

Susurra que no le importa y besa mi frente. Acurrucados vemos un tonto programa en la tele. Sus dedos trazan círculos en mi espalda baja.

-Es demasiado noche y tú tienes que descansar.- comenta.

-No tienes por qué irte- Rápidamente encojo mis hombros restándole importancia.

-No tengo pero es mejor para los dos, quiero llevar las cosas por buen camino.- contraataca.

-Lo que tú digas, nos vemos mañana entonces, jefe.

Lo digo con un toque de picardía, ¿Quién diría que yo iba a salir con mi superior?

Me toma la mano y la besa, se encamina hasta la puerta y sale como el más egocéntrico de los hombres.

Por mi parte me alzo del sofá y hago paso a mi habitación. Acostada miro arriba y pienso en todo esto. Necesito arreglar las cosas con Orlando, es una buena persona y tiene que aceptar mi relación con Joe. La situación no es normal, apenas Joe acaba de romper el compromiso con Margot y ya tiene una relación conmigo. Debemos ser prudentes en este instante y vernos esporádicamente. Unos meses seria lo correcto, pero no estoy segura de poder aguantar más cuando ya probé su narcótico.

La claridad se filtra por la ventana, hoy amanecí con cierto frenesí por ir al trabajo. Me prepare algo de café y coloque el teléfono en el amplificador, la lista es de Coldplay. Les he dicho cuanto amo esa banda. Su vocalista Chris Martin es... tan bueno. Yellow es una de mis favoritas, seguidas por Magic, A sky full of stars. Venero esta banda, vamos escuchen conmigo a Coldplay.

Decide antes que todo y como una persona que necesita que su único amigo la perdone, le envié un mensaje de texto a Orlando y rogué a los dioses de las amigas arrepentidas y que no puede evitar estar lejos de ellos que este contestara.

Es la hora del almuerzo y Orlando aun no me contesta, no quiero parecer desesperada pero mi mente está dividida entre llamarle o dejarlo así. La pantalla de mi celular se ilumina anunciando una llamada entrante.

-¿Todavía quieres hacer las paces conmigo?- La voz de Orlando cargada de nerviosismo provoca que mis labios se curven de forma instantánea.

-Es lo que más deseo.- Contesto con toda la sinceridad.

-Me encanta cuando tus mejillas tienen ese matiz carmesí.- Atisbo una sonrisa de supremacía en él.

-No puedes saber cómo estoy.

-Pues mira de frente.

Levante la vista y a través del cristal lo divise con la sonrisa torcida y unos pantalones caqui y una camiseta, muy informal. Finalice la llamada y con una verdadera carcajada tome mi bolso y atravesé la puerta, Orlando acorto la distancia y me envolvió en sus brazos. Es bueno recuperar una amistad como esa.