Un Milagro De Dios (EDITANDO)

Triste Despedida

Esta Mañana al despertar note que estaba sola ¿y Alex? Me pregunté ¿se abra ido ya? Me medio levanto y visualizo en seguida que su maleta estaba lista así que me calme, al menos ya sabía que aún no se había ido, me levanto por completo de la cama, la organizó, me dirijo al baño a lavar mis dientes y a medio organizarme un poco, tenía puesta la camisa de Alex así que me la quite me di una pequeña ducha, cuando salí pude notar que Alex no estaba en casa.

Abrí la ventana que da hacia el parqueadero haber si su auto estaba allí y para mi sorpresa su auto no estaba ¿á dónde habrá ido? Bueno volví a la habitación y levante las cortinas de la ventana que daba hacia la calle y pude notar que llovía a cántaros. Ahhh suspiro.

-hasta el cielo sabe que estoy triste, llueve como si fuesen mis lágrimas.

Por otro lado note que Alex había dejado su celular en la mesa de noche ¿pero donde está? Me dirijo a revisarlo pero ¿¡qué!? Su celular tenía contraseña 😒 bueno me quedé con las ganas. Mientras tenía el teléfono en mis manos escuche como la puerta principal se abría así que a toda carrera volví a dejar el teléfono en donde Alex lo había dejado y me siento en la cama.

Pasaron 30 minutos y nadie subió ¿será que me están asustando? ¿y si son ladrones? ¡hay Dios Mío, ayúdame! Tome valor y baje lentamente las escaleras y al dirigir mi mirada hacia la cocina allí estaba Alex, preparando un delicioso desayuno.

-buenos días amor. Dije

-oh, Hola mi reina, no pensé que estabas despierta.

-si hace más de una hora que lo estoy. Sonreí ¿dónde estabas?

-fui a tu casa, invite a tu família a almorzar aquí.

-¿¡en serio!?

-si amor, y de paso fui al super y hice un pequeño mercado.

Cuando el dijo pequeño mercado mire hacia donde el me señalaba.

-¿¡pequeño!? Eso no tiene nada de pequeño. Reí

Mientras Alex hacia el desayuno, encendí la televisión y estaban presentando la pantera rosa, me puse a mirarla cuando de repente Alex me llama a la mesa, fui y me senté olía verdaderamente delicioso. Sonreí

Desayunamos pero estuvimos en silencio, sin decir ni una sola palabra. Algo incómodo.

A los 5 minutos le suena el celular a Alex y el contesta.

Sus palabras fueron las siguientes: Aló, bien gracias ¿y tu muñeca? Aquí desayunando ¿y tu? Si tu también me haces falta, ya hoy en la noche te veré. Jajaja si ya se, puede que si como puede que no.

Hasta llegar al momento de que mi saliva no bajará, sentí como hervia mi sangre, sentí celos muchos celos 😠.

Más pude disimular, colgó su llamada más no me dijo con quien hablaba, mientras mi mente no dejaba de maquiniar. Termine el tan delicioso pero tan incómodo desayuno, me levanté de la mesa y me dirigí a lavar los platos, el nada que me decía nada.

Pasaron las horas hasta que siendo las 1:00 PM llegaron mis padres y mi hermano baje a recibirlos y les ofrecí unas preparadas.

Como siempre mi mamá que me conoce como la Palma de su mano me pregunta.

-¿esta todo bien?

-no. Le respondí

-¿porqué?

-hace rato recibió una llamada y era una mujer le decía mi muñeca y cosas como que la extraña y así.

-¿y que te dijo?